En la boca del lobo 3

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Todo pasó muy rápido.La entrada al lugar de Touga,Irasue,Izayoi,Miroku,Kagome,Koga y Ayame fue lo más parecido a las películas de acción,que puedas hallar en la monótona vida real.

6 hombres,contando a Onigumo,era lo que había en ese departamento.Se descuidó,pues no contaba con que la ambición de Kagura lo llevara a este punto.

Los Taisho eran 11,contándolos a todos.Y allí fue cuando Onigumo se dio cuenta de que su sobrina lo había utilizado,haciéndolo arder en cólera.

Kagura peleaba hábilmente contra Miroku y Kagome,Inu no e Irasue,peleaban como verdaderas máquinas de matar contra Midoriko,que a pesar de ser mucho más joven que ellos,le faltaba la experiencia y vivacidad de los Taisho.

Por otro lado,Izayoi,Koga y Ayame,no tenían piedad contra dos de los hombres de Onigumo,que ahora sabían se llamaban Manten y Hakudoshi.

Inuyasha y Naraku,peleaban contra los nuevos refuerzos que llegaban de quién diablos sabe donde.

Y Sesshoumaru y Rin,estaban espalda con espalda contra Onigumo.En un momento Sesshoumaru se alejó momentáneamente a ayudar a su madre,que había recibido un golpe y estaba algo aturdida.

Rin se quedó sola contra su tío combatiendo cuerpo a cuerpo,lanzó un golpe al lado derecho de su rostro,una patada al estómago,y varios puñetazos después de eso.Onigumo esquivaba con dificultad,pero también acertaba varios golpes a la castaña.

En un segundo Rin decidió dejar de jugar,sacó una pistola y acertó 5 disparos en el pecho del hombre,que cayó de rodillas,con la sangre color escarlata tiñendo sus labios y ropas,pero sin borrar su arrogante sonrisa.

Se escuchó un pitido agudo,se miraron entre todos y salieron corriendo.Era una bomba,pero Rin no alcanzó a salir.

Se escuchó una gran explosión y ell se cubrió como pudo.El incendio comenzó y Onigumo habló con sus últimos suspiros.

Onigumo(débil):Ja,n..o..s ire...mos j..un..tos al...inf.i..er..no so..bri...na.

Rin:Te veré allí querido tío,pero no será hoy.Dijo e intentó ponerse de pie,pero tenía la pierna atrapada debajo de una gran pieza de concreto.

Rin*Maldición,al parecer si iré al infierno dentro de poco*Pensó divertida.

Tosió por el humo que empezaba a entrar en sus pulmones y se desmayó.

(...)

El ruido de una máquina de hospital la despertó.

Abrió los ojos que traían sus lentes con el cristal izquierdo quebrado,y miró hacia su costado,encontrando a su peliplata dormido apoyado en su cama,con manchas de polvo y carbón en su rostro,algunos cortes superficiales,y su cabello totalmente blanco,ahora oscurecido por los restos de ceniza en él.

Rin*Él me...*

Sesshoumaru:¿Ya despertaste?¿Cómo te sientes Rin-chan?Dijo ya despierto y viéndola con preocupación.

Rin:Estoy bien,¿tú me...salvaste?Vio al hombre asentir y le agradeció.

Él entonces comenzó a contarle todo,lo de la llamada de Naraku a su celular,y que en realidad ya no sentía nada por Kagura,que en paz descanse en el noveno círculo del infierno,añadió.

Ella comprendió,pero no lo perdonaría tan fácilmente.

Sesshoumaru: Rin yo...te amo.Dijo desviando la mirada y ella solo lo miró asombrada y susurró casi inaudiblemente un “yo también te amo”.Para luego seguir descansando.

La chica de los cerezosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora