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Parecía estar amaneciendo, había pasado un día en el hospital justo después de la cirugía experimento dolor, mareos y unas constantes nauseas. Su mente viajo hasta cirugía a corazón abierto que sakura le había hecho en medio de la guerra, ahí se había recuperado de inmediato pero ahora la cosa era distinta, tenía hambre y le habian negado todo tipo de alimentos.

Sasuke estaba durmiendo en uno de los sillones de la habitación y sakura tal vez estaba salvando alguna vida en urgencias.

Intento levantarse sigiloso creyó que no le dolería nada, gran error.

—Mierda—

—Por qué demonios te levantas, ya te dijo sakura que estarás adolorido—

—necesito hacer pipí—

Sasuke le ayudó al rubio a incorporarse, con la espalda encorvada y sosteniendo su abdomen cubierto por vendas, camino hasta el baño.

—¿te duele?—

—no tanto, pero el hambre es lo que me esta matando. —

—Tal vez hoy te den algo de comer. Más tarde tengo que ir con kakashi así que te ayudare a bañarte de una vez. —

— Hace frío, no me quiero bañar—

—No seas cerdo y bañate.—

El uchiha abrió la manija de la regadera y dejó caer el agua tibia como le gustaba a naruto, luego le ayudó a quitarse el pantalon y las vendas, para después enjabonarle el cabello termino de ayudarle y lo cubrió con una toalla llevándolo hasta la cama y ahí lo vistió con una pijama a rayas.

—No es necesario que hagas todo esto. — dijo el rubio algo apenado.

— Soy tu novio y pronto seremos esposos, es lo que se hace ¿no?—

—Creo que tienes razón... es qué, es raro tu siempre actúas tan serio y de mal humor que creí bueno, a veces creo que haces esto solo por sakura... para no alejarte de ella.—

Sasuke le solto un golpe en la cabeza a Naruto a lo que él respondió con un chillido.

—¡Me duele idiota!—

—El idiota es otro — el azabache solto un largo suspiro, bajando un poco la cabeza  — Naruto,  tal vez no soy muy bueno demostrando mis sentimientos,  me cuesta un poco expresarlo pero... te amo y si puedo ayudarte hasta en lo más mínimo lo haré, te debo mucho y quiero compensarte. Tú y Saku son lo único que tengo y daré mi vida si es necesario para qué estén bien.—

—Sasuke... gracias por todo lo que haces, pero creo qué no tienes qué pagar nada además... ahora que estamos juntos los tres las cosas serán mejor, un futuro lleno de felicidad no espera. —

—así sera—

Ambos se abrazaron para luego darse un tierno beso. Hasta que alguien los interrumpió abriendo la puerta de la habitación, era hinata quien había escuchado  todo desde la puerta.

—Buenos días...—

—Hinata, ¿que quieres?—

—Yo...  me entere de que estabas enfermo y quise venir a visitarte. Pero creo que llegué en un mal momento—

—No tenias por que venir, no te necesito —

—Naruto, no seas mal educado—
El uchiha lo reprendió y luego le hizo una reverencia a hinata. —Disculpalo, estta algo adolorido, Iré a buscar  sakura para ver si ya puedes comer algo, permiso. — Sasuke salió de la habitación.

Hinata y el Uzumaki se quedaron solos y un silencio  incómodo los invadió.

—Por favor acepta estas manzanas, son para que sanes un poco más rápido.—

Hinata le acerco un canasto con fruta como una ofrenda pero éste las rechazo.

—No las necesito, para eso tengo a Sakura ella me ayudara a sanar—

—Por qué me tratas así Naruto, tú alguna vez me amaste...—

—¿por que te trato así? ¿¡Por que te trato así!? ¿Acaso no te acuerdas?, —

—yo... yo lo hice por qué  quería llamar tu atención y...—

—Por intentar llamar mi atención... Si no te hubieras tomado todas esas pastillas... Hinata yo iba a quedarme contigo pero lo hecho esta hecho y no puede cambiarse. —

—Por favor, perdóname. —

—Largate— Naruto se levanto y tomo a hinata de una mano para jalarla hasta la puerta a lo que está solo reaccionó con lagrimas. —No te quiero ver, vete—

—¡Naruto!— grito la pelirosa desde la esquina del pasillos para luego correr hasta donde estaban ellos, sasuke le siguió. —¡¿ que demonios haces?! ¡Dejala!—

—No te metas. No es tu asunto.— contestó el uchiha.

—Lo es. Naruto pídele una disculpa ¡ahora! —

—Pero...—

—hazlo Naruto —ordenó Sasuke

—Lo siento hinata—

Sakura se arrodillo e hizo una reverencia  en señal de disculpa hacia Hinata — Yo quería decirte desde hace mucho que naruro y yo... Estabamos—

Hinata no dejo terminar de hablar a sakura pues la interrumpió  con una patada en el rostro.

—Ahí es donde debes estar, asquerosa serpiente traicionera.—

Naruto corrió hasta donde sakura y la ayudolo a levantarse limpiándole la sangre del rostro —¿estas bien?—pregunto. —¿que te pasa? ¡maldita loca!—

Sasuke a comparación  de Naruto, se dirigió con calma hasta donde estaba la hyuga, suspiro un poco quedando frente a ella y esta comenzó a temblar pues se sintió intimidada.

—¿Por qué no te haz largado? ¿Estás esperando que te saque de aquí a patadas?— la tomo del cuello y luego la puso contra la pared acercándose a su oído — Sabes que puedo matarte de un solo golpe, verdad.— 

—Sasuke basta, déjela tranquila—
Ordenó la medico ninja.

El uchiha la solto

Sakura miro a ambos decepcionada y apretó los puños.

—No se que es lo que haya pasado entre  ustedes  pero... no son formas de tratar a una mujer, yo sabía que esto iba a pasar tarde o temprano. Todo esto es culpa mía. —

Hinata se  levanto del suelo temblando de miedo, para luego salir corriendo del lugar. 

—No es tu culpa, ella te golpeo— dijo sasuke.

—Si pero yo le quite al hombre que ama, los sentimientos  de una chica no cambian tan fácilmente. —

—Saku..—

— Vamos a tu habitación, te traerán tus alimentos  y más tarde te darán de alta. Recuerda que en dos días setas el hokage y no quiero que esto perjudique la ceremonia. — 

— Sakura tiene razón tienes que...—

—Tú cállate y ve con kakashi, te está esperando.—

—Eso me pasa por metiche — susurro  molesto el uchiha para luego irse.

—Ya habrá tiempo para contarte lo que paso con ella.— dijo el ojiazul volviendo a su cama

—Naruto, si tienes que arreglar algo con hinata hazlo antes de que nos casemos, no quiero arrepentime.—

—Te juro sakura que no te vas a arrepentir. —




































Después De La GuerraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora