Cuando cierro mis ojos

Capítulo 18

A la mañana siguiente, Louis se despertó después de un agradable sueño con Harry. El estar en el desván hizo que fuera difícil de ignorar el descubrimiento de la noche anterior. Volvió a abrir la página y se dio cuenta de era un mal día para conocer la casa porque, muy a su pesar, el tiempo que había disponible para ver el desván era durante las horas de visitas de Harry.

Por mucho que Louis quería ver a su novio, algo acerca de la coincidencia tuvo mucho más peso, y terminó disculpándose con una excusa inventada de por qué no podría verlo ese día.

"Bueno días, Lou. ¿A qué se debe esta llamada a pocas horas de que estés consiente?" preguntó Harry en tono de broma.

Louis se mordió el labio, reconsiderando por un momento la idea de añadir otra mentira. Pero, no lo hizo. "Sólo llamaba para decirte que no podré ir hoy porque tengo montones y montones de trabajos con los cuales ponerme al día. Me siento muy mal, pero no puedo arriesgarme a fallar en clases...".

Al instante se sintió culpable, pero la mentira ya había salido de sus labios, pero Harry pareció no notarlo. "No hay problema. Niall y Zayn van a estar conmigo por esa cosa de su película. Así que no te preocupes porque no voy a estar solo, además prácticamente pasamos toda la noche juntos".

"Eso es diferente" señaló Louis, y el desván volvió a su mente. "Pero tienes razón, te veré esta noche, ¿si?"

"Perfecto" respondió Harry antes de colgar.

Louis frotó círculos por sus sientes, tratando de no dejar aparecer el auto-odio por mentir tan descaradamente a alguien que le importaba tanto. Y, sin embargo, en ambos casos, si estaba siendo un mentiroso, era por el bien de Harry, más o menos.

"Oye, Louis. Antes de que salgas a donde quiera que vayas, llegaron estos documentos desde... ¿el hospital?" murmuró Zayn, entrando en la habitación que compartían mientras leía el correo de Louis.

Louis le arrebató la carta, pero había sido demasiado tarde. El daño ya estaba hecho y ahora O'Malley y él no eran los únicos que sabían que él era el donante, ahora Zayn también lo sabía.

"No... no puede ser" murmuró Zayn, perplejo por la noticia. "¿Por qué no se lo has dicho a Harry?".

Louis suspiró, colapsando en su cama. Él ahora mismo no necesitaba esto, pero el enfrentamiento era inevitable.

"Él no aceptaría si supiera que soy yo con quien comparte el mismo tipo de médula ósea. Los doctores no han sido capaces de encontrar a alguien más y aquí estoy yo... esperando y dispuesto". Explico Louis y Zayn asintió comprensivamente.

"Esta es la última vez que leo el correo de otra persona" dijo Zayn, sacudiendo la cabeza mientras se sentaba a leer su propio correo. "¿Quién sabe qué otros secretos podría encontrar que no quiero conocer ni ser parte de ellos".

Louis negó ante el comentario de su neurótico amigo cuando se él se puso de pie y recogió sus cosas para salir de una vez por todas. "Zayn, labios sellados, ¿de acuerdo?"

Zayn suspiró, odiando estar involucrado en el engaño debido a su curiosidad. "Bien..."

"Bueno, nos vemos más tarde" dijo Louis, caminando a través de la puerta del dormitorio.

"Nos vemos" contestó Zayn. Y miró a su amigo salir y mientras lo hacía, el peso del secreto se sentía sobre sus hombros.

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El aliento de Louis se escapó por completo al entrar al desván. Pulgada por pulgada, era exactamente igual a en donde él y Harry se encontraban en el sueño. Louis ni siquiera podía comenzar a entender la coincidencia que tenía delante de sus ojos.