Capítulo 9

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¿En dónde me encuentro?, todo mi alrededor está sumido en una gran oscuridad, he estado caminando sin rumbo, no puedo quejarme, pero tampoco me incomoda

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¿En dónde me encuentro?, todo mi alrededor está sumido en una gran oscuridad, he estado caminando sin rumbo, no puedo quejarme, pero tampoco me incomoda. El último recuerdo que tengo cuando estaba inconsciente fue cuando mi cuerpo había caído estrepitosamente al suelo, como si hubiera recibido una bala en el pecho sentí mi cerebro desconectarse de mi cuerpo podía escuchar todo mi alrededor, pero eran voces lejanas.‎

Puede que uno del personal de limpieza o unos de los chicos me encontraría, tenía esperanza que fuera, pero si, no; mi cuerpo terminaría en un estado de hibernación hasta que mi corazón dejara de latir, justamente hoy tenía que dejar mis medicinas en casa.

¿Eso es una luz? Es imposible encontrar luz entre esta gran oscuridad, entre más me acercaba más grande se hacía. Una luz que podría dejar ciego a cualquiera por instinto cierra los ojos para así finalizar mi caminata. Quien me recibe es el viento, que golpea mi rostro con delicadeza, como el viento de primavera; cálido, aspirando el olor del lugar por mi nariz y los pulmones se llenan del olor de tierra y pasto mojado, el mejor olor que puede existir. Al abrir mis ojos puedo visualizar un hermoso árbol, pero no cualquier árbol, este era un árbol es de sakura.

¡Oh mierda! Es hermoso, ¿cómo puede estar este árbol en este solitario punto? Un gran tronco demostraba la elegancia de las flores rosas que tenía en cada una de sus ramas. Toco de manera inconsciente la madera, pero era raro porque un árbol está emanando calor, un calor familiar, me recuerda a mi niñez, cuando llegaba a casa con las mejillas manchadas de lodo.

— T/N

Un pequeño susurro me saca de mis recuerdos, un susurro que una persona normal podría escuchar, pero no solo era un susurro, mencionó mi nombre con demasiado amor, un escalofrío recorre en toda mi espina dorsal al mismo tiempo se me eriza la piel. Una vez más escuché mi nombre en un susurro era una voz me resultaba familiar.

Me alejo del árbol para buscar la voz que me está llamando, hasta que un clic suena en mi cabeza, ¡Dios santo! tenía tiempo sin escuchar esa voz, esa agradable voz que de niña me arrullaba con canciones de cuna, que me veía y me recibía como lo más delicado que había existido en este mundo, recordandome que iba a ser el regalo más hermoso que podía existir, mi corazón estaba demasiado acelerado, una frecuencia que golpeaba mi pecho, dolía, pero era un dolor que una persona podría soportar y más cuando tienes a unos metros a la persona que llegaste a amar.

— Hola cielo — vuelve a hablar con amor girando su cuerpo en cámara lenta

El viento volvió a golpear mi rostro, pero al mismo tiempo jugaba con las hebras oscuras de la persona que estaba enfrente mío, ese cabello que de niña quise tener, largo y lacio que al tocarlo era como si tuvieras en la mano una prenda de seda; a la vez era de un tono que se comparaba con lo oscuro de la noche y que al mismo tiempo las estrellas se encontraban escondidas entre los largos mechones. Los pequeños pétalos de sakura no obstruían mi vista, pero era una vista tan hermosa.

𝑨𝒓𝒅𝒊𝒆𝒏𝒕𝒆 𝒂𝒎𝒐𝒓 (Actualizaciones Lentas)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora