50 sombras, algo diferentes

Capítulo 21

Anastasia

Mañana empiezan las vacaciones de Navidad. ¡Porfin vacaciones! Se me ha echo bastante corto este primer trimestre. También siento que no me esforzado bastante. Christian me ha distraído muchísimo. Porque cuando quedábamos para estudiar siempre acabábamos follando. Y no es que no me gustará pero mis notas han bajado muchísimo. Como por ejemplo: en Literatura Inglesa mi nota media normalmente era de un 9'7 y ahora tengo un 9'1. ¡6 décimas! He bajado 6 décimas. No se como se lo diré a mis padres cuando les tenga que entregar el boletín. En Geografía e Historia me ha quedado un 8,8 cuando yo soy muy buena en estas materias. La única que he subido de nota es matemáticas, y en esa si que me esforzado mucho, y además es la única que Christian se ha tomado seriedad en enseñarme bien. Me ha quedado un 9,2.

Tengo que ponerme las pilas si quiero ir a una buena universidad. Este año es el último y ya estoy comenzando a enviar solicitudes a varias universidades.
Aún no he hablado con Christian a que universidad irá. Tengo miedo que él vaya a una buena universidad y a mi no me acepten. Él es muy listo y saca muy buenas notas y estoy segura que podrá entrar en Yale, Harvard o Princeton... Pero yo no se si estoy a la altura.

Suena el claxon del coche de Christian, eso significa que ya está aquí para recogerme e irnos al instituto. Me despido de mis papas y de m pequeño Grey, que ahora ya no está tan pequeño. Ese perro cada día está más gordo. Pero es mi gordo. Salgo de casa y me encuentro a mi precioso novio recostado en su flamante Audi. Va vestido con unos jeans ajustados y un jersey azul marino. Y los zapatos que yo le regalé. Unas Vans azules. No se como este Dios Griego esta conmigo. Yo voy vestida, también con unos jeans y un jersey blanco, con unos botines de color marrón oscuro.

- Cada días estas más guapa, Ana - Dice Christian cuando me acerco a él. Le doy un casto beso y me abre la puerta de atrás del coche.

- Buenos días Christian, creo que te equivocaste de puerta. - Y frunzo el ceño, ¿porque no puedo ir adelnate?

- No, no me equivoque, es que verás a Elliot lo castigaron por llegar tarde a casa, mi mama le dijo que tenía que estar en casa a la una de la madrugada y el muy capullo vino a las 6. Grace estuvo a punto de llamar a la policía. Y lo han castigado sin salir, ni coger el coche, le han quitado el carné de conducir y las llaves. Y ahora prácticamente soy su chófer.

Me comienzo a reír, esto verdaderamente es graciosisimo.

- No se si reír o llorar por semejante historia que me acabas de contar. Pero vamonos ya que no quiero llegar tarde.

- Entonces metase dentro del coche Srta Steele.

Me adentro en el coche y me siento, saludo a Elliot que esta absorto en su móvil enviando mensajitos, que supongo que se los envía a Kate. Desde que se conocieron no se separan son uña y carne.
Christian arranca el coche y justo cuando nos queda una calle para llegar a la escuela Elliot dice:

- Christian, da la vuelta hay que ir a buscar a Kate.

- !¿Qué?! No Elliot, casi hemos llegado, no pienso ir a la otra punta de la ciudad.

- Christian, no te los estoy preguntando, da la maldita vuelta y dirígete a casa de Kate.

- No, Elliot.

- ¡Christian Trevelyan Grey! Da la maldita vuelta. - Dice Elliot gritando, puedo decir que por un momento sentí mucho miedo.

Christian maldice, y da la vuelta. Perfecto último día y llegaré tarde, como el primero.

- Gracias, Christian. A Kate también le han castigado, por llegar tarde y también le han quitado el carné de conducir y el coche.

- ¡Vaya dos estáis echos! - Le digo a Elliot.

- Ana, no se como antes no me presentaste a Kate.

- Muy simple, estaba estudiando en Italia.

- A sí ya me contó, que su estúpido ex-novio, - Y remarcar mucho la palabra exnovio - Creo que se llamaba Antonio, la engaño el muy hijo de puta. Haber yo no engañaria jamás a Kate. Ella és única.

- Hermano, creo que dijiste lo mismo con Samantha, y al día siguiente estabas con Jessica. -Y Christian se rien por su propio comentario.

- ¡Cállate Christian! Nadie te pregunto. Y ahora conduce rápido. Ya quiero ver a Kate.

- Nada de sexo en mi coche, Elliot.

- Tranquilo hermano, no lo tendré, además tu y Ana ya habrán follado en este coche, y... Como veras me daría un poco repelús, follar a qui con Kate. Si te digo la verdad, incluso me da un poco de asquillo estar en este coche. Seguro habéis follado en todas la partes posibles del coche.

Siento mis mejillas arder, ante el comentario de Elliot. Aunque es verdad. Christian y yo hemos follado en este coche muchas veces y de todas la posturas que el poco espacio nos ha podido permitir.

- ¡Dios mio, Elliot que tiquismiquis que eres! - Dice Christian y levanta la mano para hacer más dramático su respuesta.

En ese momento Christian gira a ver a su hermano y se comienzan a reír.
Pero justo un 4x4 choca contra la parte lateral del coche.
Todo se vuelve negro. Ya no hay más risas, ni comentarios estúpidos aunque graciosos... Solo hay oscuridad.

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Oigo voces pero no logro distinguir de quien son. Intento abrir los ojos, pero no puedo. Intento mover las manos pero algo me lo impide. De fondo se escuchan las máquinas médicas. El típico "pi pi pi ". Me duele el brazo derecho y la pierna derecha. Por más que intento abrir los ojos no puedo.

En mi mente he creado un sitio bonito. Ahora mismo estoy sola, pero el lugar es hermoso. Hay una gran casacda seguidamente de un río. Estoy rodeada de árboles muy altos. Y de pájaros que piulant. Todo es muy bonito pero me siento sola. Aquí no pasa el tiempo...
Me siento en una roca y oigo voces que supongo que provienen de la habitación del hospital. Porque lo único que soy consciente es que hemos tenido un accidente de coche.