Cuando Llegaste A Mi Vida

018|| ¿Quien es ella?

Noah

Cuando hablé con Shelley sobre la cena con mis padres me refería a la cena con mi madre y su esposo. Con mi padre ya cenaré otro día que no ande borracho.

Nunca le he hablado acerca de mi familia y ella tampoco ha preguntado. Además tampoco creo que sea una bonita conversación.

Es decir quien quiere decirle a su perfecta novia que sus padres se separaron cuando era adolescente porque su padre era un borracho y golpeaba a su madre.

Que esta última lo dejo y ahora tiene un nuevo esposo.

El señor Gonzalo y yo no tenemos mucha relación-El esposo de mi mamá-Hablamos solo cuando es necesario.

Y con necesario me refiero a cuando voy a ver a mi madre. Nunca he vivido con ellos.

Antes de que mis padres se separaran mi abuelo materno murió y con parte de la herencia compré el piso donde vivo, al que me mudé en cuanto fui mayor de edad.

Ahora estoy aquí en frente de la puerta a de mi madre tocando el timbre y preparando la mejor sonrisa que pueda tener para ella y su esposo.

-Querido-me abraza y me besa en la mejilla-Llegas tarde-me reprocha finalmente.

-Lo siento mamá- le digo mientras me adentro en su cálido hogar.

Mamá dijo que está siempre seria mi casa también pero en el fondo ambos sabemos que prefiero vivir lejos de su esposo.

-No te preocupes. Gonzalo llegó un poco tarde del trabajo y aún no está listo para cenar- me regaló una sonrisa.

Estamos sentado en la sala-en su sofá en forma de L- Mientras tomamos unos tragos en espera de mi querido padrastro y hablamos de mi vida obviamente.

Mamá se está aprovechando de la situación y me ha estado bombardeando a preguntas q las que yo solo contesto "Si" "No" y "Bien".

-Tú padre me ha dicho que últimamente no han hablado-mi rostro cambió rápidamente.

El tema Roger-mi padre-No es algo de lo que me guste hablar.

-Mamá ya hemos hablado de esto-le recalcó muy serio.

-Noah no porque tu padre y yo ya no estemos casados ha dejado de ser tu padre-asegura atravesándome con la mirada-Y tampoco deberías evitarlo. A él le interesas y se preocupa por ti.

-Si mamá-repito como un niño pequeño-En estos días le hablo.

Después de una conversación no tan agradable con mi madre, Gonzalo bajo y pudimos comenzar la cena.

-Noah ¿como va esa carrera?-pregunta Gonzalo mientras lleva su copa de vino a la boca.

-Bien. La verdad últimamente ni le he puesto cabeza a eso-sonrío-he estado pensando en mejores cosas-digo finalmente.

-Eso me suena a qué hay una chica en todo esto-suena más a afirmación que a pregunta.

-Pues si. La hay-aseguro para luego echarle una mirada a la cara de felicidad que ha puesto mi madre cuando he mencionado a la chica.

-¿Cuál es su nombre?-pregunta mi madre esta vez.

Ya empezamos. No va a parar hasta que sepa todo lo que quiera.

-Cariño no lo agobies-la regaña su esposo.

-Soy su madre a quien más se lo va a contar-le reclama ella.

-Shelley-suspiro por la pequeña discusión que han formado por esto-Su nombre es Shelley.

-¿Y que estudia?-vuelve a preguntar mi madre curiosa.

Ya sabía yo que no le bastaría con una sola pregunta.

-Cariño- la vuelve a regañar su esposo.

-Literatura-digo casi al mismo tiempo que viró los ojos.

-¿Es de por aquí?-me sonríe.

-Es de una ciudad de las afueras. Queda a dos horas de aquí.

-¿Donde la conociste?

Su esposo la mira casi sin creerse la pregunta, Bueno la preguntas porque ya lleva un rato haciéndolas.

-Pues donde va a ser mamá en la universidad-sonrío al recordarme que omití que es la hermana de Tyler y que somos novios a escondidas.

Parecemos niños de secundaria escondiéndose de sus padres, pero aún no estoy seguro de cómo Tyler se tome esto.

-¿Alguna otra pregunta oficial?-Inquiero al ver que se ha quedado callada y.... ¿Pensativa?

-¿Cuantos años tiene?-me sigue interrogando.

Si que estaba pensando.

-Era sarcasmo-me levanto de la mesa-Voy al baño un segundo. Enseguida vuelvo.

Escuche como mientras caminaba hacia el cuarto de baño su esposo la regañaba por sus preguntas.

No sabe que mi madre si de algo carece es de pena al hablar.

La cena terminó siendo más agradable de lo que pensé. Terminamos de comer el delicioso filete y teníamos un increíble postre de chocolate.

Digamos que tengo un pequeño amor por el chocolate.

Deje la casa de mi madre temprano la verdad, claramente obligado por ella con la excusa de que más tarde sería más peligroso.

Obviamente no me dejó ir sin antes hacerme prometer que llevaría a Shelley a cenar con ellos para presentarla como mi novia formalmente.

No sé en qué siglo se cree que vive.

También me hizo prometer que llamaría a mi padre para preguntar al menos cómo estaba y me pidió de favor que aceptara cenar con él siquiera una vez al mes.

Voy de camino a mi piso escuchando música y pensando en el día de mañana.

Esto cada día se complica más. Como le voy a hacer para estar con Shelley y con Tyler en el mismo lugar.

Sobre todo para estar bien con ambos.

Es decir, quiero pasarla bien con mi amigo pero también quiero estar con mi novia.

Por un segundo dejo de pensar y me concentro en la música que suena en el auto.

Digamos que escuchar música me relaja y lo disfruto.

5 Seconds Of Summer suena en la reproductora y me hace cambiar de aires, ser mi yo relajado que no tienes más problemas que pensar que hará con su resaca del día siguiente para ir a clases.

Hay días que extraño mi antiguo yo. El que solo le importaba salir tomar sin pensar en nada ni en nadie.

Pero ahora, ahora está ella y cuando la veo me trasmite tanta paz que realmente pienso que estábamos destinados a ser.

Ella era para mi siempre lo fue. Solo que antes no era el momento.

El momento era ahora. Era mi momento de demostrar cuanto me había hecho falta y cuanto la había necesitado.

Porque ella llegó para cambiarme, para hacer de mi una persona con sueños y metas.

Y si tengo un gran sueño. Quiero que ella algún día viva conmigo.

Quiero despertarme todos los días y que su precioso rostro sea lo primero que vean mis ojos.

Que sus hermosas mejillas sean lo primero que mis torpes manos acaricien y que su suave y delicada piel sea la que la mía erice al besar ese pequeño lunar que tiene en el cuello.

¿Me he vuelto un hombre cursi?

Si lo he hecho.

¿He vuelto a caer en las trampas del amor?

También.

¿Pero saben que no voy a hacer?

Perderla.