Capítulo 26

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—A ver si entiendo.— interrumpió Tim, acomodándose en la silla— Quieres contactar a Deadshot para usarte de carnada y atrapar a Deathstroke.

Megan asintió con su cabeza, permaneciendo sentada sobre la cama. Si bien hace unas semanas sus heridas habían sanado, todavía se encontraba un poco cansada.

—Exacto.

—Estás loca.— volteó a ver la computadora.

—Quizá un poco, pero eso no quita el hecho de que sea un buen plan.

—No es tan fácil como piensas, Meg.— murmuró, enfocando toda su atención en la pantalla— La otra vez casi te mata. Nisiquiera el traje pudo protegerte.

—Bueno, eso creo que pasó porque no recibí los golpes necesarios para que se activara el escudo.— rascó su nuca, un poco avergonzada— Pero te prometo que la próxima vez estaré al cien porciento. No solo recibiré los golpes, también los daré.— trató de bromear, sin embargo notó que Tim se encontraba bastante tenso.

Sin dudarlo, se puso de pie y caminó hacia donde estaba él.

—Los problemas no de resolverán si los ignoras. Hay que encontrarles una solución, aunque sea difícil.— dijo Megan, colocándose a su lado— Por el momento, este es el mejor plan que tenemos. Quizá con un poco de ayuda...

—No.— contestó firmemente.

Megan entrecerró sus ojos, tratando de entender el porqué del comportamiento del chico. Su vista viajó desde su rostro ligeramente enrojecido y sus ojos cristalinos hasta la mano que se encontraba sobre el mouse, la cual temblaba ligeramente.

—Artemisa me contó lo que pasó en la bionave.— mencionó Megan tras darse cuenta de lo que le sucedía a Tim dentro de su cabeza— Lamento haberte preocupado así.

Sin poder seguir viéndola a los ojos, Tim desvió su mirada hacia el suelo.

—Pero lo bueno es que hierba mala nunca nunca muere.— bromeó para aligerar el ambiente, sin embargo su chiste no le provocó ni un poco de gracia.

—Ese es el problema, Megan. Tú no eres mala.

Las mejillas de la peliblanca adquirieron una tonalidad roja.

—Te prometo no ser tan inconsciente en las próximas misiones. Te aseguro que seré más precavida.

—Mejor prométeme no involucrarte más en el asunto de Deathstroke.

Ante aquellas palabras, Megan ladeó su cabeza. Con su mano, movió con delicadeza la silla de Tim para verlo  de frente.

—No.

Él frunció su ceño— ¿No?

—Deathstroke es mi problema, no el tuyo. Que haya aceptado tu ayuda es un tema aparte.— argumentó— Y como es mi problema, yo misma lo resolveré.

—No, no lo harás.

—Sí, si lo haré.— cruzó sus brazos sobre su pecho— No dejaré que andes de detective por ahí arriesgando tu vida.

—Pues yo no dejaré que andes de carnada por ahí.— contraatacó imitando la acción de la chica.

—¿Me estás retando?— inquirió alzando una ceja.

—¿Qué? ¡No! Solamente no quiero que mueras.

—Pues para tu información no quiero que tú mueras.

—De los dos soy el que menos probabilidad tiene de morir.

Al entender lo que trató de decir, Megan abrió su boca de par en par, estando ofendida— ¿Me acabas de decir débil?

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⏰ Última actualización: Dec 22, 2021 ⏰

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Red Robin and Alcatraz [Tim Drake]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora