Belle había estado haciendo llamadas todo el día. Parecía un poco nerviosa, se mordía la uña del pulgar y escribía en una gran libreta en la cocina.
Shest y Énas intentaron oir su conversación pero no entendían lo que decía.
-Honey, ¿Podrías hacerme un favor?-pausa- si, eh, te mando su información por mensaje, pero necesito una defensa fuerte-pausa- Si, sabes bien que cuando te llamo es por qué está confirmado. Si, llamaré a Valentina Ortiz después-pausa- si, si ¿Crees que puedas venir para conocerla pronto?-pausa- gracias, te debo una, dos, millones si ganamos ésta.
Luego colgó. Suspiró cansada. Y volvió a marcar el teléfono.
-¿Valen? Si, tengo un caso y necesito tu permiso para pedir un estrado y una cita de juicio.-pausa- ajá.
-¿Tú entiendes de que habla?- susurró Énas
-Ey, es tu mamá, ¿Tu sabes de qué habla?
Horas después llegó una mujer, un poco mayor que Belle, con la piel oscura como el ebano, y unos ojos brillantes.
Shest se encogió un poco al verla, aunque lo brillante que eran sus ojos y sonrisa y como contrataban con su piel la maravillaban. Así que se escondía, pero aún así estiraba el cuello para verla.
-¡Honey! Que bueno verte.- Belle abrazó a la mujer cariñosamente y después de una corta plática entre susurros, la mujer se acercó a Shest.
-Hola pequeña. Me llamo Honey, ¿Tú eres...?
-S-Shest...
-Shest, un hermoso nombre, ¿Cómo estás?
Shest no entendía que pasaba ¿Quién era ella? ¿Que quería?
-B-Bien, s-supongo
-¿Si? Que bueno, déjame contarte que Belle me contó lo que pasa en tu casa.
-Y-yo... P-perdón.-el miedo invadió a Shest, sentía que se ahogaba, ¿Se la llevarían de regreso?- P-por favor, no quiero regresar a-ahí
-Tranquila cariño, no vas a regresar, yo me encargaré de que estés segura y que nadie jamás te haga daño, ¿De acuerdo?
Shest la miró confundida ¿Que quería decir?
-Shest, quiero hacerte una pregunta, y quiero que me contestes con la verdad. ¿De acuerdo?
Ella asintió lentamente.
-¿Te gustaría, que no volvieras jamás a tu casa y te quedarás con alguien como Belle o yo?
Shest no contestó, tenía miedo de que fuera una broma, de que se riera y la jalara de regreso con su madre. ¿Era un sueño o una ilusión?
-Shest- la voz de Belle llamó su atención.- tranquila, toma tu tiempo, y contesta lo que sientas correcto.
No era una broma. Los ojos de Shest se llenaron de lágrimas.
-Q-quisiera no tener que volver jamás a mi casa.
Honey asintió.-Entonces, hagamos que no tengas que volver jamás, ¿De acuerdo?
~~•~~
Un hombre de cabellos blancos le sonreía a Shest.
-Hola pequeñita, mi nombre es Chase, ¿Y el tuyo?
Shest estrechó su gran gran mano, era cálida y arrugada.-Yo me llamo Shest.
-¡Vaya! Un placer conocerte Shest
Honey se arrodilló junto a ella.- Éste señor va a ser el juez que decida si te vas o no con tus papás.
-¿Tu que eras otra vez?-susurro Shest avergonzada.- es que se me olvida.
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¿Pequeñas pesadillas?
FanficSus ojos se abren, mira a su alrededor, está en casa, está seguro, el niño suspira, todo ha sido un sueño, Six es solo un sueño. Pero ella acaba de abrir los ojos, despertando de su pesadilla. ¿Y si los sueños fueran más que eso? ~~•~~ Shest tiene 1...