Capítulo 33

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Era extraño ver a un pequeño bichito correr por todo el pecho de Rose, por más que intentaba despertarla no podía y su instinto le decía que algo no estaba bien... Aunque el aroma a pay de manzana lo hacía no seguir insistiendo en despertar a su amado hechicero.

La curiosidad comenzaba a invadir su mente, al darse cuenta que su amada Rose no despertaba de ese sueño profundo, comenzó a recorrer con mucho interés aquel sitio donde se encontraban.
Ropa tirada por todos lados, algunos alimentos en las canastas e inclusive algunos elementos de la naturaleza siendo improvisados como muebles.

De repente el sonido de unos pasos acercándose lo alertaron.
Rápidamente corrió lo más rápido que pudo para refugiarse entre las prendas de su amada hechicera para que los demás no lo vieran.

— ¡Nuestra hija tiene el sueño pesado! — Exclamó Clara entrando nuevamente a la carpa mientras colocaba el pay sobre la mesa.

— Ya la conoces cariño, además ahorita que despierte nos platicará todo lo que ha hecho después de aquel incidente — Respondió Dave entrando a la carpa.

— Lo mejor de todo esto es que nuestra Rose al menos se pudo ocultar del rey de Caristeas así como de sus guardias... No sé que hubiera hecho si perdieramos a nuestra hija.

En ese momento Clara se agachó con cautela para acariciar con ternura el rostro de su hija.

Ante ese cálido tacto, Rose lentamente abría sus párpados mientras imaginaba que esa caricia era de ese bichito.

— Déjame dormir Ha... — Murmuró entre sus labios, sin embargo logró callarse a tiempo cuando su vista se acostumbró a la luz de ese lugar.

Se llevó una mano a la boca para no terminar de llamar a su pequeño bichito y miraba con asombro a sus padres.

— ¡Están vivos! — Exclamó con asombro, no podía creer que sus padres estuvieran frente a sus ojos después de lo que había pasado.

—  Claro que lo estamos, gracias a los conjuros que nos trajeron de vuelta a la vida — Respondió Dave acercándose a su hija.

Rose se incorporó del suelo y rápidamente corrió a los brazos de sus padres, después de todo lo que habían pasado por fin podía verlos de nuevo.

— No saben la falta que me han hecho estos días — Susurró Rose sin romper ese emotivo abrazo con sus padres.

— Nosotros creímos que el rey y sus guardias te habían hecho algo.

En ese momento la joven hechicera cambió su expresión a una más preocupada, se le había olvidado Hawk.

— ¡Mi bichito! — Exclamó asustada, rápidamente se soltó de los brazos de sus padres y con desesperación comenzó a buscar a su pequeño escorpión.

Sin embargo de pronto sintió unas ligeras patitas correr dentro de sus prendas, hasta que llegó a su hombro.

— ¡Aquí estás!

— Te dije que ese insecto era mascota de nuestra hija — Susurró Dave en el oído de Clara mientras los dos veían a su hija como tomaba a ese escorpión en sus manos.

— Pero... ¿Porqué un insecto? — Respondió Clara mirando con asombro  a su hija quien parecía llevarse de maravilla con ese bichito.

— Rose — Interrumpió Dave acercándose a su hija — Dentro de dos días tenemos que partir, lo bueno de todo esto es que pudimos encontrarte a tiempo.

La joven hechicera no podía creer lo que escuchaba, porqué partir ahora que tiene una gran responsabilidad, tomó a su pequeño escorpión y se lo colocó sobre su hombro.

Corazón Escarlata (Hawk x Rose)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora