Quien diría que me terminaría enamorando de la persona menos esperada, el amor y el dolor ser volverán a juntar en el camino para poder tomar la decisión correcta, déjame amarte como nadie mas lo ha hecho para que no vuelvas a la oscuridad de tu sol...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Enji Todoroki P.o.V
Veo como sale de la oficina con esa característica sonrisa suya, esa sonrisa que siempre veo en las mañanas siempre me pregunto ¿Cómo es que ella puede mantener esa sonrisa hasta en los momentos malos? Procedo a recoger mis cosas para poder ir a casa, aunque sé que Fuyumi me estará esperando en la mañana como siempre lo hace, aunque sea la única en la casa ella me demuestra lo emocionada que esta al verme, aunque me cueste admitirlo me alegra siempre de ella me tenga presente a pesar de la vida dura que les di.
No me sorprende el silencio de la oficina al contrario creo que me acostumbre demasiado a este tipo de soledad, pero no creo que en esta ocasión sea así porque siempre este Miyamoto a mi lado hablando todo el tiempo o que Hawks siempre venga a dar sus chistes o más que nada para molestar, aunque la mayoría de los chicos que trabajan en la empresa están durmiendo en las habitaciones que se les asignan cuando son internos.
Me acercó al carro en donde se encuentra el chofer que ha estado trabajando desde hace años atrás no solo cuida de mí en ocasiones, sino que también ha cuidado de mis hijos e incluyendo a Rei no he sido un gran esposo, pero siempre me preocupe por su seguridad, más que nada porque nunca se sabe en qué ocasión puede ocurrir un accidente, el camino a casa no se me hace nada pesado si no lo más común porque no hay nada de tráfico pocos autos se dirigen hacia sus trabajos, en un abrir y cerrar de ojos ya no encontrábamos en la entrada de mi hogar me baje y me despedí del chofer para encontrarme en la entrada a mi hija con una sonrisa de ojera a oreja.
— Estoy en casa
— Bienvenido papá y buenos días — me quita el maletín de mis manos para cederme el paso — ¿Cómo te fue en el trabajo?
— Un poco cansado perdona que ayer no llegara a casa me la pase haciendo el papeleo y en unas horas voy a salir de nuevo — suelto un largo suspiro, aunque fue más que nada por el cansancio
— No te preocupes por eso papá, sé que has estado muy ocupado y más que nada que se viene las fechas decembrinas — me sonríe para transmitirme paz, sigo pensando si mi hija es un ángel o estoy soñando por lo buena que es — yo en unas horas me tengo que ir a la escuela, pero antes de irme te quería ver y vieras que estaba bien.
Lo único que puedo hacer sin responderle es poner mi mano en su cabeza y sé que a ella le agrada esa muestra de afecto no me dice nada porque sabe que no estoy demasiado familiarizado con este tipo de cosas, procedo a retirarme a mi habitación para poder bañarme y ver el traje que me tengo que poner para la junta aunque de todas formas voy a tener mi traje de héroe debajo por el nuevo comercial que se tienen que grabar, tendré un día demasiado ocupado de tan solo pensarlo ya me empieza a doler la cabeza, me despojo de mis ropas incluyendo mi traje. Me acercó al baño para abrir la regadera, no me desagrada el que me caiga agua fría o caliente mientras pueda desaparecer la tensión de mis hombros para mí es más que suficiente, he pensado seriamente en como relacionarme con mis hijos, pero cuando intentó hacerlo parecieran como gatos ariscos que no quieren ser tocados.
