Ukes en Apuros

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Definitivamente toda esa situación era extraña. Se sentían fuera de lugar al ver como el brócoli y la bomba con patas estaban en conflicto otra vez y al Pikachu y La Roca volvieron a ser Bros de la nada. Incluso para La Roca fue extraño.

Las dos chicas junto a los chicos fueron a buscar a los otros dos babosos que se les desaparecían de la nada, y ahora estaban en problemas porque no tenían ni la más mínima idea de dónde buscarlos. Tenían miedo porque dejarlos solos significaba peligro. Se imaginaban los peores escenarios que podrían ocurrir si estaban juntos. Sigh... Pobre Deku, la verdad.

Los cuatro buscaron por toda la UA, cada uno en un lugar diferente, pero sin éxito. Al estar cansados de haber caminado tanto decidieron ir a su salón a descansar. Se suponía que era hora de clase con el profesor Mic donde normalmente había mucho ruido, pero se asombraron al escuchar un profundo silencio en el salón.

Abrieron la puerta para ver qué milagro había ocurrido como para que todo estuviera igual o más silencioso que la biblioteca y fue grande su sorpresa al ver que no había nadie en el salón. Era muy extraño.

A pesar de tener todo el salón para ellos no hicieron ningún tipo de ruido al entrar, tampoco desordenaron, pues si lo hacían tendrían que limpiar antes de que Aizawa los viera y no tenían las energías para aguantar a su profesor ni para limpiar. Esa jornada había sido matadora.

Todos se dirigieron a sus respectivos asientos, y Kirishima, al sentarse al lado de Bakugo notó algo extraño en el asiento del otro, pues ahí estaba su teléfono. Era extraño porque Katsuki siempre llevaba su teléfono consigo.

Al ver eso buscó con la mirada a su alrededor y en la esquina del salón pudo ver una cabellera rubia que reconocería en cualquier lugar. Estaba acostado, viendo hacia la pared.

Le ganó la curiosidad y fue a verlo, y claro, llamó a los demás para que fueran a ver qué pasaba con él, y cuando estaban lo suficientemente cerca de él pudieron ver que no estaba solo. Había alguien más recostado con él y podían decir que estaban de cucharita. A la otra persona que estaba con él no la reconocían porque estaba cubierto con la chaqueta del rubio, y pues, Kaminari, con lo especial que es, se acercó más para quitarle la chaqueta de la cara, y todos se fueron de nalgas al ver al chico de mechones verdes junto a él. Y sus suposiciones eran ciertas.

Estaban recostados de cucarachita.

No había nada malo en eso pero pues, como que algo no cuadraba. Se sorprendieron porque un rato atrás juraban que podían matarse el uno al otro y ahora estaban ahí dándose amor inocentemente. En su mente sólo podían pensar "¿Pero qué ha pasao'?"

Su shock no les duró mucho ya que notaron que ambos chicos comenzaron a moverse así que todo su cansancio de hace rato se fue y dijeron patitas pa' qué las quiero y salieron corriendo del lugar.

¡¿Pero qué ha pasao'?! Dijo el AuronPlay y ellos también.

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Ya no doy gracia, que se note ah

Los quiero 😔💖