El Omega que no quería a su predestinado/ Johndo

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El sonido de las hojas se hizo presente sin ningún rastro del viento, de inmediato Taeil se abalanzo sobre aquel que se encontraba en los arboles, y por supuesto, ambos cayendo al suelo.

Taeil soltó un gruñido molesto, pero desapareció por completo al percatarse de que estaba justamente sobre el omega, Lee Donghyuck, quien ahora no tenía una mirada muy dulce que digamos.

-¿¡Qué crees que haces?! -el omega estaba furioso, ¿quién se creía ese alfa para atacarlo de tal forma? Taeil frunció el ceño al escuchar esa pregunta-. Pudiste haberme lastimado, tonto.

-¿Acaso se te han olvidado las palabras del alfa líder? Según sé, él te menciono que usarás la entrada principal sino querías que algo como esto sucediera.

Donghyuck soltó un bufido molesto, por supuesto que recordaba aquello, pero no esperaba que quien fuera a encontrarlo fuera Taeil, él pensaba en la posibilidad de volver a ser atrapado por Youngho, pero no fue así. Además no le gustaba ser como las demás personas y andar entrando como todos, en el palacio ya lo conocían a la perfección, todos los sirvientes e inclusive el emperador estaban enterados de que a él le gustaba andar saltando por los techos y meterse al palacio de igual forma, es un omega muy hábil.

- ¿No planeas quitarte de encima? -Donghyuck estaba muy molesto, frunció el ceño hacía el alfa, pero recibió un suave gruñido en respuesta de parte de Taeil-. No te atrevas a gruñirme.

-Y tú, deja de comportarte de esa forma, no eres ningún alfa para andar contestando así.

- ¡Ustedes dos! -la voz del alfa líder hizo que ambos mirasen hacía un lado, Youngho no se veía para nada contento-. ¿Qué se supone que hacen?

- Lo lamento, alfa líder -de inmediato Taeil se incorporo, y dió una reverencia como disculpa hacía el alfa líder-, escuché ruido y lo encontré a él merodeando por arriba de los arboles.

- ¡Mentira! -respondió Donghyuck-. ¡Me has tirado de los arboles! Casi me matas.

- Donghyuck... -el omega se cruzo de brazos al escuchar su nombre, y es que no quería tener problemas, no con Youngho, Taeil dió un rápido vistazo hacía el omega y después miró hacía el alfa líder, quien sin alguna expresión en el rostro lo miraba-, Taeil, escolta a Donghyuck fuera del palacio, Donghyuck -el omega lo miro-, ¿qué te dije sobre saltar por los arboles a altas horas de la noche?

- ¡Ya lo sé! Solo quería venir un rato, pronto será el celo de Doyoung, y no le gusta estar solo.

- Lo acompañare yo -tanto Donghyuck como Taeil se vieron sorprendidos por las palabras del alfa líder-, me retiro, haz lo que he dicho, Taeil.

-Sí, alfa líder.

Youngho por fin volvió a los interiores del palacio para poder seguir con su vigilancia, cerca de la habitación del príncipe, después de todo es su deber el protegerlo.

- ¡Lo va ha marcar! -mencionó Donghyuck, no se sentía tan emocionado por el asunto.

- No tiene nada de malo, es su pareja predestinada -mencionó Taeil.

Ambos caminaban a la par hacía la salida del palacio, pero Donghyuck de vez en cuando miraba hacía atrás.

- Sé que lo es, pero... -soltó un suave suspiro-, él no merece un omega que lo rechace, si el estuviera enlazado conmigo por el destino, no sería igual a Doyoung, aceptaría de inmediato el cortejo de Youngho sin dudarlo.

- Las cosas son distintas -Taeil había respondió aquello, pero lo que Donghyuck no sabía es que con todo lo que decía, solamente estaba maltratando a su predestinado.

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El príncipe estaba más que impaciente, iba de un lado a otro en su habitación, podía escuchar sus pasos de un lado a otro, de vez en cuando se detenía para mirar hacía la entrada de su habitación, soltó un suspiro, Youngho estaba tardando demasiado, había dicho que iria por las hierbas, y es que no esperaba que su padre se las quitase tan de repente.

- Príncipe -la voz de Mark lo sacó de sus pensamientos, dejo su ruta continua para caminar hacía la entrada y abrirla, Mark mostró una sonrisa y le entrego las hierbas-, el alfa líder me ha pedido que te las entregue.

- Gracias -por más que quería sentirse agradecido con Mark por haberle traído aquello, no podía, él quería que Youngho fuera la persona que se las entregará, pero claro, las cosas no siempre son como se quiere-, ¿a dónde fue?

- Tu padre ha llamado a toda la guardia, van a hablar algunos asuntos para la llegada de la princesa, ¡no es emocionante! -Mark sabía que muy pocas veces había visitas en el palacio, y sobretodo de algunos emperadores o nuevos gobernantes, y siempre eran esporádicas, es por eso que le emocionaba, sobretodo ver los regalos. algunos eran demasiado extravagantes y otros eran sencillos-. ¿Pasa algo, Doyoung?

- Es solo que -soltó el aire que estaba reteniendo-, ¿podrías decirle a Youngho que venga cuando termine con la reunión?

-Se lo diré, no debe preocupar -la sonrisa de Mark lograba relajarlo solo un poco, pero de cierta forma se sentía muy nervioso.

Pasar el celo con un alfa, y más con su predestinado, Doyoung siempre había logrado calmar sus calores con las hierbas, pero a veces eran demasiado fuertes y la necesidad de querer a su alfa llegaban de inmediato, pero claro, Dasom siempre le había dado solución, tuvo que decirle que aroma lo tranquilizaba más y ella había colocado inciensos con aquel aroma, y así podía tranquilizarse por completo, pero ahora Youngho estaba allí.

Mark estaba a punto de retirarse, pero Doyoung aún tenía algunas preguntas que hacerle.

-Mark -el mencionado se detuvo y miró hacía Doyoung-, ¿haz pasado tu celo con algún alfa?

- En realidad no -mencionó Mark-, es difícil, usualmente mi madre se quedaba conmigo, su aroma me tranquilizaba, ahora utilizo las hierbas, son muy buenas para esto del celo, te calman de inmediato al igual que los inciensos.

-Lo sé -pero Doyoung sabía que algún día esas dos opciones no serían una gran opción, por eso temía, pero no debía de considerar eso como un gran temor, Youngho estaba allí, y la posibilidad de que algo sucediera no era mucha-. Gracias, eso es todo.

- No debes sentirte nervioso -mencionó Mark con una suave sonrisa en sus labios-, Youngho no te hará daño.

Las mejillas del príncipe tomaron un suave color rosa, haciendo que Mark soltara una suave risa en el proceso, sabía que el príncipe quería saber más cobre pasar el celo con un alfa, pero también es consciente de que Youngho no sería capaz ni de tocarlo, ambos estaban en un gran problema, y ese era el rechazo, aunque Doyoung haya demostrado que está teniendo interés en su predestinado, eso no quería decir que Youngho simplemente accedería de inmediato a todo y comenzaría a cortejarlo.

Los alfas a pesar de ser un poco misteriosos, algunos podían dar sorpresas, Youngho era uno de esos alfas, con solo una mirada sabías que estabas frente a un alfa demasiado poderoso y que prácticamente podría ser un insensible, pero cuando lo conocías a fondo, sabías que estabas equivocado, es amable en todos los sentidos, y hace caso al príncipe a pesar de saber que ha sido rechazado.

- Supongo tienes razón -mencionó el príncipe-, gracias por todo.

- No hay de que, príncipe.