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A Taehyung no le gustaban las mujeres. Su padre estaba molesto y a pesar de ser el hijo mayor; más fuerte y más capaz que su hermano Woojin, su padre había decidido que no lo haría capo, mucho menos tomaría su lugar como Don.

Creyó que amenazando con hacerle perder todo por lo que había luchado, Taehyung recapacitaría tarde o temprano. Pero Taehyung insistió en que no había forma de que pudiera follarse a una mujer. Incluso aunque el Don lo golpeó, pensando que su hijo todavía era joven y podría enderezar el camino.

Kibum amaba a sus dos hijos, pero Taehyung era el ideal para sucederlo. Aunque Woojin era fuerte y completamente heterosexual, no tenía el temple de Taehyung para hacer el trabajo sucio. Un Don no sólo tenía que vigilar que los negocios funcionarán, también tenía que mantener a las otras organizaciones, como los gánsteres, a raya. No sólo podía mandar a los soldados a hacer el trabajo difícil, tenía que demostrar su fuerza y su poder. Woojin no era ni la mitad de fuerte que su hermano mayor pero había un problema aún mayor, abusaba de su poder en cualquier parte, no cumplía con las reglas de los hombre de honor y se le olvidaba que la violencia sólo debía ser utilizada para infundir respeto, no miedo.

Cuando Jung reveló que su hijo Yunho sería su sucesor y que su otro hijo, Hoseok, no se volvería soldado por ser de género mixto. Kibum y Taehyung vieron una oportunidad. No había muchos hombres de género mixto en la familia y los que estaban, o eran muy jóvenes o ya estaban casados; con el hijo de los Jung, la diferencia de edad apenas rebasaba los tres años. Y a pesar de que Hoseok apenas tenía catorce años, lo comprometieron. Jung fue el más feliz con el compromiso e inmediatamente le informó a su esposa.

Fue como si se ganarán la lotería. Así que cuatro años después, cuando Hoseok estaba apunto de cumplir la mayoría de edad, se enteró de que había estado comprometido con el futuro Capo y que se casarían pronto.

La idea fue espantosa y aún así, estaban funcionando bien. Taehyung había ganado con Hoseok la oportunidad de casarse con un hombre, uno que le resultó muy hermoso y del que se enamoró con facilidad, y tener un heredero para después convertirse en Capo y posteriormente en Don.

Hoseok no lo sabía, pero Taehyung le había estado pidiendo fotos a Jung para conocerlo, y coleccionó varias fotos en su teléfono celular. Las primeras fotos no fueron prometedoras; El chico, era muy joven, tenía un estilo aún infantil, frenos, el cabello casi rapado, un poco de acné y la piel pálida. Pero conforme creció se fue volviendo cada vez más y más hermoso. Incluso tiñó su cabello azabache pasando a un castaño claro.

Tal vez fue por eso que cuando se reunió con Hoseok la primera vez, parecía que lo conocía de toda la vida. El chico prometido era incluso más apuesto en persona. No había foto que pudiera hacerle honor a su bonita sonrisa.

Aún así, el matrimonio con Hoseok fue incómodo las primeras semanas, eran dos completos desconocidos que estaban tratando de parecer enamorados. El sexo funcionó bien para ambos desde el principio, Hoseok relajó su cuerpo y Taehyung siempre fue amable.

Hoseok era muy receptivo y Taehyung había conseguido experiencia en algunos de sus clubes, así que sabía que no había forma de que pudiera arruinar la primera noche. Por supuesto también se debía a que Hoseok no era rebelde y sabía comportarse.

Cualquiera en su lugar podría haber huido; no, eso era imposible, nadie huye de la mafia, sólo la muerte puede liberarlo; pero bien pudo actuar berrinchudo, poco accesible, fastidioso y hacer de sus vidas un infierno.

Taehyung pocas veces mostraba sus sentimientos, las personas que lo conocen lo describen como fuerte, intimidante, cruel y sin sentimientos. No es que no los tuviera, era sólo que era bueno ocultando sus emociones, sobre todo aquellas que pudieran hacerlo ver débil. Pero Hoseok había sido el primero en destruir esa barrera de "hombre cruel". Hoseok merecía ser tratado con cariño y amor, nada diferente a eso.

Pero ahora no podía ocultar el temor, sus manos estaban temblando ligeramente como si tuviera una clase de Tic. No podía perder a Hoseok, sin esperar a la ambulancia, cargo el cuerpo de su esposo en sus brazos y lo subió a su vehículo. Metiendo el acelerador sin importar que estuviera rebasando el límite de velocidad.

Se puso aún más ansioso cuando Hoseok finalmente perdió la conciencia después de desangrarse en el asiento del copiloto. Debía tener alguna clase de hemorragia interna y cada vez se ponía las pálido.

—Resiste corazón, todo va a estar bien —dijo a pesar de que sabía que el receptor no le iba a responder.

Cuando llegó los enfermeros ya estaba esperándolo, seguramente su padre les había llamado desde la casa, subió a Hoseok con cuidado a la camilla y no necesitaba la confirmación médica, para saber que sus signos vitales estaban cayendo.

Las horas esperando fueron un martirio, y sólo daba vueltas u vueltas en la sala de espera.

Los padres y hermanos de Hoseok fueron los primeros en llegar. Se veían angustiados y Yuna estaba llorando para fastidio de Taehyung que necesitaba estar en silencio o empezaría a romper cosas.

Cuando su padre llegó, puso su mano en el hombro de Taehyung y dijo: —Respira profundo. Él estará bien.

—Voy a matar al jodido imbécil que le hizo esto —declaró apretando los puños.

—Déjalo en mis manos hijo  —Kibum declaró mirándolo a los ojos. La rabia contenida de Taehyung era evidente en sus ojos que parecía: lanzaban llamas.

—Familiares de Jung Hoseok —Taehyung se recompuso para ver al medio que acaba de salir de la sala quirúrgica.

—Soy su esposo.

—Entiendo, el paciente ha perdido mucha sangre, por lo que necesitaremos hacerle algunas transfusiones, pero ese no es el mayor problema —mencionó— al parecer hay antecedente de negligencia médica y no quitaron por completo la placenta ni detectaron que estaba adherida al útero por lo que impide que la sangre circule de forma correcta y se formarán coágulos, además de crearle problemas pulmonares y respiratorios. Como médicos nuestro deber es procurar la vida del paciente por lo tanto debemos extirpar el útero. Pero necesitamos la firma de su esposo o algún familiar.

—No —Siyeon dijo de inmediato—, eso será el fin para Hoseok. No podemos permitirlo.

—Si no firma, él hombre morirá en menos de dos semanas, por un infarto, por falta de oxígeno, por una hemorragia, tarde o temprano terminará muriendo —aclaró el médico.

—Hoseok ni siquiera ha tenido un hijo, no pueden quitarle el útero —Siyeon estaba apunto de empezar a llorar.

—Por dios mujer, es la vida de nuestro hijo, páseme los papeles —Jung tomó la palabra y sacó un bolígrafo del bolsillo de su pantalón, pero Taehyung lo detuvo.

Parecía que estaba en un estado de Shock, miró al padre de Hoseok y le quitó el bolígrafo.

—Yo firmaré.

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