La Aventura Zodiacal: La Sociedad de Poder

32-¿Vuelta a la normalidad?

Hiromi:

—¡Hiromi! ¡Despertaron! —gritó Seijun, tirando de mi brazo y metiéndome a la fuerza en el centro médico.

Entré corriendo adentro. Shu había desaparecido, pero el Phoenix de Leo seguía revoloteando alrededor de ellos. Los chicos seguían acostados en sus camas, pero con los ojos abiertos.

—¿¡Que pasó!? —preguntó Aries, sentándose de golpe.

—No te sientes, eso podría ser malo para tu salud—le pidió Seijun, empujándola con ternura para que volviera a acostarse.

—Jack se fue—susurré con arrepentimiento—. No pudimos pararlo.

Todos nos quedamos callados. Tuve que echarle una mirada para asegurarme que no se habían vuelto a dormir. Ofiuco suspiró, antes de sonreír.

—Que yo sepa no lo dejamos irse estando de brazos cruzados, ¿no? —preguntó, riéndose—. Matamos varios de sus monstruos, no dejamos que mataran al abuelo y hasta reunimos muchas informaciones sobre él gracias a Libra.

—Tienes razón—asentí, sintiéndome más aliviado.

—¿Saben? No me arrepiento de haber confiado en ti y en Seijun—nos informó Libra—. Hiromi me salvó contra el ataque de Ryan, y Seijun nos rompió las máscaras para no transformarnos en monstruos

—Prometimos protegerlos contra todo—sonrió Seijun—. Además, aunque los conozca desde mucho menos que Hiromi, son muy preciados para mí.

—¡Miren quienes despertaron al fin! —exclamó una voz a mi espalda.

—¡Testu, Hagane, Gin! —los saludé con una sonrisa.

—Los admiro, chicos—exclamó Testu, sentándose en la cama de Piscis—. No todos habrían arriesgado su vida para proteger La Sociedad de Poder.

—Ustedes también hicieron un gran trabajo—los felicitó el demonio, quien había aparecido en el cuarto de la nada.

—Bueno, y yo... —Gin se quedó callado unos segundos, rascándose la cabeza. Yo lo conocía demasiado bien para decir que se sentía nervioso—, me disculpo por haber mandado uno de ustedes al espacio. Antes ustedes eran nuestros enemigos, y teníamos que proteger La Sociedad de Poder pase lo que pase.

Los chicos asintieron, sonriéndole a mi amigo. Hagane se acercó a nosotros, antes de cerrar los ojos con fuerza.

—Merecen una explicación entre mi relación con Jack—susurró con voz temblorosa—. Él es mi hermano menor. Me pidió unirme a su grupo, pero me negué. No sé gran cosa sobre su plan, solo lo que recolectó Libra.

—Es muy valiente de tu parte el haberte negado a hacer equipo con él—admití, dándole una palmadita en el hombro—. Estoy muy orgulloso de que seas mi mejor amigo.

Hagane sonrió ligeramente, visiblemente aliviado. Seijun tomó la palabra al instante.

—Johann me habló sobre la profecía, cuando estaban durmiendo. Por eso nos pusimos a pensar en ella y encontramos unas respuestas. Los dos primeros versos han sido resueltos por Johann desde hace unos días.

—¿Unos días? —preguntó Cáncer, confuso—. ¿Cuánto tiempo llevamos durmiendo?

—3 días exactamente—les expliqué—. Según el demonio, Sao es la raíz, y ustedes las flores.

—"La raíz ha sido arrancada y las flores se desvanecen"—recitó Seijun—. Para la otra, "Los monstruos aparecen y las almas fallecen", se refiere a que los monstruos de Jack aparecieron, llevándose varias almas en el camino.