❧ Placer Culposo » Diego Lainez «

» Tres

➤ 𝐉𝐚𝐝𝐞 ;

Después de una larga plática con Paulina sobre que aveces era un poco pesimista, ella decidió llevarme a conocer un poco más de Sevilla. Fuimos a una plaza comercial para poder comprar u observar el lugar, ella tampoco conocía muy bien así que no nos queríamos confiar a perdernos.

— no se que hacemos dando vueltas — dijo Paulina, yo solté una risa por que justo pensé lo mismo.

— pues chocalas, lo mismo pienso —

— hay que ir por algo de comer, que tal sushi? — sugirió

— claro, no me había dado cuenta de la hora — comente

— ni yo, se a ido muy rápido hoy —

Ambas comenzamos a buscar un puesto de comida donde hubiera sushi, al fin lo encontramos y ordenamos cada una lo suyo.

Como le había dicho, yo pagaría lo mío por que no quería abusar de ella. Aunque debo decir que Paulina es alguien con mucha chispa, trata de ayudar a las personas aunque lleve cinco minutos de conocerlas. La ví y sonreí al darme cuenta de que estaba siendo bastante afortunada, no siempre se encuentra a una persona tan noble fácilmente. Había mucha diferencia entre ella y yo, por que ella es arrebatada y hace las cosas como si fuera algo loco, y entonces entró yo que siempre he sido un poco más tímida.

Nuestra orden llegó y ella comenzo a contarme que su padre es español, por eso es que su madre vive aquí. Era una buena historia de amor, aún seguían juntos y ambos se encargaban de la cadena de hoteles, pero Pau no se llevaba bien con su padre.

Entonces fue donde ella me pregunto por mi familia, tal vez mi cara delató que era un tema fuerte para mi, pues ella dijo que podía confiar en ella pero que tampoco quería presionar.

Yo suspire y decidi que tal vez me haría bien hablarlo, dicen que hablando se libera la mente, el corazón y respiramos aire nuevo.

Le conte algo un poco más discreto, no quería que mi historia fuera la típica de vivo un calvario por la toxicidad de mis padres. Le dije que no tenía buena relación con ellos, ni siquiera entre si la había, peleaban y eso pero no se separaban.

Nunca supe por que, si algo ya no funciona es mejor dejarlo ir. Eso es algo que yo haría, ¿ por que aguantaría gritos y estar gritando?, ¿ por miedo a la soledad?. Dios, me aterra el solo pensar que yo aún soy joven, comienzo a vivir apenas y me queda mucho por vivir, ¿ será que algo así me puede pasar?, yo espero de corazón que no.

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   \ 𝐔𝐧 𝐦𝐞𝐬 𝐝𝐞𝐬𝐩𝐮é𝐬.

Un mes ha pasado y eso me lleva a estar aquí, sentada en el sofá mientras veo las gotas de lluvia caer sobre el ventanal del balcón.

A decir verdad en mi trabajo me a ido de maravilla, veo que son las ocho de la noche aún es algo temprano. Me concentró en mi Copa de vino, sigo viendo la lluvia caer y sigo pensando en lo que ha pasado estas últimas semanas.

En mi trabajo todo perfecto, me había llevado bien con mis compañeros y supimos acoplarnos. Las narraciones y canciones seleccionadas por mi han sido del agrado el público, eso me alegra muchísimo.

Hoy, 3 de septiembre es el día en el cumplo años, no se como pero Paulina había hecho algo sencillo en una de las oficinas del trabajo. Me había sorprendido ya que esa mañana, yo me levante como cualquier otra, hice mi rutina y emprendi el camino a mi trabajo.

Allá todos actuaban normal, era un día cualquiera para ellos y Fernando, me dijo que esta noche iríamos a cenar. Hace días atrás yo lo había sorprendido en su trabajo, habían pedido un anuncio de publicidad de la empresa justo en el programa que yo trasmitía. Mi Estadia ahí era por que el gerente y Julieta irían a ver el contrato, más que nada por que ellos llevan más años en esto y conocen mejor lo que se debe hacer y no.