Capítulo 11

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Pasó exactamente un mes desde que papá y el padre de esa mujer se aliaron la empresa, debo admitir que lo que decía era cierto con respecto a  que su padre es un buen negociador pues hablaba con tal labia y elocuencia que lograba convencer a cualq...

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Pasó exactamente un mes desde que papá y el padre de esa mujer se aliaron la empresa, debo admitir que lo que decía era cierto con respecto a que su padre es un buen negociador pues hablaba con tal labia y elocuencia que lograba convencer a cualquiera además de tener buenas ideas y propuestas, todo comenzaba a ir muy bien para a empresa, nuevos logos, la mercadotecnia ayudó mucho en la imagen de la empresa, todos parecían muy contentos por el progreso menos yo y la razón era su hija.

Y durante este tiempo estuve yendo a la empresa de papá para seguir aprendiendo más sobre cómo se manejaba así como resolviendo algunas órdenes de papá dentro de esta. Además de tener que soportar ver más seguido a la novia de Leandro y por lo tanto hizo aprenderme su nombre que por cierto se llama Camila y como pensarán también tener que verlos juntos como siempre paseándose por la empresa como apareja favorita de todos y de la prensa faltaba poco para que la pusieran de modelo para la promoción de chocolates.

A veces me da pena por ella ya que al parecer ser tan hermosa y perfecta como dicen no es suficiente para Leandro, él la engaña. Cuando no está con ella está con otras mujeres, claro sin que su padre se dé cuenta, es muy hábil para ni que ni siquiera Camila sospeche. En este tiempo me di cuenta de que no es una mala mujer y de que quiere mucho a Leandro pero él en verdad no la quiere tanto como dice. A veces pienso que solo es una fachada para ocultar que es mujeriego y evitar la mala fama y reputación de su padre y por lo tanto de la empresa.

Yo me limito a no decir nada, pues no servirá y haré que él me odie, mis opiniones para él no cuentan. Aunque solo hace que me decepcione más de lo que ya estoy. ¿Cómo es posible que le haga eso a Camila? Sobre todo sabiendo que su suegro ayuda a la empresa de su padre a incrementar las ventas, es un total desagradecido, realmente no lo entiendo pero supongo que piensa más con su cosa que con la cabeza.

Dejo de pensar en todas esas cosa ya que hoy es un día de mis prácticas en la orquesta y por lo tanto también es el día en que Leandro me recoja. No sé cómo papá confía tanto en él para que me lleve y recoja todo el tiempo, no me quejo, pues a la vez deseo estar con él lo más que se pueda pero solo cuando está solo y no con ella porque no soporto los melosos que se ponen a veces y su voz chillona que irrita a cualquiera.

Suspiro cansado, esta pieza solo hace que piense en él.

-¿Estás cansado?- pregunta Santiago poniendo su mano en mi hombro.

-Algo así, pero estoy bien-Sonrío guardando mis cosas y caminando hacia la salida en la cual Santiago me acompaña.

-¿Él vendrá a recogerte?

Asiento. Sé que a él no le agrada así como a Leandro tampoco y no sé porque, digo Santiago tiene sus razones pues Leandro no ha sido nada agradable con él pero Leandro no tiene motivos o eso pienso yo. Cada vez que se ven parecen querer matarse con la mirada, si hubiese un rin no dudarían en subir, muy incómodo y es por eso que hago lo posible por que no se vean, el verdadero problema de aquí es Leandro.

L & L CEO (TERMINADA)BLDonde viven las historias. Descúbrelo ahora