[1] I almost do (Saga: Out Of The Woods)

Capítulo 12

Alice

Mi intento por mejorar las cosas solo las había empeorado y ahora llevaba cuatro días sin ver a Travis. Y no podía explicar porque, pero lo extrañaba, aunque sabía que el sentimiento no era mutuo. Quería saber que estaba haciendo, en que pensaba o donde estaba.

Desde mi lugar en el porche de la cantina mire a mi alrededor buscándolo, pero no había rastro de él, como si ahora que me había quitado de encima iba a hacer todo lo posible por no enredarse conmigo otra vez.

Estaba lloviznando y el clima era realmente frio, no podía dejar de imaginar que tan fría se sentiría la casa de Travis y por alguna extraña razón, quería averiguarlo. Quería llegar a él y arreglar las cosas porque no soportaba este distanciamiento. ¡Vaya forma de agradecer a la persona que me abrió la puerta de su casa cuando estaba sola! Aunque no debería olvidar que él es un idiota... No... No lo es. Solo es gruñón y me estaba acostumbrando a eso, incluso era divertido.

Bajé los escalones de la cantina y corrí por el camino hacia el bosque, pero me detuve antes de adentrarme entre los árboles. ¿Qué estoy haciendo? Retrocedí un paso. Volver solo implicaría ser una molestia para Travis y no quería eso. Suspire.

- Que tonta - me dije a mi misma.

No tenía razón para volver. Después de mucho pensarlo, me di cuenta que estando en la cantina era más probable que me encontrara mi familia, si es que me estaban buscando. Y a la familia de Joy, les gustaba que estuviera allí. ¿Entonces que me llevaba a querer volver? Seguramente si volvía, discutiríamos de nuevo. Aunque no era exactamente una discusión.

- ¿Alice? - Pronuncio una voz familiar a mi lado -. Estas empapada.

Me volví para encontrarme con Eliot y su gentil sonrisa, pero no estaba solo. Travis estaba detrás de él intentando parecer indiferente. Sonreí, porque en realidad no sabía que decir.

- Vamos a la cantina, ¿vienes, o ibas a alguna parte? - Eliot miro en dirección al bosque y luego volvió a mí.

Negué con la cabeza.

Los tres caminamos hacia la cantina y en ningún momento Trav miro en mi dirección, era casi como si yo no estuviera.

Una vez adentro Joy recibió a los chicos con una agradable sonrisa y les invito café. Nos sentamos los cuatro alrededor de una de las mesas redondas, Trav estaba a mi lado y era incomodo sabiendo que intentaba ignorarme. Trate de no pensar en él. Y fue entonces cuando me di cuenta que la mandíbula me dolía de tanto apretar los dientes por el frio. Mi ropa estaba empapada y mi cuerpo temblaba.

Mire a Joy, pero ella estaba demasiado concentrada en su conversación con Eliot como para notar mi estado.

- Estas muerta de frio - dijo Trav con un tono de desaprobación -. Quítate eso - señalo mi abrigo mojado.

- Estoy bien. - Mire hacia otro lado fingiendo estar ofendida porque aún me sentía herida por lo que había dicho la última vez.

- Estas actuando como una niñita.

- Tal vez porque lo soy - replique.

Nos miramos fijamente, prácticamente se podían ver chispas en el choque de nuestras miradas porque él estaba fingiendo que nada había sucedido cuando no era así.

- No, no lo eres.

- Estoy actuando como una molesta niña de quince - le arroje sus propias palabras en la cara.

- No voy a intentar razonar contigo, es inútil - se cruzó de brazos y miro en otra dirección. Fue entonces cuando nos dimos cuenta que las personas que estaban sentadas cerca de nosotros estaban atentas a nuestra discusión.

- Gracias, ahora somos el centro de atención. Muy bien, hiciste una escena – lo acuse poniéndome de pie para salir afuera. Travis me siguió porque no iba a perder en una discusión por tan absurda que fuera.

- ¿Dices que es mi culpa? Fuiste tú la que comenzó.

- No. Tú comenzaste queriendo parecer amable cuando no eres más que un tonto que no se ha disculpado y no tiene intenciones de hacerlo.

Él arqueo una ceja por tal comentario y su expresión se volvió aún más seria.

- Así que, ¿De eso se trata?

- Tú que crees - bufe -. Olvídalo, no quiero seguir con esto - di un paso para regresar a la cantina. pero él me detuvo parándose frente a mí.

- ¿Así que te gusta estar mojada? - dijo. Fruncí el ceño y en un segundo estaba cargándome sobre su hombro y arrastrándome hasta estar bajo la lluvia.

- ¿Que estás haciendo? - Intente liberarme, pero era inútil.

- Dijiste que estaba bien.

- ¡No lo dije en serio! - Exclame -. Bájame.

- Cuando hables conmigo habla en serio.

Él me dejo sobre mis pies y accidentalmente pise un charco que salpico barro sobre mis botas y los pantalones de Travis.

- ¿Mira lo que me hiciste hacer? - Lo mire boquiabierta.

- ¿Yo? Tú pisaste en el lugar equivocado.

Vi una fugaz sonrisa en sus labios y me di cuenta que estaba jugando conmigo. Lo empuje, aunque no logre moverlo ni un paso.

- Eres un tonto. Y por tu culpa vamos a enfermarnos - señale nuestras ropas mojadas.

- Esa es mi línea.

- Ustedes sí que no pueden estar en el mismo lugar sin pelear, ¿verdad? - comento Joy con una risita.

Ella y Eliot nos observaban desde el porche, se reían de nosotros. Porque peleábamos, pero ninguno estaba enfadado de verdad, solo disgustados, pero de alguna forma contento uno con el otro. No creo que exista en el mundo una forma de definir nuestra relación.

- Están los dos empapados – señalo Eliot riendo.

- ¿De qué te ríes? ¿También quieres mojarte, idiota? – gruño Travis a su amigo.

Eliot levanto las manos demostrando que no quería meterse en una pelea bajo la lluvia con su mejor amigo.

- Ya me mojé suficiente hoy, gracias.

- Entonces, - comenzó Joy - ¿esto significa que ya está todo arreglado?

Esa pregunta fue incomoda. No estaba segura de que pensaba Trav en ese momento, yo por mi parte, ya me sentía bien. Aunque él no se hubiera disculpado, ya lo había perdonado.

- Dejemos esta tontería y volvamos adentro – dijo Travis regresando a la cantina.

- Alice, ve a cambiarte rápido antes de que tu cuerpo se enfrié – sugirió Joy.

Todos juntos regresamos adentro.

Me alegraba tanto que estuviéramos bien con Travis de nuevo.