Los planes de Cindy de vivir una vida perfecta e irse de Shadyside se van a la mierda cuando conoce a Elizabeth, en un intento fallido de esconder sus sentimientos por ella.
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"-La señorita lane se ha vuelto loca"
era lo único que escuchaba en el campamento desde el incidente, ¡y sólo habían pasado 10 minutos!, dios los rumores en este campamento se esparcían en segundos.
ahora mismo me encontraba en el comedor con Gary, Joan, Tommy y Cindy. todo el campamento estaba allí, ya que kurt estaba dando comienzo a la guerra de colores.
-ha dicho que de un modo u otro, yo moriría esta noche.- habló tommy, el tono de su voz parecía una mezcla de seriedad y al mismo tiempo de broma.
Joan se encontraba a mi derecha preparándose un cigarrillo, Gary, quien estaba frente a mí, comenzó a hacerle burla a tommy.
- ¡quee miedoo!- dijo agitando sus dedos en el rostro de tommy.
-los niños tienen razón, la verdad es que parece cosa de brujas.- le siguió Joan.
-no, eh, tiene que haber alguna explicación, la bruja no existe.- interrumpió Cindy.
-¿por ejemplo?- preguntó tommy.
-bueno, tal vez..- se giró a ver a Joan, quien colocaba sobre la fina hoja la marihuana.- tal vez estaba drogada.
-¡pero qué dices!- exclamé.
-shh.- interrumpió joan.- las drogas son pacíficas, no violentas.
- yo no me refería a la marihuana.- dijo Cindy mirándome.
-Pero, ¿por qué iba a hacer algo así la enfermera lane?, ¿por qué querría matarme?- esta vez el rostro de tommy sólo mostraba preocupación.
-No, ella no.- respondió Gary.- ¡pero la bruja sí!- dijeron Gary y Joan al unísono, acto seguido se rieron.
miré a tommy con una mueca de lastima, se veía realmente preocupado.
de pronto Cindy y él comenzaron a hablar entre ellos.
-hey, todo va a estar bien, en serio, ellos sólo están bromeando.- dijo Cindy.
-tú viste sus ojos, tenía algo en la mirada.. no era normal.
de pronto, los aplausos de Kurt para llamar la atención hicieron que me sobresaltara.
-¡Chicas!, ¡Chicos!, ¡escúchenme!...
-oh dios ya va a empezar con su estúpido discurso..- susurró Gary.
-¡Hoy hemos tenido un susto, pero no dejaremos que esos nos arruine la noche más importante del verano!, ¡Esta noche, se enfrentan Sunnyvale y Shadyside. Rojos contra azules. El bien contra el mal!- Que idiota.- ¡Esta noche va a compezar la guerra de los colores!- este gritó y los demás le siguieron.
-Dios mío, se dice comenzar..- Dijo Gary, dándose la vuelta hacía nosotros.
-Puede que sea tonto, pero sí que está bueno..- habló Joan.
-Da asco, y tú también.- respondió. miré a Joan con un gesto de disgusto.
-¡La primera prueba de la noche, será capturar la bandera!- todos aplaudieron.- y los de sunnyvale, ¡Jamás hemos perdido la guerra de los colores!, así que no rompamos hoy, nuestro gran legado.- todos alrededor gritaban sunnyvale, apoyando las palabras de Kurt.
sin embargo, noté que tommy actuaba de manera extraña.
sin darme cuenta, Joan ya no estaba en mi lado, ahora estaba al frente junto a Kurt.
-¡Hola! gracias kurt por ese gran discurso.- gary me miró mientras negaba con la cabeza.- Y ahora, amigos de shadyside, ¡salgamos ahí fuera, a darlo todo!
antes de que pudiera terminar de escuchar el discurso de Joan, noté como cindy se levantó de su asiento y se fue. yo me giré confundida pero fui detrás de ella.
-¡Hey, Cindy!- llamé, ella se giró a verme.- ¿a dónde vas?- pregunté.
-intento buscar respuestas.
-si quieres puedo ayudarte.
-de acuerdo.
ella y yo caminamos hasta la cabaña de arte, donde parece ser que se encontraba su hermana, ziggy.
Me quedé en la puerta ya que Cindy y ella comenzaron a discutir, segundos más tarde las hermanas salieron de la cabaña, aún discutiendo. sin embargo, no me quedé atrás y comencé a seguirlas.
la conversación se llevó hasta la entrada de la cabaña de ziggy, donde la pelirroja dijo un par de cosas que dejaron a Cindy con lágrimas en los ojos.
ella se giró hacia mí y noté como comenzó a acercarse a mí, rápidamente la rodeé con mis brazos y la abracé. escuché sus sollozos en mi cuello y sentí como mi camisa se estaba empapando.
no era muy buena en consolar a las personas, pero aún así intentaba que Cindy se sintiera mejor.
Ella se separó de mi abrazo y me tomó por el brazo, guiándome a nuestra cabaña, no dije ni una sola palabra y sólo dejé que ella me guiara.
nos adentramos en la cabaña y ella cerró la puerta detrás de ella, de pronto sus ojos se encontraron con los míos, mirándome fijamente.
-¿Puedo besarte?- me tomó desprevenida y me congelé de nuevo, como cuando me confesó lo que sentía cuando estaba conmigo. sin embargo, yo sólo asentí.
la chica se acercó a mí, su mano derecha se acercó a mi rostro, reposándola en mi mejilla.- Que linda eres.- susurró, usualmente era ella la que se ponía nerviosa y no paraba de sonrojarse, pero esta vez Cindy logró cambiar los lugares y estoy segura de que yo era un desastre andante.
