~Nuevo ciclo Lunar~

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♦ °XXVI° ♦

Narradora

Hotaru seguía sin decir nada, las manos en sus rodillas se movía de vez en cuando con nerviosismo.

Umi suspiro.

-Tetsuko, cariño. podrías ir ayudar a tu abuela- le pidió- seguro le esta costando hacer las cosas para la visita y atender el negocio al mismo tiempo.

-Eh? pero...- recordó la ultima vez que la anciana intento hacerlo todo sola- tienes razón será mejor que la ayude antes de que le grite a algún cliente.

La chica beso la frente de su madre y, de manera silenciosa, salió de la habitación.

Cuando ya no se escucharon sus pasos, la mujer hablo.

-Entonces... que es lo que quieres, Hotaru?

-Yo estuve hablando con Kanamori y quería saber...

Cabe aclarar que, desde pequeños, Hotaru siempre le a tenido algo de miedo a Umi pues esta solía golpearlo cuando este molestaba de más en la aldea, pero debido a la reclusión de Umi por su enfermedad estos ya no se veían, especialmente porque Hotaru se enfrascaba en su trabajo como herrero.

-Ajaaaa- inquirió.

-Quería saber... Como era tu matrimonio?- la mujer lo miro con sorpresa.

-Tu pregunta me ha tomado desprevenida- admitió- y mas tomando en cuenta que nunca te llevaste muy bien con Tetsumaru.

-Solo responde la maldita pregunta- gruño entre dientes.

-Pues... Tetsumaru era un hombre honrado, amaba su trabajo, pero siempre tenia tiempo para mi- sonrió- cuando quedo herido fue un golpe duro para él, pero siguió adelante como herrero y una vez que nació Tetsuko, todo fue a mejor para nosotros.

Hotaru la escuchaba con atención.

-Para que un matrimonio, o mas bien una relaciona de cualquier tipo, funcione ambas personas deben poner de su parte y tener un trato de equidad, no de igualdad- explico- es como Tetsumaru y yo llevábamos el matrimonio hasta el día de su muerte, fuimos muy felices.

La mujer sonrió con sinceridad, a pesar del dolor que le causaba la temprana partida de su esposo.

-Cuando Tetsuko empezó a seguirme...

-Ah! lo recuerdo- rio con burla, interrumpiéndolo- ella solo tenia unos 12 años cuando empezó a hablarme sobre su enamoramiento, aunque puedo recordar que desde muy niña ella solía mirarte cuando ibas a la tienda a comprar dangos.

-Desde muy niña...- susurro el hombre.

-Es por eso que estas aquí?- inquirió la mujer con una sonrisa- por eso estas preguntando sobre el matrimonio... quieres pedirme la mano de Tetsuko?

El hombre se sonrojo tras la mascara.

-NO!

-Entonces... tendré que comprometerla con alguien mas- la mujer sonrió con malicia- en sus cartas menciono a un chico llamado Tanjiro, tal vez el pueda casarse con ella.

-QUE!?- grito- Tetsuko no gusta de ese idiota a Tetsuko le gusto...

-Le gustas tu?- le interrumpió la mujer- pero por cuanto tiempo, Hotaru? Tetsuko no te esperara por siempre.

El hombre apretó los puños con fuerza.

-Yo solo... no quiero cagarla como la primera vez.

-Pero la primera vez tu no amabas a Hanami, verdad?- le recordó- en cambio con Tetsuko, es obvio que te gusta mi hija.

Silencio.

-Bueno si no te gusta tendré que...

-Me gusta, si me gusta. La amo de acuerdo?!- grito con fuerza.

-A... Quien?- se escucho una voz.

-Ara... Tetsuko- sonrió la mujer, quien sabia que su hija escucharía lo dicho por el hombre.

-Haganezuka-san...- llamo su atención- quien... quien le gusta, a quien ama?

-Si, Hotaru... quien es la afortunada?- ínsito la mujer, sonriendo con malicia, el hombre fruncio el ceño.

-Mujer tramposa- pensó con frustración al sentirse atrapado.

Tetsuko dejo la bandeja en una mesa aun lado de la cama de su madre y esta tomo uno de los matcha que había traído su hija junto con algunos dangos.

La menor se acerco al de mascara.

-T..Tesuko...- susurro con nerviosismo, escuchando como la puerta tras de el era cerrada- maldita vieja.

La chica lo miro con atención, Hotaru ya no podría escapar.

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CONTINUARA...

StorgeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora