NICHOLAS
Luego de dejar a Amelie en su casa luego de la noche en el hotel, fui directo a mi casa. En el trayecto no dejaba de pensar en ella. La forma en la que no le incomodaba ver que tenia sus bragas, la forma en la que se acomodo dormida sobre mi pecho en el hotel... pero lo que mas me intrigaba eran sus cicatrices.
¿Que le habrá pasado? ¿Fue madre? recuerdo que cuando le hice esa pregunta ni se mosqueo, tenia un semblante indiferente, cuando fui a su casa no había rastros infantiles pero la cicatriz sobre su monte de Venus parecía de cesárea.
Olvide todas mis dudas ya que no me incumbían y llegue a mi casa. Sin despertar a Ana, me fui a mi cuarto y tome una ducha para luego ponerme un polo blanco junto a unos pantalones azul oscuro y unos mocasines marrones. Cuando el reloj dio las siete de la mañana baje a desayunar para esperar a mi hermana, a quién debía llevar a la preparatoria.
Eran las tres y media de la tarde cuando fui a buscar a Ana a la preparatoria, durante la mañana me había vuelto a interrogar sobre la misteriosa chica del bar y estaba de lo mas pesada. Mi día se había basado en ir a una reunión con mi director técnico sobre las cinco carreras que quedaban antes de terminar el año, volver a casa para practicar en el simulador y hacer deporte. Cuando llegue a la preparatoria de mi hermana, fuimos a la casa de Grant.
-Hola tío-dijo Anastasia cuando Grant abrió la puerta para que entremos
-Hola loca, pasa-le dijo- ¿qué onda amigo? tienes cara de bien follado
-Ni que decir, ahora te cuento-pase por su lado y fui directo al patio. Ana había ido a la cocina a hornear unos cupcakes, estaba empecinada con probar una nueva receta.
El clima comenzaba a ser mas frio, nos encontrábamos mediados de octubre y el invierno se acercaba; aunque si te ponías bajo el sol, era reconfortante. Grant apareció detrás de mi con dos cervezas y nos sentamos en las sillas que disponía
-Bueno, desembucha-dijo con tono burlón
-No hay mucho, el otro día conocí a una mujer en un bar, y ahora estamos quedando en una especie de touch and go, ninguno de los dos quiere algo serio-dije restándole importancia y bebiendo de mi cerveza.
Grant se quedo a medio camino con su botella y se quedo mirándome.
-¿Que?-le pregunte mientras elevaba una ceja
-Tu nunca te acuestas dos veces con la misma mujer-dijo sorprendido- digamos que tienes un pequeño...
-pequeño...-lo incite a que termine la frase
-Que tienes un pequeño miedo a comprometerte con una mujer, les tienes rechazo a todas excepto a tu hermana-dijo elevando los hombros y mirando hace el jardín
-No es miedo al compromiso, es la simple decisión de no darle nunca mas el poder a una mujer para que me abandone-dije volándome en la silla
-Hagamos como que te creo-tomo un sorbo de cerveza- ¿y como llegaste a acostarte dos veces con la misma chica?
-No lo sé, la primera vez que nos acostamos casi me echa, estaba en mismo plan que yo. Luego me la encontré en una reunión de trabajo y sin pensarlo ya le estaba proponiendo follar sin preguntar.
-¿Dónde quedo lo de no mezclar negocios con placer?-dijo sorprendido
-No preguntes, ni yo lo se...
Luego de que mi hermana terminase de hornear su cupcakes y de haberlos comido, comenzamos a hablar de trivialidades.
Eran las cuatro y media cuando decidí preguntarle a mi hermana si le pasaba algo, desde que la había recogido de la preparatoria estaba muy callada
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SERENDIPIA [completa]
Teen FictionSerendipia 1.f. Hallazgo valioso que se produce de manera accidental o casual. Amelie sufrió durante su adolescencia y Nicholas durante su niñez, ninguno esta dispuesto a ceder en el amor pero si a jugar. Sus corazones tienen candados ¿Podrán super...