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Mario y Armando se vieron temerosos, la farsa se había desplomado.

-Un momento ¿qué significa esta primera página?

-N-no papá, no leas eso...eso es un error.

-La primera página don Roberto, es un resumen del balance general.

Betty respondió rápidamente mientras que Armando rápidamente tomó las hojas que mantenía su prometida en sus manos dándose cuenta que la carta no estaba ahí, Mario imitó la acción con la coipa de Gutiérrez, sintiéndose un poco más aliviado.

-Niña ¿Qué  son estos pasivos de montos tan altos? 

El castaño se levanto con un papel en mano que decía lo que estaba temiendo desde que esa mujer se empezó a comportar de esa manera con él, Betty había presentado el balance real, Armando trató de negarlo y cuando trato de recoger todas las carpetas respondiendo que era un error tratando de evadir el problema y encubrir la verdad Daniel se levantó también alzando la voz.

-¡No Armando! ¡Aquí la junta no se termina! ¡porque aquí no hay ningún error! Roberto yo te explico, esos casi cincuenta mil millones de dólares es una obligación que Ecomoda contrajo con Terramoda ¡y no solo es eso! resulta que Terramoda tiene la prenda sobre establecimiento comercial de Ecomoda, en síntesis...Terramoda es la propietaria de Ecomoda. 

Roberto se sentó nuevamente en asiento visiblemente aturdido por esa ola de información.

-Daniel, usted no sabe d-de lo que está hablando.

-¡Si que lo sé Armando! se acabaron las mentiras, se te acabo el jueguito...ten, el boletín de registro mercantil de cámara y comercio.

El azabache mantuvo su mirada fija en ese libro mientras se sentaba nuevamente en la silla, Mario por otro lado estaba lleno de coraje y algo asustado por su novio mientras lo veía en silencio.

-llegó la hora Armandito que des la cara, que dejes de decir mentiras y afrontes la realidad ¿qué pasó con la compañía que te dimos? ¡Armando! ¡te dimos una Empresa! ¡¿qué la hiciste?! ¿¡qué pasó con nuestro patrimonio!? el de nuestras FAMILIAS ¡La perdiste! porque eso hiciste Armando ¡ya no hay más empresa!

Valencia más que enojado realmente estaba totalmente sentido, triste, decepcionado y eso lo hacía actuar de forma tan errática, no creyó que ese hombre hubiera llegado tan lejos.

-Si existe.

-¡ESTUPIDO, ESTA EMBARGADA!

-¡Y LLEGARON LOS MESEROS!

El lugar se había llenado de gritos, era un espacio muy agobiante y más para Armando y su asistente que veía todo el caos en silencio, Betty sabía que Daniel sabía algo en el momento que llegó a la empresa así que tratar de ocultarlo traería peores consecuencias por lo que en el último minuto lo había decidido, haría que Armando alfin dijera la verdad.
Mientras este trataba de mantener una postura fuerte ante Daniel mientras que se quitaba las gafas.

-A ver calmemonos, por favor.

Habló Roberto intentado mantener la compostura del lugar y de él mismo.

-¡Daniel Valencia! ¡Usted se calma! ¡Y no me trata de estúpido!

-¿¡Entonces de qué!? ¿¡De PATÉTICO!? ¡DE UN MARICON DESCEREBRADO!

Una bofetada resonó en el lugar, Mario se levantó al instante dispuesto a defender a su novio pero Roberto fue más rápido y los separó.

-¡NO MÁS! ¡SIÉNTENSE!

Paso un minuto en un incómodo  silencio, Armando tomó una bocanada de aire quitándose el saco, para empezar a explicar que es lo que había hecho y el porque. Mario quería ir donde el presidente, llenarlo de besos y sacarlo de ese infierno en el que estaban pero no podía, tenía que permanecer ahí quieto dando aportes de vez en cuando viendo como la mayoría lo veían también en silencio, con esa mirada de desprecio que siempre llevaban solo que ahora la hacían más evidente y no la disfrazaban con esas sonrisas hipócritas.
Al final Betty explicaba como se tenía planeado y acabo diciendo una frase que logró que Armando arquera sus cejas volteado a mirara a aquella mujer.

¿Enamorados?[ArMario]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora