HACKER [Min Yoongi]

5. Hacer las cosas bien

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—No la enciendas... esto es lo mejor por ahora.

Ambos nos quedamos en silencio, solo se escuchaba su respiración algo agitada ¿estaba nervioso?

—Hola... __________ —dice lentamente—.

—¿Quien eres...? —suelto confundida— ¿por qué me trajiste aquí?

—En persona no me conoces... pero seguro sabes quién soy.

—No, no se quien eres.

—¿No recuerdas la primera nota? —dice soltando una risa leve—.

—MYG —digo incrédula—, ¿no es verdad?

—Debo admitir que realmente pensé que no sabías quien era.

—¿Cómo se que realmente eres tú? —suspiré creyendo que era una broma—

—¿Por qué alguien que no conoces y que por obviedad, no le has contado sobre las notas... sabría sobre ellas?

—Dime ¿por que lo haces?

—Te lo había preguntado antes... "Si yo te dijera que estoy enamorado de ti y que te amo... ¿me creerías?"

Dice mencionando la frase de hace unos días, lo cual hizo que me sorprendiera un poco al escucharse cada vez más cerca.

—Lo único que hago es pensar en ti... no estoy mintiendo.

—Pero... no te conozco —solté un suspiro, cuando sentí que se posicionó a mi lado—.

—No me conoces y no lo harás pronto, hasta que sea el momento, y para ser sincero, tengo miedo.

Ambos nos quedamos en silencio un largo rato. Si... se sentía muy incómodo.

—¡Bien! —pausó un momento— lo dije, tengo miedo a ser rechazado.

—¿Qué es lo que planeas hacer? —dije intentando verlo— aún no tienes mi respuesta.

—Intentaré enamorarte, si lo consigo, te diré mi otro plan. Sí no, estará bien... no tendrías que sentirte incómoda conmigo porque no sabrás que fui yo.

—Quiero saber quién eres, quiero conocer a él autor de las notas.

—No es el momento, aunque... quiero hacer algo.

No dije mas, cuando sentí que unió mis labios con los de el, sus labios eran carnosos, y puedo suponer que es más alto que yo porque tuvo que inclinarse.

Ahora, no puedo pensar en nada, es como si solo fuéramos el y yo en el mundo, ¿ridículo? lo sé, pero sus labios... por Dios, alguien me abrió las puertas al paraíso, son simplemente perfectos.

Despues de un rato, se separó de mi por falta de aire, sentí como mi corazón latía realmente rápido, creo que moriré, y se porque razón.

—Soy un imbécil, yo lo siento mucho, se que no debí apresurarme, solo que, quer...

Esta vez yo no lo deje terminar, tomé con ambas manos el cuello de su camisa para acercarme a su labios y le decirle:

—En estos momentos no me importa...

No pasaron ni cinco segundo, cuando yo ya estaba besandolo. El me sentó sobre una mesa que había en ese lugar y continuamos besándonos, estaba acariciando mis muslos, mientras yo su mantenía mis manos en su cuello, y creo ese beso era lo que mas necesitaba.

Unos segundos después, el se separó del beso intentado recuperar todo el oxígeno gastado.

—Quiero hacer las cosas bien —dice en mis labios, sin alejarse—, no de esta forma. Detesto forzarte e ir rápido.

—Supongo que es lo mejor —digo alejándome un poco—. Aún no podré conocerte ¿verdad?

—No, lo siento

No dijimos nada más, el solo se disculpó y salió, evitando que yo lo viera. ¿Por qué es tan complicado?