Los 71° juegos del hambre están por comenzar, los tributos están listos para luchar. Alice Moon en una de ellos, una niña de tan sólo 12 años de edad con ninguna habilidad aparente y mucho mas débil que los demas tributos. Pero de lo que está segura...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Alice no logra dormir muy bien a decir verdad, cada vez que cerraba los ojos sentía que había alguien afuera esperando a que ella saliera y así poder matarla. Todavía es de noche en la arena por lo que no debe haber pasado mucho tiempo desde que empezaron los juegos. Alice se frota los ojos y toma su mochila para ver que habia dentro.
La mochila esta bien cargada, hay algo de carne deshidratada, galletas y frutos secos, tambien habían fósforos y sogas, dos botellas de agua de litro, una botella vacía de medio litro y un frasco de yodo para purificar el agua. Sin duda se gano la lotería con su mochila, miro el juego de dagas y noto que le faltaba una, recordo el incidente con el tributo que la estaba siguiendo y el remordimiento se apoderó de ellla.
Dudo en si salir o quedarse para ir a buscar frutos y agua, era de noche y nadie la podría ver, pero era obvio que ella tampoco podría ver. Entonces siguió los consejos de Haymith iría a buscar un lugar alto para dormir.
Guardo todo de nuevo y salió del hueco donde estaba metida, comenzo a caminar lentamente agudizando su oido para escuchar cualquier cosa que pasara a au alrededor. En ese momento se arrepintió de no haber tomado otra mochila que tuviera una linterna, aunque seguramente tampoco la habría utilizado por miedo a que la vieran. Vago por el bosque por mucho tiempo sin saber que hacer, ya se ha cansado y parece que no podra salir. Pero un ruido hace que se ponga alerta, un ruido como de un agua en movimiento, Alice agudiza su oido para intentar describir de donde proviene el sonido, se deja guiar por su oido y llega hasta un pequeño río que esta escondido entre un monton de arbustos. Sin duda Alice tenia mucha suerte, se agacha y saca la botella que tenia vacía, la llena y le coloca unas gotas de yodo para purificarla.
Conseguir agua completado.
Decidida a no perder de vista el rio se sube al árbol mas próximo a el, al principio encontró uno justo al lado del rio, pero al intentar subir por el una rama se cayó y por consecuente ella tambien cayó.
ㅡDiablos ㅡdijo Alice sobandose la pierna en la que habia caído.ㅡ Eres fuerte no llores, estaras bien.
Se dijo a si misma y se levanto como si nada hubiera pasado, se fue el siguiente árbol mas próximo e hizo lo mismo, ese árbol parecia mucho mas fuerte que el anterior, así que subió y subió lo mas alto que pudo. Una vez en la cima, saco una de las sogas y se amarro para evitar caer, pensaba dormir un poco antes de que volviera a amanecer.
ㅡViste su cara ㅡ escuchó una voz que provenía de abajo. Discretamente se asomo era la chica del 2, que venía junto a los tributos del 4 y el del 5.
ㅡ¡No me mates, no me mates! ㅡ se burlo el chico del 5 haciendo la voz mas aguda. Los demás chicos simplemente rieron.
Estuvieron un rato mas llenando sus botellas de agua en el río y burlándose de los tributos que habían matado, un poco más y Alice se hubiera unido a la lista. Una vez se fueron Alice respiró con tranquilidad, volvió a cerrar los ojos e intento consiliar el sueño. Pero alguien estaba en contra de que durmiera y empezaron a sonar los cañones, uno, dos, tres... así sucesivamente hasta llegar a diez. Diez tributos habian muerto ya.
Cuando el himno de Panem comenzo a sonar, Alice puso su atención en el cielo donde empezaron a aparecer las fotos de los tributos muertos. La chica del 1, el chico del 2, ambos del 6 y del 7, la chica del 8 y la del 9, el chico del 10 y la chica del 11.
Eder seguía vivo y para sorpresa de Alice eso la puso muy feliz, tanto que casi tira su mochila al suelo, si no la agarra seguramente se caería.
El sol comenzó a salir, Alice se dio cuenta cuando sintió el calor del sol tocar su piel, se estiró un poco y se desamarro para bajar del árbol e ir a buscar más provisiones. Sabía que no podia volver a la cornucopia, primero por que seguramente los profesionales estarían ahi esperando que algún tributo fuera por provisiones y segundo por que ya no se acordaba en que dirección estaba. Asi que su unica opción era buscar frutos en los alrededores.
Paso por los arbustos que estaban frente al rio y busco frutos, encontró unos poco pero noto que alguien ya se había llevado algunos. Se alejo un poco más del rio, no tanto para no perderlo de vista, encontró más arbustos con unos cuantos frutos azules y rojos, pronto noto que los azules eran venenos por lo que esos no los tocó. Estaba echando los frutos en su mochila hasta que escuchó el sonido de pasos y risas cerca de ella. Se escondió rápidamente entre los arbustos, mientras veía lo que pasaba por una rendija.
Vio pasar a los mismos chicos que ya había visto, solo que faltaba uno o mas bien una, Myra la chica del dos no estaba con ellos. Y algo mas que vio era que la espada de uno de ellos estaba empapada de sangre, a Alice se le revolvió el estomago solo de pensar en lo qur le habian hecho a la pobre chica.
ㅡYa quiero encontrarme con esa chiquilla ㅡ dijo la chica del 4.
ㅡMe sorprende que siga viva. Sabes, era el objetivo de todos ㅡ añadió el chico del 5.
ㅡNo seguirá viva por mucho tiempo, yo misma me encargaré de matarla.
Poco a poco se fueron alejando y Alice salió rápidamente de si escondite para regresar al árbol en el que estaba e y quedarse ahí. Con su cuchillo en mano fue de regreso y todo pintaba bien hasta que escucho lo que para ella eran sollozos. Lentamente se fue acercando y lo que encontró le desagrado por completo, Myra estaba tendida en el suelo cubierta de sangre, en su estómago había una gran rajada que parecía haber sido hecha por una espada. Sus compañeros la quisieron matar pero hicieron mal su trabajo porque seguía viva.
ㅡ¡Ma..ta..me, por... fa... vor! ㅡ sollozo la chica en cuanto se dio cuenta de la presencia de Alice.
Alice se debatio internamente ¿Que debería hacer? Matarla o dejar que muera sola y sufra. Alice prefería las muertes rápidas y sin dolor, sin pensarlo una vez más levanto el cuchillo y la apuñalo. Su muerte fue anunciada pues rápidamente sonó el cañon, indicando que efectivamente estaba muerta.
