Epílogo

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Jungkook estaba triste por dejar atrás la casa, incluso si era solo una inversión ridícula hecha por sus amigos, la cual le había enseñado que no debían permitirles tomar decisiones juntos.

Mientras todos estaban afuera con sus maletas, Seokjin tratando de equilibrar cinco de ellas sin que se cayeran, hubo la misma nostalgia melancólica y agridulce que siempre venía con el final del verano. (A pesar de que era la mitad del invierno, pero aún así).

Cuando los demás vieron a Jimin vestido con el suéter de Jungkook, holgado y largo, Hoseok hizo un ruido de arrullo. "Ustedes son tan lindos", dijo efusivamente.

"Oye", dijo Taehyung, señalando el suéter. "¿Cómo es que cuando Jiminnie roba la ropa de Jungkook es lindo, pero cuando tomo la tuya soy un clepto*?"

"Porque están saliendo, Tae", dijo Hoseok. "Cuando me quitas la ropa no es porque quieras ser lindo, es porque eres demasiado flojo para comprarte la tuya".

"Tal vez estoy tratando de ser lindo", resopló Taehyung.

Jungkook se apoyó en sus maletas, escuchando con cariño sus discusiones, cuando Jimin le tocó el brazo. "No te apoyes en ese, los peces están ahí".

"¿Qué?"

"Los peces de cristal, los que nos consiguió Hobi-hyung. No quiero que se rompan ". Jimin abrió la cremallera de la bolsa y miró adentro para ver cómo estaban, después de haberlos envuelto cuidadosamente en su ropa. "Quiero ponerlos en el tocador junto a una foto nuestra".

"Aww, bebé", dijo Jungkook. "Me estás haciendo temblar".

"Eres más cursi que yo".

"No lo soy."

"Lo eres, y por eso te amo".

Jungkook estaba a punto de besar la sonrisa de suficiencia de su rostro cuando se dio cuenta de que detrás de ellos todos habían dejado de hablar. Se volvió, avergonzado, para ver que los demás estaban observando su repugnante demostración de afecto con diversas expresiones que iban desde muecas de asco hasta sonrisas ensordecedoras, en el caso de Taehyung.

"¿Quién quiere intercambiar asientos conmigo en el avión?" Preguntó Yoongi, cuando el taxi finalmente se detuvo junto a la acera. "No estoy escuchando esto en todo el camino a casa".

"Solo ponte Kung Fu Panda", dijo Jungkook, ayudando a Jimin a colocar su maleta en el maletero. "Solo puedo hablar durante los primeros diez minutos, pero es genial como distracción".

Yoongi entrecerró los ojos. "Eres un verdadero mocoso, ¿lo sabías, Jungkook?"

"Se necesita ser uno para reconocer otro", dijo Seokjin, alborotando el cabello de Yoongi y entregando sus bolsas una por una a Namjoon, quien de alguna manera se había convertido en la única persona que subía al taxi.

Taehyung le dijo al taxista su destino, y una vez que todos lograron caber dentro del auto, Jimin se sentó en el regazo de Jungkook para hacer espacio suficiente, con tal de  que un Yoongi descontento tuviera su propio asiento. El hecho de que sus vacaciones terminaban repentinamente se volvió muy real.

Jungkook estiró el cuello para mirar por la ventana la casa en la que acababan de pasar las últimas dos semanas, viendo cómo se hacía cada vez más pequeña a medida que se alejaban. Jimin entrelazó sus dedos y echó la cabeza hacia atrás, besando su sien, y eso fue suficiente para calmar el miedo subyacente que tenía de que su reconciliación con Jimin había sido un sueño febril inducido por las vacaciones y que todo desaparecería en el momento en que salieran por la puerta de aquella casa.

Pero la casa alquilada de Hoseok y Namjoon estaba a millas de distancia de ellos ahora, y por lo que él sabía, Jimin no iría a ningún lugar por un largo tiempo.




FIN

°°Once Upon a Timeshare°° ||Traducción||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora