[1] I almost do (Saga: Out Of The Woods)

Capítulo 25

Travis

Miré el reloj sobre mi mesita de noche para descubrir que eran pasadas las once de la mañana. Me senté en la cama, me puse un pantalón y mis viejas zapatillas. Me sorprendió enterarme que era Joy la que me había despertado golpeando a la puerta, aunque más me desconcertó su sonrisa, como si el día anterior no hubiera ocurrido. Como si ella no se hubiera ido corriendo con lágrimas empapándole el rostro. Me desconcertaban sus cambios.

- Hola Travis - Me saludo cuando abrí la puerta, la invité a pasar, pero negó con la cabeza al tiempo que su rostro se ruborizaba. -. Hay algo que quiero que veas.

Note que evitaba mirarme.

- ¿Qué es? - Miré a su alrededor, pero no vi nada.

- Cuando lleguemos ahí lo veras, pero ponte algo por favor – pidió con voz temblorosa dándole un rápido vistazo a mi torso desnudo.

Regrese a la habitación para ponerme una camiseta y un abrigo. Era un hermoso día, sin embargo, aún estamos en invierno y el bosque siempre es frio.

Seguí a Joy por el bosque, y no me llevo mucho tiempo darme cuenta que íbamos en dirección a la casa de Eliot. No podía imaginarme para que podía ser.

- ¿Eliot sabe que aún no me he ido? - La mire, ella iba unos pasos adelante esquivando las raíces levantadas y las plantas del camino.

- Si, yo se lo dije es que... - Hizo una pausa - Había algo que quería... Bueno, ya lo veras.

Aunque había árboles que me bloqueaban el camino ya podía ver el gran tejado de la pequeña mansión donde Eliot y su familia residían. Su familia seguramente estaba ausente en ese momento, es decir, sus hermanos mayores y sus padres estaban mayormente ausentes porque no les agradaba demasiado el clima frio del bosque. Eliot por su parte siempre lo prefirió.

Mi amigo nos saludaba alegremente agitando una mano en el aire.

- ¡Travis! - Gritó -. Que gusto verte - Dejo a un lado el vaso del que estaba bebiendo y se puso de pie para recibirnos. - Creí que ya estarías muy, muy lejos pero luego Joy me dijo que aún estabas aquí y... ¿Qué sucedió?

Me lo quede mirando haciendo tiempo para pensar una respuesta que no sonara absurda pero no tenía nada. Ninguna razón. Aun me fastidiaba conmigo mismo por no tener una razón. No dije nada.

- Bueno eso no importa. Tienes que ver lo que tengo aquí para ti - sonrió y Joy también lo hizo.

Rodeamos la casa hasta que Eliot se detuvo frente a una camioneta vieja. En algunos lugares le faltaba pintura, pero fuera de eso se veía bien.

- Es para ti.

- ¿Qué? - Lo mire sorprendido.

- ¿No te gusta? Solo le falta un poco de pintura...

- No puedo aceptarla - le dije firme.

- ¿Por qué no?

- No puedo.

- No lo desprecies, Trav, es una buena oportunidad para ti - dijo Joy a mi lado.

- Joy, tiene razón. ¿Cómo puedes irte de viaje sin transporte? Además, aquí nadie la usara, ya tenemos una... Cada uno – dijo lo último con una mueca de disgusto.

Mire la camioneta, realmente era una buena oportunidad, pero no podía aceptar algo así de mi mejor amigo, aunque, por otro lado, ¿cómo viajaría? No. Ya se me había ocurrido rentar un coche. Y ni siquiera me iba a poner a pensar en la idea del dinero que podría ahorrar si aceptaba la camioneta.