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Al día siguiente, Lisa entró a la escuela un poco más relajada, llevaba unos shorts negros y una camisa negra manga larga.

Era lo más cómodo que había encontrado en su armario. Su cabello estaba suelto y entrelazaba su brazo con el de eunha. Su amiga le daba fuerza, hablaban con Jisoo y Jihyo sobre salir al cine la próxima semana, eso hasta que el grupito de chicas se colocaron justo frente a ella.

-Hola, a mis raras favoritas-dijo Sowon abriendo los brazos mientras intentaba buscar los ojos de eunha, ella sólo miraba al suelo.

-Qué quieren?-preguntó Jisoo, fastidiada.

Lisa miró a Rosé brevemente, vestía una falda de mezclilla y una blusa que dejaba ver su abdomen, junto con unas zapatillas en conjunto. Tan linda
que dolía.

Sus ojos se encontraron y Lisa apartó la mirada, sentía aún el agua sucia
en su garganta.

-Yo, yo quería hablar con Manoban-dijo la rubia, capturando la atención de todas.

-Yo no quiero hablar-rebatió Lisa y vio un brillo de tristeza en los ojos marrones, eso la debilitó.

-Pues tienes que, vamos-le dijo tomándola de la muñeca y jalándola fuera del grupo.

Lisa les hizo señas a sus amigas para que no las siguieran, Rosé la llevó hasta una esquina junto a los casilleros y comenzó a hablar torpemente, mirándose los pies.

-Ayer..ayer me ignoraste-dijo más como una afirmación, dándole pequeños
vistazos.

-Sí, y?-intentó hacerse la indiferente, pero no le salió muy bien.

-Nada, olvídalo-soltó un poco molesta, aunque después comenzó a jugar con
Sus manos-. Nosotras.. bueno, tenemos que terminar el ensayo...y podríamos hacerlo esta tarde, en mi casa.

Lisa abrió los ojos ¿La estaba invitando a su casa? ¿Era un sueño? ¿Debía de tener fiebre? Oh, por Dios, su casa, era su casa y ellas podrían... Para ya, Lisa!

-T-tu ca-casa?-preguntó como una tonta y Rosé la miró como si en verdad lo fuera.

-Si. Mi casa, Lisa-dijo y Lisa se sonrojó.

-Me... me llamaste... įme llamaste por mi nombre? -preguntó, abriendo los
ojos.

Rosé rodó los ojos, aunque sus mejillas estaban ligeramente ruborizadas.

-Vas venir o no?-preguntó impaciente, Lisa pareció dudar.

-Yo, bueno.. -comenzó a indagar ya que no debía estar cerca de Rosé, Jaehyun la mataría, pero en parte, tambien podría conocer la casa de la rubia.

-Te recuerdo que vale mucha nota-dijo cruzándose de brazos-. No vemos en
la salida, te vienes conmigo-Dijo, dándose la vuelta y volviendo con sus amigas.

Lisa no pudo decir nada, tendría que ir y ya.

Durante el resto del día estuvo muy nerviosa, no le dijo nada a sus amigas ya
que comenzarían a delirar y a decirle que no fuera.

Eunha le preguntó que sucedía y no tuvo más opción que decirle, pero su amiga no hizo nada más al respecto ya que era una nota muy importante, le advirtió que tuviera cuidado y dándole un fuerte abrazo. Sus bajas y altas con la chica de ojos miel la tenían mal y Lisa entendía, también le devolvió el abrazo aún con más fuerzas.

En la hora de la salida, intentaba buscar a Rosé sin encontrarse a Jaehyun, fue fácil ya que últimamente no se les veía muy juntos.

Sus amigas se habían ido con Jisoo y sintió a alguien tocándole el hombro,
dio un brinco y al voltear se encontró con Rosé, que la miraba con una ceja
alzada.

Rivales | Chaelisa Donde viven las historias. Descúbrelo ahora