Me giré en la cama quedando con la mirada en el techo, toda la noche y todo el día no había podido dejar de pensar en Juliana, estando con ella no me importaba lo que los demás pensaban de mí, sólo me interesaba ella y lo peor es que estaba más que consiente que Juliana Valdés me volvía loca.
Mi teléfono comenzó a vibrar y ya que lo traía en mi short me sobresalte un poco. “Am” decía la pantalla y una sonrisa se pintó en mi rostro.
*Llamada*
Val: —Hola— saludé felizJuls: —Hola— respondió —¿Ya estas lista?
Val: — ¿Lista? ¿Para qué? — le pregunté sin entender.
Juls: — ¿No iras al partido?.
Val: —Ya te dije que sin ti no iría— me senté en la cama.
Juls: —Cámbiate ya, estoy afuera de tu casa.
Val: — ¿Qué? — casi grite — ¿Y por qué no me llamaste antes Juliana?— le reclamé.
Juls: —Porque no tenía pensado ir, cámbiate ya— repitió.
Val: —Está bien, no tardo— mentí, claro que tardaría.
Juls: —Hey— dijo antes de colgar —Vestido no por favor— bufe molesta y colgué.
*Fin de la llamada*
Rápido entre a mi armario y agarré un jean, junto con una camisa medio sencilla; hice una coleta alta en mi cabello y deje mi fleco recto, sólo un poco de delineador negro y brillo labial y bajé corriendo las escaleras. Salí y me lleve una gran sorpresa, venia en la motocicleta.
jul— ¿Lista? — preguntó y asentí con la cabeza, ladeo la cabeza indicándome que subiera.
Val: — ¿Iremos ahí?— pregunté en shock.
Juls: —Si— contesto sonriendo —No me digas que también le tienes miedo.
Val: — ¡Claro que no! — dije emocionada y corrí a su lado admirando la impecable motocicleta negra.
Juls: —Ten— me entregó un casco al igual negro y rodé los ojos tendría que deshacerme la coleta. —Me gusta tú cabello suelto— pasó su mano por mi cintura y me acerco a ella.
Era demasiado fría para decir un cumplido, así que cuando decía uno había que agradecérselo muy bien, aun sujetando el casco pasé mis brazos por su cuello y uní nuestros labios, me besaba con una delicadeza exquisita; sus deliciosos labios se acoplaban a la perfección con los míos, su mano subió a mi mejilla.
Juls: —…Y si mejor no vamos— dijo entre besos.
Val: — ¿Estás loca? — Pregunte riendo —Yo no me pierdo este paseo en moto— di otro beso sobre sus ahora brillantes labios. —Espera... — reí y con mi pulgar saque los restos de brillo labial de sus labios. —Ahora si— me coloqué el casco y me apoyé sobre su hombro para poder subir y en cuestión de segundos ya estaba atada a su cuerpo.