Cuarto🌗menguante

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♦ ° XX ° ♦

Como dato de este capitulo algunas palabras estarán escritas ''de esta manera'' esto quiere decir que son parte de un recuerdo que pasa mediante se desarrolla una escena de la historia.

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Narradora

No sabia cuanto tiempo había pasado desde que iniciaron aquella batalla, pero algo era seguro.

Estaba apunto de amanecer.

Tetsuko estaba dando lo mejor de si pero algo estaba en su contra, la espada que le había forjado Hotaru estaba apunto de partirse en dos.

-Arg!- se quejo la chica al ser azotada, nuevamente, contra el suelo.

-Que pasa, ya no puedes moverte?- la tomo de la muñeca y la alzo con brusquedad- creí que ibas a dar mas pelea, que decepción.

El la arrojo nuevamente contra el suelo, la espada que le había dado su madre fue lanzada a un lado.

El demonio tomo la espada que le había forjado Hotaru y termino por partirla a la mitad.

Tetsuko solo lo miraba, afligida, sin poder moverse.

-Kekeke! he destruido la única herramienta que era capaz de matarme- nuevamente se burlo de ella- ah. El solo ver tu expresión al retorcerte de dolor, me llena de jubilo y éxtasis. Así que te dejare para el final, como un rico y delicioso dulce. KEKEKEKEKE!

El demonio le dio la espada mientras aun reía.

-Una vez esta asquerosa villa este destruida, le daremos un gran golpe a los cazadores de demonios- siguió hablando mientras se alejaba- y si los debilitamos la cabeza de ese maldito Ubayashiki estará justo en la entrada y yo me convertiré en una luna demoníaca kekeke!

Tetsuko no podía escuchar lo que decía, aun seguía aturdida. Giro un poco su cuerpo y miro el cielo, el sol estaba apunto de salir y el demonio iba a escapar.

Bajo la mirada y se encontró con aquella nichirin que le había dado su madre.

''-Fue forjada por tu padre, como un pedido.''

Recordó las palabras de su madre.

Cerro los ojos un momentos, la sangre que brotaba de una herida en su cabeza le obstruía la vista. En ese punto, lo único que la mantenía con vida era su espíritu de lucha y sus ganas de poder volver con sus seres queridos.

Fue cuando la mente de la chica le jugo una buena.

''-Tetsuko, sabias que puedes crear tu propia postura dentro del aliento de la llama?

-En serio?!''

Frente a ella apareció una figura familiar, Tetsuko se estiro tratando de tomar la mano que le ofrece, esta resultaría ser el mango de aquella espada.

''-Así es. Actualmente, existen nueve posturas diferentes.

-Y tu crees que yo pueda...?''

Una vez que consigue tomarla, solo le queda ponerse de pie.

''-Por su puesto, pero debes entrenar lo suficiente y volverte muy fuerte para poder lograrlo!

-Pero... y si no llego a ser lo suficientemente fuerte? aveces me paralizo cuando veo algún demonio.''

Pero no esta consiguiendo que su cuerpo reaccione, aquella mano fortaleció el agarre para poder reconfortar le.

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