50 sombras, algo diferentes

Capítulo 2

Porfin, suena la campana, han sido las dos horas más largas de mi vida. Christian no paraba de mirarmetodo lo que hacía, ha sido muy raro. No hemos vuelto hablar desde que le dije que me llamaban todas esas cosas horribles. Aunque que le dije que ya estaba acostumbrada, aun me duele que me digan eso. Me ofende mucho. Pero ahora ya no llego a casa llorando. Poco a poco lo estoy superando. Recojo todo lo que hay en mi mesa, y lo pongo en la mochila.

- ¿Seguro que no quieres almorzar conmigo?

Me giro y veo con quien esta hablando, pero no veo a nadie.

- ¿Me lo preguntas a mi? - Le contesto

- Si, Anastasia.

- Ana, llamame Ana.

- ¿Vienes? - Y me tienden una mano.

Quiero ir con el, pero seguramente me lleva para que sus amigos se burlen de mi.

- No gracias, paso.

Y me voy directamente a la biblioteca.
Me encanta la biblioteca, es un lugar tranquilo, y seguro de esos "matones " que se meten conmigo. Saco mi libro de Orgullo y prejuicio, y comienzo a leer me encanta este libro, me hizo gracia cuando el Sr. Darcy le dijo al Sr. Bingley que Elizabeth era aceptable, pero no lo bastante guapa para él. Y luego va y se enamora de ella. Estaba enfrascada en la lectura cuando alguien me toca el hombro y me sobresalto.

- Hola, Ana.

¿Pero que coño hace aquí?

- ¿Que.. Que haces aquí, Christian?

Se sienta a mi lado comienza a sacar comida de su mochila.

- Eh venido almorzar contigo, ya que no querías venir a comer conmigo al comedor. ¡Eh venido aquí¡. Si maoma no va a la montaña, la montaña va a maoma.

Me lo quedo mirándo, y me comienzo a reír.

- ¿No vas a comer nada?

- Ehh... No eh traído nada... Eh salido muy tarde de casa y se me ha olvidado traer mi almuerzo, iba a ir al comedor cuando quedasen cinco minutos, para comprar una manzana o algo por el estilo.

Parece que se ha enfadado, por que esta frunciendo el ceño.

Mira su sándwich y lo parte por la mitad

- Toma - y me ofrece la mitad de su sándwich. - Cometelo todo

Lo agarro y le doy un mordisco, esta muy bueno.

- ¿Ehh... No haces esto porque te doy pena verdad?

- No, sólo quería pasar más tiempo contigo... - Parece nervioso.

- Créeme, ahora me vas a tener que soportarme, recuerda que me siento a tu lado.
- Ya lo se, pero seguro que te cambias para no estar con un tío como yo, o para estar en primera fila.

Bueno en eso tiene razón, estaba pensando en pedirle al profe que me cambie unos asientos más adelante, porque donde estoy no es que se va muy bien la pissarra.

- Es verdad, le iba al decir a Scott, que me canvie unos asientos más adelante, pero no por ti, si no porque no se ve ni mierda donde estoy yo.

- Lo ves, yo solo... Quiero ser tu amigo...

¿Amigo? El solo se quiere burlar de mi...

- Lo dudo, tu solo te quieres meter conmigo... O llamarás a tus amigo para que lo hagan por ti...

- ¿Que? no

- Bueno, ya me lo habéis echo antes...

- Ana de verdad, yo solo quiero ser tu amigo. Siento mucho lo que te haya echo antes. Te prometo que no me quiero burlar de ti ni mucho menos.

No se si creérmelo, lo dice tan... Tan sinceramente.

- Esta bien podemos ser amigos.

Parece que haya ganado la lotería, por que se ha muy contento, ahora le brillan los ojos, y tiene una enorme sonrisa.

- ¿Y por donde vas?

- ¿Que? - Y me aseñala el libro. - ¿Ah... És que te lo has leído?

Baja la mirada, comienza a juguetear con sus dedos

- Eh... Si... Me gustó mucho... Es un libro muy apasionado... - Y se le esboza una sonrisa.

- Estoy cuando el Sr. Darcy le entrega la carta, explicándole a Elizabeth, el porque izo esas cosas, para alejar al...

- Sr. Bingley y a Jane.

- Si...

- ¿Te gusta la literatura?

- No me apasiona mucho, yo soy más de números... Pero me gusta leer clásicos.

- Yo... Pensaba... Que...

- ¿Que me daba igual los estudios no?

- Eh... Si...

- Ya, solo es una fachada que echo, ninguno de mis amigos sabe que soy un cerebrito.

- ¿Si tus amigos no lo saben, entonces porque me lo cuentas? ya que ahora somos amigos...

- Porque siento, que contigo puedo confiar.

Nos miramos por un buen rato luego el despacio se va acercando a mi, y me besa. No es la primera vez que me han besado, pero esta vez es especial. Besa muy bien. Siento cosas en la barriga... ¿Como mariposas? Si, creo que si. Me dejo llevar por un momento, pero reacciono rápido y me separo de él.

- Yo... Lo siento... No quería... Bueno si que quería... Besarte.

- Yo no... Se que decir...

- ¿No te ha gustado?

- Si, no... Si... - Y agacho la cabeza.

Por suerte suena el timbre y me voy pitando al clase.

Cuando entro solo hay un par de compañeros que se están sentado. Al llegar a mi mesa me encuentro una carta. Que dice: Querida Anastasia Steele, espero que tu primer día en el instituto, te haya ido bien. Hoy estas muy guapa.
Att: Tu admirador J.

Cuando la acabo de leer llega Christian y me la quita de las manos. ¿Pero quien se cree que es para quitármela de ese modo?

- ¿Ana quien te ha enviado esto?

Uy parece furioso, incluso podría decir celoso.

- Yo no lo se... No se quien es, siempre me envía cartas.

No entiendo porque le tengo que dar explicaciones, no es de su incumbencia.
Se la quito de las manos y me la guardo.

- Lo que paso en la biblioteca, no tiene que volver a pasar - Le digo en tono firme.

Entonces me coge la mano, y la besa.

- No creo que pueda contenerme, me dijiste que si te gustó.

Me quedo callada, no se que decir, este hombre me quita las palabras.
Entonces me entrega un libro yo lo miro y me dice :

- Te lo dejaste en la biblioteca... - Me entrega mi novela de Orgullo y prejuicio.

Y me da un beso en la mejilla.