Tumba de Camelias {Soukoku}

•|17|•

-¿iras a recoger a Kyouka-chan?

-hoy si, salimos a la misma hora así que aprovechare para venirme con ella, ¿tú irás por tus hermanitos?

-no quisiera pero después Mori-san se enojara conmigo.

-¿por qué no llamas a tu padre por su nombre? Eres extraño.

-¿ha? El es el extraño, además me deja siempre a cargo de Elise y Q, y eso que yo solo soy el medio hermano.

-aun así siguen siendo tus hermanos- Chuuya recordó que el pequeño medio hermano de Dazai le había dado su muñeco, le pareció extraño que se lo deje y después no lo reclame- por cierto, devuelvele esto a tu hermanito.

Extendió el muñeco hacia Dazai pero este se alejo ágilmente del muñeco, con una cara de asco.

-aleja esa cosa de mi, es espeluznante- Chuuya quiso reírse al ver que enserio aquel muñeco le daba miedo a Dazai, así que se le cruzó una idea por la cabeza, empezó a perseguir a Dazai con ese muñeco- ¡maldito Chibi, no es gracioso!

-jajaja ¡si es gracioso, la momia le tiene miedo a un muñeco de trapo! Jajaja.

Y así Chuuya siguió correteando a Dazai por todo el patio, en un mal movimiento Chuuya tuvo que detenerse, por suerte pudo frenar antes de caerse.

-¿lo ves? El karma te ha castigado.

-callate y ayudame a pararme- Dazai le extendió la mano a Chuuya y de un simple jalón logró que se parará- tengo una pregunta.

-¿Qué es ahora?

-¿por qué Q no habla?

-ah eso- Chuuya espero pacientemente a que Dazai continúe, temía haber tocado un tema delicado- Q iba a clases de pintura, su mamá lo llevaba, un día tuvieron un accidente automovilístico, desde entonces Q no habla.

-¿la muerte de su madre le afectó?

-pues si, se volvió más apegado a mi, y ese muñeco feo era un regalo que su madre le había hecho- sin quererlo realmente miro atentamente el muñeco y se estremeció- siento que lo compró de una tienda de brujería.

-no digas eso momia mal vendada, pero supongo que es normal que se haya apegado a ti, digo es lo que los hermanos menores hacen.

-supongo, aunque a Mori-san le preocupa que a pesar de todas las terapias aun no pueda hablar.

-¿y que hay de Elise-chan?

-mmm también es apegada a mi pero no tanto como Q, eso también es normal ya que Elise me conoció ya de grande, sin embargo Q me conoció desde bebé.

-¿he?- Chuuya estaba confundido con la cronología de la vida de Dazai, hasta ahora sólo sabía lo que le había contado sobre su difunta madre y se venía enterando de otros datos.

-bien bien, me explicaré mejor- Dazai se aclaro la garganta, explicarle cada detalle en su vida a Chuuya era difícil, pero la pregunta aquí era ¿por qué se lo estaba contando? Nunca nadie había escuchado su historia además de sus amigos Odasaku y Ango, pero es porque eran amigos de la infancia, da igual- mi madre y Mori-san nunca se casaron, se diría que soy un hijo bastardo.

Chuuya tuvo que contener una carcajada ante lo último, no era que se riera de la situación de Dazai solo le pareció curioso que usé la palabra bastardo en el mismo.

-Mori-san solo Mandana la manutención, cuando mi madre murió a causa de su enfermedad terminal tuve que vivir con Mori-san, el ya tenía una familia, eran su esposa, y sus dos hijos.

-entiendo, y después de eso ocurrió lo de tu madrastra ¿no?

-así es, como veras mi vida bien podría ser una telenovela, aunque en este caso Elise sería la consentida de Mori-san.

-¿esos son acaso celos?

-¡no estoy celoso!

Chuuya siguió riendo a pesar de los reclamos de Dazai, ¿tanta convivencia los había hecho cercanos? Pues si. Ahora era más normal estar al lado del otro.