AMOR DE CUATRO (REBELDE WAY)

capítulo 14

Narra Mía.

No se que hacer Ana se fue de la casa, de mi casa. Tendré que volver a Buenos Aires, para buscarla o ¿no? Estoy muy confundida. Manuel tendrá algo que ver, Ana lo dejo claro el la carta dijo que lo odio, agr no que que hacer. Ahora me encuentro llamando a Lucia, no se por que pero tengo el presentimiento que ella puede saber donde este mi hija.

Ya voy mas de tres veces llamándola pero no me contesta me dice: "el teléfono que ustedes marco esta fuera del área de servicio" ya me harte. Lo único que se me ocurrió es dejar un mensaje.

Mía: Lucia por favor contesta el maldito teléfono - dije llamando otra vez - ¡ay! - grite tirando el teléfono al sofá -.

Para mi suerte Cande y Arturo se fueron hacer las compras con la sirvienta, y no saben de nada de lo que paso con Ana.

Manuel: Mía, mi amor ¿podemos hablar? - dijo golpeando la puerta -.

Mía: no, no te voy a abrir hasta que me digas que paso con Ana y Lucia. No va hacer pura casualidad que se vallan al mismo tiempo ¿no?.

Manuel: dale Mía, pareces una niña de cinco años.

Mía: que parezco a una niña de cinco - me reí sarcástica - esta "niña" te dio tres hijos, ¡tres hijos! - grite lo ultimo -.

Manuel: si ya lo se, pero abreme la maldita puerta.

Mía: no - dije y el dejo de golpearla -.

Ahora a volver a intentar a llamar a Lucia ella de seguro debe saber donde esta Ana. Intente un vez ahí me contesto.

Mía: por fin me contestas - dije en la llamada -.

Lucia: hola Mía, ¿que pasa? - preguntó del otro lado -.

Mía: te marqué un montón de veces y nunca atendías el maldito teléfono.

Lucia: perdón. ¿Que pasa?.

Mía: ¿no has visto a Ana? - dije desesperada -.

Lucia: como quieres que la vea si estoy manejando - dijo riendo del otro lado -.

Mía: si... pero... ¡ay! - grite ya harta de no saber nada de mi hija -.

Lucia: ¿te encuentras bien?.

Mía: si, me encuentro de maravilla - dije sarcástica -.

Lucia: se nota tu sarcasmo. Este.... te tengo que dejar.

Mía: pero.... - no pude terminar por que me corta el estúpido teléfono -.

Ay estoy harta, ¡¿que puedo hacer?! Ay dios dame una señal de donde pueda estar mi hija. Bingo bango ¿como no pensé en eso antes?.

Narra Lucia.

Me duele ver como Mía sufre por que me lleve a Ana, pero que puedo hacer no me puedo volver y ya. Encima la prometí a Ana que la llevaría a casa de sus abuelos.

Ana: ¿era mi mamá? ¿No? - me pregunto con una leve sonrisa -.

Lucia: si, me llamo para preguntar por ti...

Ana: perdón, con esto te estoy metiendo en problemas con mis padres - dijo triste -.

Lucia: tranquila, igual no quiero saber nada de el estúpido de tu papá sin ofenderte.

Ana: no, no me ofendes es la verdad igual mi mamá se va a enterar de lo que paso.

Lucia: ¿se lo vas a decir?.

Ana: si, no quiero que mi mamá sea una idiota que no se da cuenta de nada.

Lucia: Ana no digas eso es tu mamá - le dije en un tono serió y regañante -.