Sex 21

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Joaquín 

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Joaquín 

Estaba viendo Instagram en mi celular tranquilo, esperando a que Emilio saliera de su clase de cálculo. Estaba aburrido. Totalmente aburrido, no había nada interesante en mi Instagram y era la única alma que estaba presente en el pasillo. 

De a poco me desabrocho los botones de mi camisa por el aburrimiento mirando de arriba hacia abajo para poder hacer algo.  De repente siento que alguien toca mi hombro y salto del susto. Me doy la vuelta y veo al niño nerd que me había hecho la tarea de historia, ya no recordaba su nombre. 

—Aah hola...tú—respondo amable y él me mira sombrío. 

—¿Acaso no recuerdas mi nombre?—me tenso y miro a todos lados por el nerviosismo—o acaso solo te lo aprendiste para chantajearme— 

¿No era ya obvio eso? 

—Pff pero como crees—intento alivianar el aire pero ni con eso. 

—Me entere que tienes novio...hace dos años—¿se supone que eso es un problema?—y literalmente te lanzaste a mi como una puta para conseguir algo—lo dice tan de repente y abro mis ojos por aquel atrevimiento. 

—Que demonios, ¿¡quien te crees eh!?—me ofendo e intento pegarle una cachetada pero él agarra mi muñeca en un agarre fuerte. 

—¡Con que descaro vienes a ofenderte!—me grita y salto por el grito encogiéndome—¡vienes a mi y te desabrochas toda tu blusa para conseguir algo! ¡Eso es ser una puta! 

—¡C-cállate!—miro hacia todos lados para ver si alguien escucha o algo. Pero solo veo a Ally de lejos viendo la escena. Con los brazos cruzados y negando. 

—!No mereces a nadie! !Nadie te merece! ¡Nadie debería estar cerca de alguien tan repugnante!—empiezo a llorar por el fuerte tacto y por el pánico. 

—¡E-Emilio!—grito asustado entrando en pánico.

—¡Ni siquiera Emilio! ¡Alguien tan Bueno y amable estando al lado tuyo lo deja tan mal! !¡Debería darte vergüenza! ¡Mientras él hace todo por ti tu solo andas zorreando buscando atención!—sus palabras son como dagas y caigo al suelo destruido.—me das asco, al igual que a todas las personas de aquí y a las que conocerás en el futuro, nadie te querrá ¡nadie!. 

Me mira por última vez para negar e irse. 

Y yo mientras sigo en el suelo, llorando y tratar de calmarme. Lo cual se me hace difícil, muy difícil. 

Miro la hora mientras lloro y solo faltaban cinco minutos para que Emilio saliera. Me paro y miro por última vez a Ally quien sigue viéndome de lejos. 

Salgo corriendo por las dos puertas de metal.

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