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El festival de verano era el tema de conversación de todos los estudiantes, no había momento en donde no planearan como irían vestidos, que harían.

Nadie le prestaba real atención a clases.

-ey Chibi— y como siempre Dazai estaba pegado a Chuuya como mosca a la miel— ¿qué hiciste después de la presentación?

-que te importa— no quería contarle a Dazai sobre su otra visita al doctor, aquella vez había sido más extensa la visita al hospital siendo que la neuróloga ya no trato de ocultar su enfermedad.

-flashback-

-Chuuya-kun ¿has sentido cambios drásticos en tu cuerpo últimamente?

-si— Chuuya hablaba de manera monótona, a pesar de que la doctora Yosano mantenía ese tono de voz que usualmente lo calmaba, esta vez no resultaría.

-dime que cambios notaste Chuuya.

-no puedo...— por un momento la voz de Chuuya desapareció, el dolor que le causaba admitir que poco a poco dejaba de ser el de siempre lo consumía— no puedo sentir la profundidad de ningún objeto, ya no logró comer a la misma velocidad de antes.

-¿te atragantaste con la comida?— Chuuya asintió ante la presgunta— esta bien, bueno esta semana prepare unos ejercicios y tareas que debes realizar y entonces—

-dígame la verdad doctora— el silencio gobernó por tres segundos, la doctora espero pacientemente a que Chuuya terminara— mi enfermedad... Se llama degeneración espinocerebral ¿verdad?

No había ninguna duda en su voz, a pesar de que hizo una pregunta, realmente parecía una afirmación, con un suspiro corto la doctora Yosano decidió dejar de mentirle a su paciente, ya hablaría después con sus padres.

-si, tu tienes degeneración espinocerebral.

-... Ya veo...— Chuuya se levantó del asiento y se dirigió a la salida, la doctora Yosano no trato de detenerlo sabía perfectamente que Chuuya necesitaba tiempo, tiempo para afrontar esta cruda realidad.

-Chuuya, ¿ya término tu sesión?

Su madre trato de tocar su hombro, pero este contacto fue rechazado por Chuuya, el cual se hizo a un lado. Como pudo logró articular palabras.

-la doctora hablará con ustedes.

Randou y Koyo se miraron mutuamente y decidieron entrar sin forzar a su hijo a seguir hablando.

Se escucharon algunos gritos, gritos que obviamente eran de sus padres reprochando a la doctora, sin embargo después fueron cambiados a pequeños sollozos.

-deben entender señores Nakahara después de escuchar los reclamos del matrimonio, la doctora decidió tomar las riendas de la situación— Chuuya se siente solo por afrontar esta enfermedad, ahora que sabe de ella podrá correr el doble, podrá reír fuertemente, escribir en muchas ocasiones más de lo habitual, y ustedes como la familia que son deben apoyar a Chuuya.

Luego de la charla con la doctora, la familia completa se retiró a su hogar, en todo el camino Chuuya se mantuvo callado, alejado de todo lo que pasaba.

-fin del flashback-

Dolor, es lo único que sentía ahora, pero debía camuflarlo.

-me importa, después de todo así podré fastidiarte con material nuevo.

El único bache era Dazai y su ruidosa compañia.

-ya dejame en paz.

Sorpresivamente cuando discutía con Dazai lograba distraerse de ese dolor constante.

Tumba de Camelias {Soukoku}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora