Después De La Guerra

Otanjoubi omedeteou

Habían elegido algo sencillo pero elegante, un pequeño salón cerca del bosque y trajes tradicionales.

Para Sasuke y Naruto un kimono Negro con los símbolos de su clan para Sakura el kimono blanco de su difunta madre, y sus hijos con dos pequeñas yukatas para bebés. La foto que habían tomado lucia como un trofeo en la pared de la casa.

Ya hace 8 años de haber tomado esa foto, ahora sus hijos se encontraban en la escuela o al menos eso creían.

Boruto era el más competitivo, siempre estaba metiéndose en problemas a diferencia de Sarada que siempre lo estaba regañando y terminaba envuelta en los líos del pequeño rubio.

-Esta vez fuiste demasiado lejos -

-es una obra de arte, pero claro como tu no sabes de arte por eso te quejas -

-¡Hacerle rayones a las rocas hokage no es arte, es una falta de respeto! - dijo la pequeña uchiha mientras golpeaba a su hermano en la cabeza.

-Pero por qué me pegas.- lloriqueo el rubio- eres una gruñona deberías ir a neuróticos anónimos, hasta te pareces a sasuke cuando se enoja -

-¿a quien le dijiste gruñon?- interrumpió sasuke apareciendo justo de tras de sus hijos.

-¡a nadie papá a nadie!-

-a ti papá, a veces boruto es tan insoportable -

-Bueno déjenlo ya, su madre esta por dar a luz y hay que preparar todo para la llegada del nuevo bebé. -

-¿ya tan pronto?- pregunto el emocionado uzumaki menor.

-Si esta mañana empezó con labor de parto así que es hora de ir a casa, por cierto Boruto - sasuke miro el rostro de piedra de naruto. -creo que así naruto se ve menos tarado-

Los tres comenzaron a reír.

-¡Ay como duele! ¡Shannaro!-

En casa sakura se quejaba por el ya acelerado trabajo de parto, lo habían planeado en casa, sasuke y Naruto ayudarían.

Debido a sus constantes viajes a otras aldeas sasuke había aprendido ninjustu médico, era básico pero podría hacerse cargo de el parto de su esposa perfectamente.

En la habitación estaban los tres shinobis, naruto sostenía la mano de sakura y sasuke le ayudaba a parir.

-bien en la siguiente contracción puja fuerte, ya estás lista para que salga.- le decía el uchiha.

-vamos sakura chan tu puedes-

Naruto le acariciaba el vientre mientras esta pujaba con fuerza.

Los mellizos esperaban en la sala de la casa ansiosos por la llegada de su pequeño hermano o hermana.

-¿que crees que sea? -

-tal vez un niño-

-¿crees que nos dejen de querer por el nuevo bebé?-

-Eso no pasará y...-

Un pequeño llanto interrumpió la conversacion de los niños, corrieron a la habitación para ver a su nuevo hermano.

Ahí estaba aún con compresas ensangrentadas y el cordón umbilical aun unido sakura sus padres llorando por la llegaba del nuevo bebé. Se acercaron tímidos hasta donde su madre y pudieron ver a una pequeña bolita rosada y de ojos verdes.

-¿es un niña? - pregunto boruto

-es un niño, vamos acérquese a conocer a su hermanito- Los animo sakura.

Los dos niños subieron con cuidado a la cama donde estaba sakura y pudieron ver el rostro del pequeño bebé.

-Es muy bonito mamá, se parece a ti.-Sarada comenzó a llorar.

-Dijiste que no llorarias - boruto le hizo segunda.

Los tres padres rieron.

Paso un tiempo lo suficiente para que el pequeño Daisuke pusiera ahora balbucear sus primeras palabras, sarada se habia encargado de ponerle un conjunto azul, tomarían la foto familiar y luego al festejo de su cumpleaños.

-Sarada baja con Daisuke, porfavor -

-si mamá -.

En el jardín estaban todos los antiguos amigos de sus padres. Sakura lucia un vestido blanco igual que el de sarada, Naruto, Sasuke, boruto y Daisuke traían trajes azules celeste.

-Otanjoubi Omedeteou -

Repetían todos para luego felicitar a los mellizos y a Sasuke pues también cumplía años ese día.

-algunas palabras de parte de los festejados- Decía shikamaru para animar el ambiente -

-Yo quiero decir algo- levanto la voz sasuke. - ¡gracias por hacerme parte de esta familia, gracias por mis hijos sakura, y gracias por abrirme los ojos naruto. Sarada Boruto Daisuke ustedes son el lazo que nos une a sus padres a mi, gracias por elegirme para ser su papá. Quiero que sean fuertes y que sepan que yo siempre voy a apoyarlos en todo. Un día sakura me prometió que si me quedaba con ella todos los días serian llenos de felicidad y veo que lo cumplió. -

-te amamos mucho papá -los mellizos abrazaron a su padre.

-Te amamos sasuke - sakura y Naruto repartieron un beso en cada mejilla de uchiha.

Su familia por fin estaba completa podían decir que eran felices. Habían conseguido todo lo que querían, sakura bailaba serena en los brazos de sus dos esposos, Naruto volvía reír iluminando todo como el solo sabía hacerlo y sasuke suspiraba sereno por no cargar más culpas en su ahora recuperado corazón. Los mellizos y el pequeño daisuke vivían en una familia un poco diferente pero llenos de amor.

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Fin.