HACKER [Min Yoongi]

15. Telepathy

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Yoongi solo me dió un beso y se fue. No esperaba esa reacción de su parte, parecía confundido, aunque seguramente creyó que yo no sabía lo que decía. Suspiré pesadamente antes de tirarme en el sofá.

...

Llegué a la universidad nerviosa, esperando encontrarme con el. Tenemos que hablar, aunque pueda ser algo incómodo ya que supongo que ambos sabemos lo que pasó.

No me tocaba con el en la primera clase, asi que decidí dejar mis cosas en el salón, e ir a buscarlo a donde sea que estuviera.

— ¡Seokjin! —grité— ¡Hola!

— Hola __________ —sonrió—, ¿qué pasa?

— ¿Viste a Yoongi?

— Vivo con el, pero hoy salió antes de casa, así que no lo he visto.

— Tendré que buscarlo en otra parte. Gracias Seokjin.

— De nada —sonrió—.

Corrí hacia otro pasillo, buscándolo con la mirada, mientras que las personas que estaban cerca, se me quedaban viendo.

Ya sin ánimos, caminé directo a mi salón, viendo cómo In Ho salía de ahí.

— Te estaba buscando —me tomó de la mano—.

No tuve más opción que seguirlo. El a veces puede ser algo... agresivo o rudo.

Habíamos llegado a la cafetería, dónde estaba otro chico y a su lado In Ha tomándolo de la mano.

— ¿Realmente están saliendo? —sonreí— wow...

Ambos rieron, hasta que In Ho me tomó de la muñeca y me hizo girar a verlo. No hará lo que creo ¿verdad?

Había sacado una caja de chocolates de su mochila, y me la entregó. Maldije por dentro, mientras intentaba no parecer incómoda.

— __________, sabes que me gustas desde hace un tiempo, y es por eso que quiero preguntarte... ¿quisieras ser mi novia?

Vaya, sinceramente ya lo veía venir. In Ha seguro le ayudó a planear esto, y por eso ahora el se estaba declarando frente a su hermana y su cuñado.

In Ha me daba ánimos a aceptar, pero yo aún seguía estática por aquel suceso. Esto no me podía estar pasando.

— Yo —fuí interrumpida por el fuerte sonido de el timbre—... te diré al final de clases.

Salí huyendo de ahí, y corrí hacia mi salón, dónde recién estaba por entrar el maestro.

...

El tiempo pasó muy rápido, y justo ahora, caminaba en dirección al salón de mi tercera clase, donde se supone, debe de estar Yoongi.

Suspiré antes de ir a mi lugar, pero no pude, ya que alguien me sacó de ahí corriendo.

Si... era Yoongi.

Ambos nos detuvimos en el patio, frente a un árbol. Me indicó que me sentara junto a el, y eso hice.

— ¿Dónde estabas? estuve buscándote.

El me miró a los ojos. Usualmente sus ojos brillan, pero hoy lo hacen mucho más.

— Fuí caminando a tu casa, pero ya no estabas ahí y llegué algo tarde.

Ni uno dijo nada, yo mantenía la cabeza baja, mientras que el bebía agua.

— ¿Aceptas que seamos novios?

Lentamente subí la cabeza, intentando verlo a los ojos, y lo conseguí. Estaba muy avergonzado, y se notaba en sus mejillas rojas.

— Se supone que yo debí hacer esa pregunta.

Ambos reímos. Yoongi se recostó sobre el césped, y yo continúe viendolo.

— Está bien si aún no quieres. Ir demasiado rápido es un poco peligroso, e ir demasiado lento es algo aburrido.

El suspiró, mientras cerraba los ojos. Por la forma en la que se estaba comportando, me daba miedo saber su respuesta.

— No vayamos tan rápido, o tan lento. Vayamos a nuestro ritmo.

Dijo levantándose rápidamente del césped para besarme. No lo veía venir, no esperaba que hiciera eso.

Se separó lentamente de mis labios y se escondió en mi cuello.

— Salgamos.

Rápidamente sonreí, lo abracé y el hizo lo mismo, tirándome al césped, mientras me daba un beso en la mejilla.

No tardó mucho, antes de levantarse y sentarse. Sacudí su cabello, obteniendo un gruñido de su parte.

— Vamos a clase —dije poniéndome de pie—.

— ¿Crees que nos dejarán entrar? —rió tirándose nuevamente al césped— es tarde. Deberíamos quedarnos aquí mejor.

Tomé mi celular y revisé la hora. Tenía razón, era muy tarde para querer entrar a clases.

Nuevamente me senté en el césped a un lado de Yoongi, quien tenía los ojos cerrados.

Aproveché su estado para poder tomarle algunas fotos. Siempre se ve lindo, pero especialmente hoy. O quizás es porque ya puedo llamarlo: mi novio.

Seguí tomando fotos, hasta que abrió los ojos asustandome.

— ¿Qué haces? —rió— parece que tomarme fotos es tu hobby.

— ¿Eh? No, para nada

El río dulcemente mientras tomaba mi mano. La próxima clase comenzaría en 20 minutos, así que me acosté en su pecho. El sonrió y nuevamente cerró los ojos.

Realmente me gustas Yoongi.