Cuando el Alfa regresó, encontró al Omega en el baño, se había arrastrado hasta allí y había puesto el seguro impidiendo que el Alfa entrara.
- abre la puerta, niño - dijo el Alfa comenzando a molestarse
- no! Prefiero morir! - gritó el Omega mientras lloraba
- morirás, entonces - dijo el Alfa y no hubo ningún sonido después
El Omega se había acurrucado en una esquina del baño, prefería morir y no tener un enlace con quien no deseaba, pero su cuerpo y lobo estaban en contra. Porque su lobo interior aullaba por acercarse al Alfa.
Dio un grito para nada masculino cuando la puerta se abrió, en las manos del Alfa había una llave.
- no iba a tirar la puerta teniendo la llave, niño, ahora ve a la cama o tomaré en cuenta tus palabras sobre matarte, aunque morirás solo - le dijo el Alfa muy serio pero sin usar su voz de mando
El Omega acató las órdenes demasiado asustado y adolorido, sólo por eso, su cuerpo no daba para más y llegó a las justas a la cama. El Alfa entró al baño y sacó una toalla húmeda.
- pon eso sobre tu herida, no sanará pero aliviará un poco...la flecha que te alcanzó tenía veneno - le dijo ese Alfa y se fue dejándolo
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[Seungkwan]
Miré mi herida y me lamenté, iba a morir solo, mis padres no se enterarían, quizás me estarían buscando y los cazadores estaban rondando, ellos estaban en peligro, si iba a morir, debía al menos desviar a los cazadores de mis padres.
Me levanté cojeando y volví a mi forma animal, miré la ventana y salté por allí, tuve que abstenerme a gritar por el dolor, pero lo logré, me preparé para correr cuando un inmenso lobo se paró en mi delante, lo reconocí, era ese Alfa.
Retrocedí asustado chocando con otro Alfa de color gris, aunque este se notaba más comprensivo y no daba tanto miedo como ese Alfa negro.
Corrí hacia el bosque sin mirar atrás, sin importarme si me seguían o no, sentí el aroma de mis padres cerca, ellos me estaban buscando. Aceleré el paso cuando sentí su aroma más fuerte, pero frené al darme cuenta que su aroma era mezclado con sangre. Escuché hablar a muchos hombres mientras se reían.
- persiguiendo a uno cuando tenemos cinco! - gritó uno riéndose, en el suelo pude ver un pelaje blanco pero manchado de ese color carmesí, otro pelaje marrón más allá me hizo dar cuenta que eran mis padres
- qué hacemos con los lobeznos? - dijo otro cargando a dos cachorros de la nuca
- no vamos a cargar crías, mátalos - dijo quien sería el jefe, pero reaccioné, fui directamente al cuello de ese hombre
Escuché un aullido y luego otro, seguido de eso, reconocí a aquellos dos Alfas quienes atraparon a otros cinco hombres pero no los mataron, yo fui donde mis padres, sin importarme estar desnudo, cambié. Noté las voces de aquellos hombres muy sorprendidas, abracé a mi madre no queriendo separarme nunca de ella, igual iba a morir.
- nos haremos cargo de ellos - dijo alguien luego del sonido de un auto, estábamos cerca de una carretera, así que he debido de correr mucho
- hazlos sufrir - dijo ese Alfa negro luego de cambiar a su forma humana y se acercó
- los llevaremos al consulado - me dijo pero negué
- voy a morir, quiero irme con ellos - susurré
- no morirás, porque no lo voy a permitir - me dijo sentándose a mi lado
- quiero irme con ellos, ya no tengo a nadie - le dije mirando a toda mi manada muerta
- tienes a los cachorros, a mí - me dijo pero negué, mi cabeza dolía, mi herida peor, la tristeza, el dolor y mi ahora soledad se puso en mi contra y me desvanecí
- déjame cuidar de ti, Seungkwan - escuché decir a ese Alfa antes que mi consciencia se vaya
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Aquí está el segundo capítulo, a partir de aquí, sólo dejaré la historia seguir, no duden en avisarme si hay algún error.
No se olviden darle a la estrellita, comentar y compartir que me hace muy feliz.
🐯💜🍒
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VERKWAN
Science FictionHuyendo de los cazadores terminó atrapado en un clan enemigo. Tenía dos opciones, rogar por piedad a esa manada enemiga, o morir a mano de los cazadores para luego ser exhibido en cualquier museo clandestino.