HACKER [Min Yoongi]

14. La sorpresa

MYG

Recién salía de mi última clase, pero aún no podía irme. Tenía que entregar un trabajo, así que fui directamente a buscar al profesor.

- Mhh... ¿un mensaje de Jungkook?

Tomé mi teléfono con torpeza, mientras intentaba revisar su mensaje ya que rara vez nos contesta o escribe.

JK

Yoongi, todos estamos en
el restaurante de siempre.
Ven rápido, tenemos una
"sorpresa"

Ok

Guardé mi teléfono y caminé a la sala de maestros, dónde esperé unos minutos al profesor.

No tardé mucho, antes de salir en dirección al restaurante habitual. Caminé lentamente, ya que siempre que decían que tienen una "sorpresa", es porque quieren que llegue rápido.

Gracias a la gran ventana que se encontraba en aquel establecimiento pude verlos a todos riendo, junto a mi "sorpresa".

La chica parecía haber bebido bastante, lo cual confirmé al ver cómo alejaba de su boca un gran vaso de lo que parecía cerveza.

Entré obteniendo la mirada de Taehyung, quien dejó de sonreír, mientras que __________ estaba sirviendo más alcohol en su vaso.

- Creo que ya bebiste suficiente.

Ella levantó la cabeza a verme, y sonrió para después levantarse de su silla.

- ¡Yoongi! -me abrazó-

Bajé la cabeza avergonzado, aunque eso no duró mucho tiempo. Hice a un lado a Seokjin para poder sentarme al lado de ella.

- ¿Por qué la trajeron? ¿y por qué ha bebido demasiado?

- Tranquilo Yoongi -dijo Jin-, ella aceptó venir, y también se ofreció a beber, no fue obligada.

- Supongo que tienen razón.

Giré mi vista a dónde estaba __________, viendo cómo jugaba y reía con Jungkook y Jimin, a lo que sonreí.

- Pidan más, ahora vengo.

Tomé a la chica de la muñeca y la llevé conmigo al pasillo del baño.

- Hola Yoongi -saludó sonriendo-.

- Hola linda -sonreí devuelta-.

Al parecer decir eso último le tomó por sorpresa, ya que le dió hipo. Reí por lo sucedido, mientras recibía un leve golpe de su parte.

- Pensé que no vendrías.

- Lo siento, no sabía que tú estabas aquí, si no hubiera venido de inmediato.

- Tranquilo.

- Perdón por no escribirte en todo el día, estuve un poco ocupado con un...

No pude continuar explicándole ya que se había lanzado sobre mis labios. En su boca en estos momentos solo sentía el sabor de la cerveza con un pequeño toque picante. Estaba dudando en si corresponder su beso, ya que ella estaba borracha.

Se alejó un momento de mi, y me vió con tristeza.

- ¿No quieres?

- No es eso, solo no quiero que pienses que me estoy aprovechando de ti linda.

Ella asintió con la cabeza agachada. Comencé a dar unos pasos hacia ella, haciendo que caminara en reversa y chocara con la pared.

Tomé ligeramente sus mejillas con ambas manos y la besé.

No pasó mucho tiempo antes de que ella quitara mis manos, y pasara sus brazos por mi cuello.

Recargué mi mano sobre la pared, acorralandola, sin tener idea de que hacer con mi brazo libre, hasta que ella bajó su brazo de mi cuello y tomó mi mano, colocándola en su cintura.

Habían pasado mucho tiempo, y ni uno se despegaba del otro, hasta que la alejé.

- Debemos ir con los chicos.

- Si -sonrió-, vamos.

Nuevamente volvimos con ellos, viendo como Hoseok ya estaba dormido en el hombro de Taehyung.

- Ah Yoongi, pedimos más comida para llevar, es para ti.

Jimin tomo la bolsa de papel y me la entregó. Ya era algo tarde, y teníamos que irnos.

Asentí, viendo como ellos salían a pedir un taxi. Tomé a mi mejor amigo, y lo saqué con ayuda de Seokjin.

Regresé nuevamente por __________, viendo que estaba acompañada de Jungkook, quien estaba recogiendo las mochilas de los chicos.

- Nos vemos Yoongi -Jungkook sonrió-. Supongo que sabes dónde vive, así que llévala a casa.

Asentí despidiéndome de todos por la ventana y ellos de nosotros dos. Tomé a __________ por los hombros, y la hice salir.

- Tomemos un taxi, espera aquí.

- Quiero caminar contigo.

Sonreí y caminé hacia ella. Tomé su mochila junto a la mía y comenzamos a caminar.

En realidad el trayecto no era muy largo, por lo que solo nos tomó 15 minutos llegar a su casa.

- Bien, debo irme.

Ella hizo un puchero, mientras jugaba con mi mano.

- Gracias -sonrió-.

- ¿Por qué?

- Por corresponder mi beso.

Sonreí y me despedí de ella sacudiendo mi mano. Di la vuelta intentando irme, pero me quedé estático por sus palabras.

- No quiero seguir siendo amigos... sal conmigo.