Escucho las gotas caer, escucho a la ciudad hablarme, puedo escucharme a mi mismo en paz.
Escucho tu corazón y siento el calor que tu cuerpo produce... estamos los dos escuchando como el cielo se cae mientras los dos creamos un recuerdo que llevaremos en nuestra cabeza cada que al cielo se le ocurra tirarnos agua.
Las luces que la ciudad emite solo me recuerdan la gran cantidad de estrellas que puedo observar junto a ti... aun siendo tu la mas brillante de ellas.
Esta llovizna no es solo mas que una excusa para hacer pastel junto a ti, no es solo mas que una excusa para estar junto a ti.
Abrazar tu bella cintura por la espalda y oler tu cabello, abrazar tu alma y sentir tus destellos.
Eres aquella llovizna que huele a tierra mojada, dandole color verde a mi vida aunque te quedes empapada.
Desde que te conocí en aquel pasto verde... mientras veíamos como la vida avanzaba y recuperaba el amor hacía mi paz, encontré en ti nubes que nos darían los mejores climas, que nos dirigirían a los mejores paisajes. Encontré en ti un mundo que quiero explorar, un ecosistema que quiero estudiar.
Eres la llovizna que quiero acariciar una noche y oler en la mañana. Eres eso que quiero acariciar toda mi vida.
Eres eso que amo, que anhelo.
Eres la lluvia que me calma.
