🌗Cuarto menguante

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♦ °XIX° ♦

Narradora

Se sentía extraña.

Sin embargo, aquella sensación no le desagradaba.

Ella se sentía tranquila, ligera. Se sentía en completa paz.

Siguió su camino por aquel pintoresco sendero, encontrándose con un puente de madera, varias personas se encontraban cruzando por este y, al igual que ella, se veían en completa calma.

Tetsuko se sintió guiada por una fuerza invisible, la cual la impulsaba a cruzar aquel puente.

En cuanto dio el primer paso a este, sintió como tocaban su hombro para luego hacerla retroceder.

La chica giro sobre sus talones y sus ojos se abrieron a mas no poder.

Aquel toque, junto a la imagen de aquella persona frente a ella, la sacaron de aquel estado de paz en el que se encontraba.

Y lloro.

-No creí que te afectaría tanto verme, Tetsuko.

-No lloro por ti, lloro por mi!- dijo para luego llorar mas fuerte- estoy muerta!!

-No abrazaras a tu adorado padre? -el hombre rasco su nuca- creí que este encuentro seria mas emotivo.

-Estoy... estoy muerta... He muerto... no pude decirle lo que sentía a Haganezuka-san... he dejado a la abuela y a mamá solas...

Se cayó al sentir un fuerte golpe en la cabeza.

-No estas muerta, tonta... no aun- le dijo su padre para luego ayudarla a ponerse de pie.

-A..Aun..?

-Tu vida esta pendiendo de un hilo, Tetsuko.

-Que...? yo... yo mate al demonio...

-Y él casi te mata a ti, ahora solo queda esperar a que sobrevivas... de por mientras, estas aquí. Hablemos, si?

Ambos se sentaron a la orilla de aquel tranquilo río.

-Como están mamá... y Umi?

-La abuela esta bien, aunque me molesta un poco que siempre aparezca de la nada e intente conseguirme un pretendiente.

-Mamá siempre a sido así, después de todo pertenece a un clan que sirvió como protector de una familia noble -menciono con gracia- una vez que se caso con mi padre, tu abuelo, su familia le dio la espalda y ella dejo el trabajo de Shinobi. Tu abuela solo me tuvo a mi, por lo que puedo entender sus ansias de tener bisnietos. Que me dices de Umi?

-Mamá... Ella no ha estado bien de salud, se que intenta ser fuerte por la abuela y por mi, por eso... no puedo evitar preocuparme.

-Tu madre es fuerte a la par que orgullosa -le menciono con una melancólica sonrisa- ella nunca admitirá que tan mal se encuentra, pero dejara que cuides de ella. Te ama, Te amamos... siempre se tomara en cuenta tu opinión y preocupaciones. Entendido?- ella asintió- Bueno... se nos acaba el tiempo, ya debes irte- le menciono para luego, ambos ponerse de pie. él abrazo por ultima vez a su hija- Estoy orgulloso de ti, Tetsuko. Te haz vuelto una gran cazadora y mujer, sigue así.

-Si- ella pensó un momento- papá... aquella nichirin que hiciste para mi. Mamá dijo que fue un encargo.

-Nichirin...? OH! Te refieres a esa nichirin. Pues veras, Tetsuko. Eso fue idea de Ky...- Tetsuko vio un resplandor a espaldas de su padre, era como el fuego.

-Ya es hora, Kitaeru-saangg!!- Tetsuko había tacleado al joven pelos de flama.

Ella se abrazo a él, reprimiendo el deseo de llorar.

-Vaya!- rio su padre- Se la encargo, Kyoujurou-dono.

-Padre...- Tetsuko vio al hombre aun sin soltarse del chico.

-Pórtate bien... Tetsuko, Estoy orgulloso de ti, no importa que. Espero no verte pronto por acá!- fue lo ultimo que dijo para luego desaparecer por aquel puente.

-Hey, Tetsuko! Es hora de irse...

-Kyo!! -Sollozo-  Yo... no pude despedirme de ti... no correctamente...- lo miro mas atentamente- Kyoujurou yo...

Se callo al sentir los labios del Rengoku sobre los de ella.

-Ah... Yo...

-Kyo...?

-LO SIENTO! ES SOLO QUE... TE VEÍAS TAN VULNERABLE Y LINDA...-tosió un poco y se alejo de ella- lo siento...

-Entonces... Era cierto?

-Uhm...?

-Me refiero a... Tus arrepentimientos...

-Oh...- miro al cielo un momento y luego a la chica frente a él- no sirve de mucho que lo diga ahora pero... Me gustas, Tetsuko. Te amo... Y se que no debería decirlo ya pero... Es algo que debía decir.

-Yo... No puedo corresponder a sus sentimientos...

-Tetsuko, no tienes que...

-Pero los acepto! Los acepto y los haré parte de mi. Siempre estuviste para mi, siempre me ayudaste... Gracias, Kyoujurou.

-Si- sonrio para luego darle un beso en la frente- me quedo tranquilo -tomo ambas manos de la chica- estas en buenas manos.

-Que quieres decir...?

-Es hora de que despiertes, Tetsuko.

-Kyo...?

-Despierta, Tetsuko.

-Que...?!- una brillante luz termino por segarla.

"Espero que en otra vida nos volvamos a encontrar"

Momentos después de eso, Tetsuko abre los ojos y, aunque se extraña un poco, enseguida reconoce el lugar donde se encuentra.

La enfermería de la finca mariposa.

Miro a su alrededor, tanteo con sus dedos las sabanas que la cubrían.

Todo aquello había sido tan real.

Ya no pudo soportarlo mas... Y rompió en llanto.

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CONTINUARA...

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