▪️Capítulo II

11K 507 335
                                    

Aunque permanecía en un sueño eterno dentro de esa prisión, en mis sueños permanecía y rondaba ese último recuerdo de él: la escena donde Compress me daba aquel anillo y me proponía... ¿Matrimonio? En esta situación no sabia si era exactamente una proposición.

Aquel enigmático hombre me hacía dudar de mí estabilidad mental, me había secuestrado y encerrado en esta prisión, me había reclamado como suya varias veces y ahora... Me decía que me amaba; siempre quise creer que me había secuestrado por ser la única que conocía su rostro, y que con el pasar del tiempo, quiso usarme para otra cosa, quería buscar una manera de odiarlo y que ese odio me mantuviera cuerda, pero mis sentimientos volvieron a flote cuando me dijo : Te amo

En mi sueño, la imagen de Compress tomando mi mano y colocando el anillo apareció. Él me miró directo a los ojos, sin usar aquella máscara y sonrió, mi yo en aquel sueño podría ser más sincero que yo misma, tenía curiosidad de saber lo que mi subconsciente respondería cuando movió los labios. Necesitaba escuchar que es lo que diría, eso me ayudaría a resolver los misterios de mi corazón, pero justo cuando abrió la boca, no escuché nada. Algo o alguien me impidió escuchar la respuesta, intenté golpear con fuerza la pared invisible que dividía mi sueño de mi cuerpo, como si con solo romper aquella barrera me ayudaría a escuchar.

Golpeé con fuerza hasta que está se rompió en mil pedazos, pero justo cuando creí que entraría, mis ojos se abrieron de golpe. Mi cuerpo salió de la prisión y me levanté con rapidez, completamente agitada y confundida; al instante miré hacia ambos lados y luego al frente, encontrándome con Compress

—Oh, ¿tuviste alguna pesadilla? Estas muy agitada — era cierto, mi respiración era agitada y tenía sudor en la frente. Maldije por dentro a Compress, el causante de haber interrumpido mi sueño en el peor de los momentos

—No, no era una pesadilla... —aclaré, luego a parte la mirada. Mi mirada fue directo a mi mano izquierda, la cual aún consevarba el anillo que me había dado.

No sabía cuánto tiempo hacía pasado desde la última vez que estuve fuera, solo podía darme una idea al observar a Compress y a mi entorno: ya no estábamos en ese almacén abandonado, ahora estábamos en una especie de casa algo descuidada. La ropa de Compress estaba sucia y con manchas viejas de sangre, su rostro estaba igual de herido, pero aún conservaba su sonrisa misteriosa

—¿Me contarás lo que sucedió en tu sueño? — se sentó a mi lado

—¿Me contarás que fue lo que sucedió?

—Tan audaz como siempre — dijo, soltando una carcajada. Por la forma en que presionaba su pecho con el brazo, me di cuenta que estaba lastimado y adolorido, quizás no había pasado mucho de su última batalla — Hace unos días... Dimos un gran espectáculo, debiste vernos...

—Perdón por no estar en primera fila, estaba encerrada — mi voz era fría y directa, era facil ver lo molesta que me encontraba. Compress me miró de reojo, con una expresión seria

—¿Acaso sigues molesta? — alzó una ceja

—¿Además de mago, eres adivino? — rodé los ojos — Compress, ¿¡cómo quieres que me sienta!? ¡Me tienes encerrada por años ahí, luego me dices que me amas ¿y propones matrimonio?! Perdón por no poner atención a tu estúpido acto de villano

Su mirada seria e inexpresiva me enfurecia más, solo me miraba sin decir o hacer nada, su estúpida cara me molestaba. Quería golpearlo, quería vengarme por todo lo que me había hecho pero...

—Esta bien

—¿¡Esta bien, qué!?

—Te dejaré libre

Lujuria | OneShots BnhaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora