EPILOGO

4.2K 168 15
                                    

AMELIE

Cuatro años después...

Hoy estábamos de festejo, Nicholas y yo cumplíamos dos años de casados. Luego de que Aaron naciera, las cosas cambiaron mucho, pasamos de ser solo nosotros dos y divertirnos a tener un bebé que necesitaba atención la mayor parte del día; no nos costo adaptarnos a nuestra nueva vida, pero era agotadora.

Cuando Aaron tenia un año Nicholas me propuso matrimonio, habíamos elegido priorizar criar y hacer crecer nuestra familia antes de casarnos ya que ambos sabíamos que no nos separaríamos, solo eran formalidades. Nos casamos en una playa con nuestra familia e invitados mas cercanos, fue muy bonita, habíamos vestido a nuestro pequeño con un smoking diminuto y fue el centro de atención.

Nicholas y yo decidimos pasar nuestro aniversario solos, no queríamos armar una fiesta ni una reunion, solo queríamos ser nosotros cuatro.

-Pequeña...

Nick se adentro en la habitación de nuestra hija, donde yo estaba sentada dandole el pecho y Aaron, que quería acompañarme, se quedo dormido con la cabeza sobre mi regazo.

-Campeón...

Poso sus labios sobre los míos y luego les deposito un beso a cada uno de nuestros hijos

-Es una imagen muy bonita-se apoyo sobre la pared

Sonreí y baje la vista hacia mis niños, Aaron ya tenia cuatro años y era todo un galán. Había heredado el pelo negro azabache de Nicholas y mis ojos celestes, era muy risueño y hacia unos meses había comenzado a crear su karting junto a Nick, él había logrado su cometido y lo hizo fan. Ellie por otro lado, tenia un año y llevaba una matita de pelo castaño, y tenia ojos azules como los de mi padre.

-Me sigue poniendo triste no poder haber hecho esto con Aaron-dije un poco cabizbaja

Aaron solo pudo prenderse a mi pecho por un mes, luego dejo de nutrirse correctamente y tuvimos que recurrir a la formula

-No pienses en eso

-Lo se, pero estoy feliz-dije elevando mis comisuras

Nicholas sonrió gustoso y cogió en brazos a Aaron para llevarlo a su dormitorio para dormir. Termine de darle el pecho a nuestra hija y la deposite sobre su cuna para poder ir con mi hermoso marido y padre. Nick habia supado cada una de las expectaciones y pruebas de un padre, era bueno y dulce con ellos, dejaba todo a un lado cuando Aaron necesitaba algo. Todos los días lo llevaba a su kinder y por la tarde lo íbamos a buscar juntos.

Hacia dos años yo había renunciado a mi puesto como directora de comercio internacional en la editorial Diunton, y tome el puesto de presidenta de White-Massachusett Empires, convirtiéndonos a Nicholas y a mi en los jovenes mas poderosos en el mundo empresarial de nuestras empresas. Muchos pensaban que con treinta años y dos hijos, nosotros no podriamos llevar en riendas a las dos empresas más prestigiosa, pero lo hicimos.

-Ven aqui-dijo Nicholas tirando de mi cuando nos encontramos en nuestro dormitorio

Me deje llevar y juntos nos caimos en la cama, nos acomodamos y prendimos la television para pasar el rato

-¿Te dije alguna vez lo agradecida que estoy?-eleve mi cabeza para poder ver su cara

Nicholas sonrió sobradamente

SERENDIPIA [completa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora