Dieciocho

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Ese día él llegó corriendo a mi casa y aunque estaba empapado por la lluvia y mi madre trato de decirle que no era prudente verme entro a mi cuarto. Cerro la puerta detrás de él con seguro.

—¿Es cierto Hajoon? Es cierto todo lo que están diciendo de ti.

Vacile en contestarle, sentía mucha vergüenza en ese momento que ni siquiera podía verle a los ojos. Al final dedujo mi respuesta por mis acciones. Soltó una maldición debido a la frustración que sentía por mi culpa.

—Lo siento Jimin, yo solo quería que él me amara.

—Lo sé, sé que las personas son capaces de cometer muchas estupideces por amor –dijo sentándose a un lado mío para abrazarme–. Pero él ya lo dejo claro, él no te ama y nunca lo hará.

—Lo sé, y no sabes cuanto me duele eso –le dije llorando más fuerte contra su pecho–. ¿Por qué él no puede amarme? ¿Acaso no hay nada bueno en mí?

—Te equivocas, hay muchas cosas buenas en ti. –Nuestras miradas se conectaron en ese instante–. Eres muy buena escuchando los problemas de las personas, no juzgas a nadie por su apariencia, ayudas a todo el que te pide ayuda, eres muy paciente y siempre luchas por tus sueños. Esas cosas te vuelven muy especial y si Taehyung no puede valorar eso entonces yo sí lo haré.

SIN GRACIA • Park Jimin  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora