🌙Luna Creciente🌙

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♦ ° III ° ♦

Narradora

Tetsuko había llegado a la finca mariposa, después de cumplir una difícil misión.

Esta se encontraba hablando con la pilar insecto, Shinobu.

-Por cierto, Shinobu-san. Sabe algo sobre un chico llamado Tanjiro Kamado?

Shinobu asintió y le explico la situación en la que el chico y su grupo de amigos habían llegado a la villa mariposa.

Esta comprendió y se despidió de su amiga.

En su camino se encontró al joven de cicatriz.

-Hey! Hola, tu debes ser Tanjiro Kamado-san. Es un placer conocerte al fin- saludo, feliz, la chica- mi nombre es Tetsuko Kitaeru, 19 años, Rango Kinoto.

-Mucho gusto!-  saludo realizando una reverencia.

-Que enérgico eres, justo como Haganezuka-san te describió- comento la chica.

-U..Usted conoce a Haganezuka-san...- pregunto mirando a la mascara okame de la chica

-Por supuesto! Al igual que tu, él también es mi herrero predilecto- rio ante la cara de asombro que tenía el chico.

-Ya veo- suspiro- yo fui descuidado, y mi espada se partió a la mitad en mi ultima misión- explico- Haganezuka-san debe estar muy enojado, pero yo casi muero!

-Seguro que si esta molesto, pero no debes preocuparte por eso- sonrio y luego agregó- por cierto, Shinobu-san dijo que tus heridas han sanado rápidamente, es un alivio.

-Si!

En eso el cuervo de Tanjiro le avisa que su herrero, y el herrero de su amigo Inosuke, se encontraban en camino con sus espadas nichirin.

-Vamos juntos, Kamado-san- la chica sonrió, tras la mascara, al verlo asentir.

-Ah! También tenemos que avisarle a Inosuke.

Ambos se dirigieron a buscar al amigo del frentudo.

-Quien eres?- lo primero que hizo el de cabeza de jabalí, fue señalarla de manera grosera, siendo regañado por el Kamado.

-Soy Tetsuko Kitaeru, tu debes ser Inosuke- dijo feliz, la chica.

-Soy el gran Inosuke Hashibira. Recuerdalo, Sukoeru Tetkita!

-Esta bien, lo recordaré- sonrió sin darle importancia a su nombre mal dicho- vamos, Haganezuka-san debe estar por llegar.

Al salir, Tetsuko vio a Kanamori y a Haganezuka.

Tanjiro saludo a Hotaru pero este le respondió atacándolo con un cuchillo y persiguiéndolo así, por una hora.

Ya cuando terminaron el espectáculo, todos entraron a la villa.

-Me sorprende verte aquí, Kitaeru-chan- le dijo Kanamori- va a cumplir alguna otra misión?

-En realidad... Recientemente estoy de regreso.

-Ya veo, me alegra que regresarás con bien- respondió Kanamori- todos en la villa estaban preocupados.

-Aveces exageran- la chica rio con ternura.

Ambos siguieron hablando, mientras Haganezuka molestaba a Tanjiro.

Entonces vieron como Inosuke se levantaba y buscaba rocas cerca del estanque de la finca.

-Inosuke-dono?- lo llamó Kanamori.

De repente, Inosuke empieza a golpear su nichirin fuertemente con una roca hasta dejarla astillada.

-AH!? TE DESTROZARE, MALDITO MOCOSO!!- grito Kanamori mientras era detenido por Tanrijiro, quien se disculpaba por ambos.

-Oh~ nunca había visto a Kanamori-san perder los estribos de esa manera- dijo con sorpresa la chica- eh, Haganezuka-san?

El hombre se levanto y fue directo a la salida.

-Vámonos, Kanamori. Ya terminamos aquí- le anunció.

-Ah! Esperen, yo también regresare con ustedes. Solo debo despedirme!- dijo para luego salir, sin antes gritar- no se vallan sin mi!

La chica se despidió de los habitantes de la finca mariposa.

Cuando termino se encontró con Tanjiro e Inosuke quienes se despedían de los herreros.

-Ah! Nos vemos Kamado-san, Hashibira-san. Fue un placer conocerlos!- se despidió para luego correr tras sus amigos- Les dije que no se fueran sin mi! Moo~

-Lo siento, Kitaeru-chan. Intente detenerlo...

-Tranquilo, Kanamori-san. Yo mas que nadie se lo impaciente e impulsivo que es Haganezuka-san.

Ambos rieron y el nombrado solo gruño.

El sol se estaba ocultando y el trio de amigos decido que era prudente pasar la noche en una posada, pues aun quedaba mucho camino por delante.

Bueno, mas bien, Tetsuko y Kozo arrastraron a Hotaru hasta la posada.

Al llegar lo primero que hicieron fue tomar un baño.

Obviamente por separado.

La joven se desnudo y quito los vendaje, ligeramente ensangrentados, que cubrían su cuerpo.

Seguido de esto se metió en las aguas termales, soltando un suspiro al sentir como el agua tocaba sus heridas.

-Esto es muy relajante~

-MALDICIÓN! -escucho la voz de Hotaru al otro lado.

-Se encuentra bien, Haganezuka-san?- pregunto un tanto preocupada.

-Todo es tu...!- fue interrumpido por su repentina risa.

Kozo le había hecho cosquillas para que se calmara.

-No te preocupes, Kitaeru-chan. Haganezuka-san solo fue un poco torpe.

La chica se encogió de hombros y paso sus manos por su cuerpo, quitando con delicadeza la poca sangre que escurría de sus heridas.

Luego de unos minutos, salio del baño ya mas relajada y se dirigió a su habitación.

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CONTINUACION...

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