Dioses de Egipto: Anubis

17. El alma de Menet

Justo después Anubis desapareció llevando consigo a todos los embalsamadores en el ambiente Hathor pudo distinguir el olor a Sangre, el cuerpo de Isis seguía destrozado en el piso era una escena tetrica incluso para ella, pero Horus era quien realmente le importaba, recostado sobre la mesa, con su piel sanando como una soldadura podía escuchar el leve latido de su corazón, lento, apenas recuperándose de la muerte, apenas tratando de mantener su cuerpo con vida y entonces se pregunto Que pasaría si Anubis por venganza hubiese matado a Isis pero no revivió a Horus? y ¿si el corazón de Isis no podía con el cuerpo de Horus?

Osiris entro mientras Hathor encendía velas alrededor del cuerpo de Horus para que su alma se mantuviera en la luz, el desastre y la sangre lo sorprendió, pero sabia quien podia causar ese tipo de desastres, se acero a Hathor y coloco su mano en su hombro.

— El vivira— dijo con voz suave tratando de tranquilizarla

—Tu no lo viste, el estaba tan molesto que esa criatura fuera de el solo gruñía, nunca había visto algo tan espantoso como ese animal — la voz de la diosa sonaba conmocionada 

—Eso es el, es su intinto, la ira que vino de la oscuridad y el frio desierto, la ira que Ra le hizo mantener oculta para si

—Crei que era una leyenda

—No lo es, nunca lo ha sido aunque pocos lo han visto, llamare para que limpien el desastre y preparen su cuerpo

Osiris se marcho del lugar pero seguía sintiendo que el chacal también lo perseguiría a el.

Anubis volvio al lugar de descanso de Menet, Bastet sostenía su mano pálida y sin vida eso le daba seguridad, sentia que de esa forma podría traerla a la vida, mirarla asi eran como cientos de lanzas hundiéndose en su corazón, podía oir de nuevo los gritos de Isis y solo así se sentía un poco mejor, sufrió al menos un poco de lo que el estaba sufriendo y seguiría sufriendo por el resto de la eternidad.

—Alguien cosiguio su alma ya? — Bastet levanto a cabeza y lo miro con ojos llorozos

—Tragiste de regreso a Horus?

—Si pero requirió un gran sacrificio ¿Su alma la encontró alguien?

—Esta aquí— dijo mientras sostenía con fuerza su mano —Esta con nosotros, si quizás tu la tocaras, siento que se perderá en cualquier momento

—Por que no has encendido velas?

—Cuando lo hice pareció irse mas rápido, prefiere estar en la oscuridad

Anubis lo entendió de inmediato, ella era suya, era su consorte, su alma tenia años existiendo en esta tierra pero solo con el que era oscuridad había llegado a casa, quizas con un poco de suerte iba poder traerla a la vida.

—Desnudala, voy a traerla con nosotros— y mietras Bastet retiraba las tunicas del cuerpo de su hija Anubis daba tres golpes con el cetro en el suelo llamando a los embalsamadores, que entraron de inmediato con cantos en egipcio antiguo y otra lengua que solo ellos conocían.

—Harias como yo cualquier cosa por ella?—Pregunto entonces a Bastet

—Lo que sea para que viva

—Si yo pudiera darle mi corazon lo haria sin dudarlo ni un segundo, pero sin mi el ritual no estaria completo ¿lo comprendes?

Bastet asintio con la cabeza y con las uñas y lagrimas de dolor abrio su pecho dejando las costillas desnudas a la vista del Chacal, mientras el resto de los embalsamadores preparaban el lugar, Anubis desnudo sus manos y con sus uñas largas aparto las costillas mientras Bastet mordía sus labios hasta sangrar y sentía la vida irsele de las manos mientras anubis abría su pecho.

—Mi sagrificio mas grande siempre ha sido mi amor por ti y no solo te entrego mi corazon para que puedas seguir escuchando mi voz sino también mi divinidad para que permanezcas por siempre junto a tu amado— Recito Bastet en egipcio antiguo mientras su corazon palpitaba en las manos de Anubis.

—Acepto el sacrificio de una madre preocupada, todo el dolor que has tenido y el amor que le tienes es mi pago y mi recompensa, partirás hora a tu lugar de descanso, porque no hay corazón mas puro que aquel que sacrifica su vida por amor. Tu corazón a sido pesado — Recito Anubis en egipcio antiguo y beso la frente de Bastet antes de arrancar el corazón de su pecho.

La diosa se desplomo al piso y los embalsamadores atendieron su cuerpo, Anubis entrego el corazon a uno de sus hijos, mientras se quitaba el casco y la tunica. Abrio el pecho de Menet con una delicadeza impresionante y arranco el corazon herido.

—Que tu cuerpo acepte esta parte nueva de ti, y que tu madre pueda seguir susurrandote al oido — empezo a decir mientras acomodaba todo en su lugar y una luz empezaba a irradiar de su cuerpo — que la divinidad que ella te otorga con este sacrificio sea a tu medida y puedas permanecer con nosotros por la eternidad — los otros lo miraban mientras el corazon palpitaba porque la energia de el lo mantenia vivo — y si tu alma no quiere regresar a este cuerpo que hoy traigo a la vida— anubis corto su mano y la sangre como luz cayo sobre el corazón palpitante — Encadeno tu alma a la mia, para poder seguir escuchando tu voz cuando el sol se ponga en el Duat antiguo.

Mas palabras siguieron y entonces el cerro sus heridas , los embalsamadores se llevaron a Bastet y el se quedo ahi, junto a su esposa, junto al fantasma que acababa de crear si ella no volvía, lleno con su sangre y la de él espero que el corazón nuevo volviera a palpitar por su cuenta, sabia que no debía tardar demasiado.

espero mas de lo necesario y aun cuando todas las velas se habían consumido no había ni siquiera un palpito, entonces destrozado y derrotado lleno las vasijas y limpio el cuerpo de la mujer que amaba, todos los rastros de sangre y del ritual, le coloco la túnica negra y dorada mas hermosa que tenia, una con la que esperaba casarse, y sobre la herida que aun no sabana en su pecho dibujo una protección.

Dejo a Menet en la oscuridad del Salon, sola mientras el se limpiaba del cuerpo su sangre que era el ultimo rastro que tenia de ella y esperaba el atardecer del Duat para escuchar su voz en sus espaldas y saber que ahora si había muerto