Corazón Escarlata (Hawk x Rose)

Capítulo 8

Esa voz la hizo estremecer de pies a cabeza, lentamente se giró para ver que ahí estaba Hawk detrás de ella con una mirada intimidante.

-Me alegra que estes aquí sin poner algún pretexto- Sonrió ladino.

-Bueno fueron órdenes suyas y no me puedo negar- Contestó seriamente aunque en el fondo ese sujeto la ponía nerviosa, tenerlo tan cerca casi invadiendo su espacio personal.

-¡Bien! Toma asiento por favor- Hawk extendió su mano para invitarla a sentarse, después él hizo lo mismo quedando justamente a lado de Rose.

-Jamás te había visto por estos lugares, ¿Realmente de donde vienes?- Comenzó a cuestionar a la joven aprendiz, no negaba que le causaba curiosidad por saber más de ella.

El cocinero comenzaba a llevar diversos platillos para la cena, colocándolos en medio de la mesa y dejando una buena botella de vino.

-Yo provengo de un lugar muy lejano, es un pequeño pueblo donde nos llevaría dos días en llegar hasta allá- Contestó tratando de evitar la mirada de Hawk.

-De acuerdo...- Hawk comenzó a tomar algunos alimentos y después miró a la joven, quien no había tocado uno de los platilllos para cenar- ¿No piensas comer?- Cuestionó un poco molesto.

-Yo...- Levantó su mirada para observar esa mirada seria que le transmitía- Yo, si disculpe su majestad- De manera inmediata tomó un de los platillos que tenía cerca y con muchos nervios comenzó a cenar.

- Rose, tu...- Hawk no pudo terminar de hablar, en esos precisos momentos entró Astoria con un sobre en las manos.

-Buenas  noches su majestad, disculpe mi atrevimiento pero llegó una carta para...- La joven de cabellos rosas no terminó de explicar porqué Hawk le tomó la palabra.

-Déjalo encima de la mesa,  cuando me desocupe la leeré- Respondió sin quitar la vista de sus alimentos y comiendo sin prisa alguna.

-Bueno, ese es el detalle... Esta carta no es para usted- Contestó un poco nerviosa.

-¿No? Entonces para quien- Cuestionó confundido.

-Es para Rose... Ling Ling lo recibió hace unos minutos en la entrada del castillo- Astoria le extendió su mano entregándole ese sobre misterioso.

-¿Para mí?- Rose no podía creerlo, apenas llevaba un día en ese lugar y hasta correspondencia le tocaba recibir. La tomó entre sus manos- Muchas gracias Astoria- Agradeció con una sonrisa.

-De nada Rose, ahora si me disculpan iré a ver que más falta en el castillo- Astoria hizo una leve reverencia ante Hawk y se retiró de ese lugar.

Hawk tenía mucha curiosidad por saber quien le había mandado esa carta a esa joven aprendiz. La observaba de reojo esperando el momento indicado para que lo abriera pero jamás lo hizo, Rose no era tan tonta como para leer esa carta misteriosa frente a él.

-Disculpa Rose pero necesito entrar a la cocina para que me puedan preparar algo especial, no tardo- Hawk se levantó de su silla y comenzó a caminar rumbo a la cocina, pero en el momento exacto que Rose miró para otra dirección, el se escondió detrás de los pilares.

Rose dejó escapar un suspiro, aliviada pensando que por fin se había librado un rato de Hawk. Sacó la carta y comenzó a leer el remitente.

-Shawn- Susurró mientras la abría con cuidado.

Rose:

Sé que no ha pasado ni un día pero es de suma importancia que nos veamos mañana en el pueblo. Busca cualquier excusa para salir... Dejaste tu varita tirada cerca del castillo y piensan que alguien se ha infiltrado en él.
¿Cómo me di cuenta? Te preguntaras, la verdad desde que se fueron de la cabaña seguía tus pasos. Justo en el momento en el que te acomodabas tu abrigo, se cayó... Quise tomarla pero uno de los guardias lo vio y lo recogió.
Trate de quitársela a la mala pero salió  corriendo gritando que algún hechicero entró al  castillo. Por fortuna Ling Ling estaba cerca y me dejó escribirte estas líneas para poder advertirte.

                                                      Shawn

-Shawn- Susurró doblando la carta, ahora que la había leído necesitaba deshacerse de ella. Si alguien del castillo se daba cuenta que ella era la hechicera no dudarán en acabar con ella de la misma manera como lo hicieron con los demás.

Hawk pudo escuchar ese nombre y eso despertaba más su curiosidad. La carta Rose la había leído en su mente, pero el nombre de esa persona se le salió sin pensar.
Salió de su escondite para regresar nuevamente a la mesa.

Rose al escuchar sus pasos comenzó a sentirse nervioso.

-Rose... ¿Tu tienes familia por aquí?- Preguntó sin darle más vueltas al asunto, esperando que revelara quien es ese tal Shawn.

-No... Solo unos conocidos, son mis amigos y nadamás- Trató de sonar lo más tranquila que podía, pero en el fondo estaba muy nerviosa.

-¿Y entonces quien... - Las palabras de Hawk fueron interrumpidas nuevamente.

-Señor, disculpe mi atrevimiento pero esto es urgente...- Se acercó uno de los guardias hasta donde estaba Hawk sentado.

-Habla Cyrus, no tengo toda la noche- Contestó molesto, al ver que se acercaba también otro guardia.

-Si mi señor... Verá esto estaba cerca del castillo- El guardia le entregó una varita... Una que conocía Rose a la perfección.

-¡Hay hechiceros cerca del reino mi señor!- Respondió Cyrus intentando mostrarse preocupado por su rey.

-Esa varita estaba cerca del castillo, debemos cuidarle los pasos su majestad... No faltará quien quiera aprovecharse de la situación y quiera atacar desde adentro-

Hawk dio un suspiro molesto, después de lo que había pasado y que sus guardias entregaran malas cuentas con el resto de los hechiceros, necesitaba de alguno de ellos, para que pudieran revertir el hechizo que lo hace sufrir.

-Si ven a uno de ellos, lo quiero vivo- Hawk se levantó de su silla y comenzó a caminar de manera intimidante hasta donde estaban los guardias- ¡Y está vez no quiero errores!-

Esa voz tan demandante hizo que Rose  se preocupara aún más... ¿Hawk sería capaz de hacerle algo malo? No lo sabía, pero necesitaba guardar cordura, de lo contrario su vida  correría peligro.

Cyrus y el otro guardia, simplemente asintieron... -Necesitamos que nos acompañe señor-

Hawk dejó escapar un gruñido molesto, la oportunidad de cenar junto a Rose se había arruinado, tampoco sería tan malo como para ordenarle que lo esperara.

-Rose, lamento dejarte sola, mañana nuevamente cenamos. Mi deber me llama- Hawk miró de reojo a Rose y después salió de ese lugar junto a los guardias dejándola sola.

-Necesito deshacerme de esto- La joven de cabellos rubios se levantó de su silla y se acercó a unas velas encendidas en un mueble rústico que estaba en una esquina.
Sacó la  carta y comenzó a quemarla en esa ligera llama que desprendía.

-Será mejor así, no deben saber que soy yo- Susurró Rose recordando que Hawk tenía su varita, necesitaba quitársela de  cualquier forma.
Después de que se consumara completamente la carta, salió de ese lugar para regresar a su habitación... Mañana tendría que verse con Shawn.

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