Seed of Madness 🍂 YoonMin

Capítulo 14

Señoras, señores, señeres. Preparense para el drama porque viene fuerte. En este capítulo se acaba lo bonito xD Aunque nunca lo hubo realmente muajajajaja.

🍂  

Mis ojos se abrieron como platos cuando escuché sus palabras suaves acariciar mis oídos, ¿Cómo era posible que pudiera entenderlo? ¿Mi mente me estaba jugando una broma? Con dolor en los músculos me elevé de nuevo sobre él y le miré fijamente, mi corazón volviendo a acelerarse ante la exquisita vista que era el cuerpo sonrojado, sudado y sucio del menor.

-JiMin, ¿Qué...tu Luna? -Comencé a decir, mi boca seca repentinamente.

El menor abrió cómicamente sus ojos, igual de sorprendido que yo. -¡¿Puedes entenderme?!

Ambos nos quedamos en silencio, asimilando la situación. El primero en reaccionar fue JiMin, que se incorporó para abrazarme con un pequeño grito.

-¡Hemos sido bendecidos por la Diosa! -Decía mientras besaba mis mejillas, nariz y labios. -Un milagro.

Comenzando a reír le abracé de vuelta, no entendía lo que estaba ocurriendo, pero sí, era un milagro. Sintiendo mi corazón latir a mil por hora comencé a besar su cuello con adoración.

-JiMin, mi JiMin. -El menor se sacudió y gimió con molestia cuando mi pene salió de su abusada entrada, enseguida mi semen comenzando a gotear sobre nuestros cuerpos. -Ah, perdón. Ven conmigo, voy a limpiarte.

Levantándome con piernas temblorosas ayudé al menor a ponerse en pie y meterlo en el agua aún templada. Antes de introducir un dedo en su interior le miré con cariño. -Voy a introducirlo ¿vale? No quiero que se quede nada dentro y que pueda hacerte daño. Va a ser un poco molesto.

El menor asintió avergonzado y se escondió en mi pecho, quejándose cuando mi dígito invadió su sensible interior para ayudarlo a expulsar todos mis fluidos.

-Ya está. -Le dije besando su cabeza. -¿Estás bien? ¿Te duele mucho?

JiMin volvió a mirarme con una sonrisa y negó. -Esto no es nada, mi cuerpo lleva deseándote desde antes de que nos conociéramos. -Inclinando su cabeza hacia atrás, tragó saliva y continuó hablando. -¿Estás contento? He mantenido mi pureza todos estos años esperándote.

Las tuercas de mi cabeza comenzaron a girar y chirriar buscando el significado a sus palabras, y me quedé helado. -¿Pureza? No me digas que eres... virgen. -El menor me miró sin entender. -Oh Dios, lo lamento tanto, he sido un bruto violento...

-Ha sido perfecto, has sido todo lo que he soñado toda mi vida. -Aseguró sin perder su sonrisa. -Solo tú has sido merecedor de probar mi interior.

Gruñí ante sus palabras. -Vas a acabar conmigo JiMin. Si hubiera sabido que era tu primera vez hubiera sido más suave, y te habría llenado de besos y...

El menor me tapó los labios y me interrumpió. -YoonGi, mi Luna, está bien. Has sido mucho más amable de lo que hubieran sido los hombres de la tribu. Me has... ¿abierto? Con cuidado, en casa he visto a parejas unir sus cuerpos sin preparación. No es agradable de ver. -Hablaba con suavidad. -Y hay algunos guerreros que te toman a la fuerza porque se merecen el honor de escoger a aquel o aquellos que llaman su atención.

La manera arcaica que tenía su tribu de hacer las cosas me hizo gruñir y apretar con más fuerza su cuerpo. Un horrible sentimiento de posesividad cubriéndome.

-Tranquilo mi Luna, nadie me ha hecho nada. -Decía acariciando mi cabello húmedo. -Y si lo intentaron se han ido con las manos vacías y un buen corte en el pecho.