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Era un día soleado, rayos de luz, entraban por mi ventana, molestando mi sueño, lo que provocó que me levantase, y esa, es la peor mañana de la vida.

Mi rutina era repetitiva, nada interesante que contar sobre ella. Mi vestido como siempre era ancho, de un color amarillo pastel, mi peinado no era algo diferente, igual de aburrido. Un poco de pelo de ambos lados, se enganchaban, en la parte trasera de mi cabeza.

Nada de maquillaje, según las leyes del Reino. Caminé hasta el baño, allí lavé mi cara por una o dos veces, hasta que ya no tenga más sueño y cepillé mis blancos dientes.

Al salir ya me estaba esperando Robert, con su aburrido traje, aunque era de mi edad, era muy apegado a las leyes, muy correcto y estricto, lo que en mi vocabulario significa que también es aburrido.

No lo molesto, porque es nieto de Teresa, sino, estuviera molestándolo a cada rato, lo sé, no parezco ser un problema hasta que me revelo, y ese día es hoy.

- Señorita Tn, su madre la busca en la cocina.

- ¿Cuántas veces te he dicho que no me llames Señorita Tn?

- No lo sé, pero no creo que sea más importante que lo que le vaya a decir su madre, señorita Tn.

- Me vuelves a decir Señorita Tn, y estás fuera del castillo Robert.

- ¿Entonces como te llamo?

- Tn, es simple y casual, no necesito formalidades, ya tengo demasiadas - Dije con una sonrisa sarcástica - Ahora, ¿sabes acaso, que me quiere decir mi madre?

- No, solamente me dijo que te lleve ahí, que tenía algo que decirte.

- Ok, voy ahora mismo, ¿necesitas algo más? - Dije mientras lo veía confundida, pues seguía ahí, no se había ido.

- Solo quería decirte, para ver si te acompañaba.

- Robert, crecí aquí, creo que se ya, cuál es el camino a la cocina.

- Claro, es verdad, te veo pronto, Adiós.

- Adiós - Es muy extraño a veces.

Fui por el pasillo largo, es tan vacío por aquí, pero bueno, debía ir a la cocina pronto, sino, mi madre, me regañaría.

Al llegar, ya estaba ahí mi madre, con una plato de galletas con chispas de chocolate, mis favoritas.

- Mamá, ¿me buscabas?

- Gracias por vestirte con el vestido favorito de tu padre y el mío.

- Oh, ¿enserio es su favorito? No lo sabía - Cortesía Tn, piensa en cortesía.

- Si hija, es muy hermoso, ¿no es así? - Es horriblemente feo madre, y muy incómodo.

- Si, claro que sí madre - La sonrisas no se me dan bien, siempre se terminan viendo falsas.

- Si, te buscaba para decirte que te vistas bien hoy, aunque ya lo estás por primera vez.

- ¿Gracias?

- Tu padre está en la sala, te busca, va a decirte algo muy importante, no te lo tomes a mal, ¿si?

- Lo intentaré, te veo luego madre - Dije, mientras robaba un par de galletas del plato, enfrente de mi.

La sala, no estaba muy lejos del lugar en el que ya estaba, así que al entrar, vi a papá con una copa de vino, viendo fijamente la chimenea, mientras se sentaba en su sillón favorito.

- Nunca entendí que es lo que veías allí.

- ¿No te parece fascinante como la leña se quema lentamente, mientras las llamas la absorben? Es algo interesante Tn.

- No para mi. Vine aquí por algo padre, ¿por qué no nos hacemos un favor y me dices rápido lo que quieres decirme?

- La paciencia es una virtud hija, al parecer tu no la tienes Tn.

- No creo que tampoco sea algo que tengas tú, todo lo que sé, lo aprendí de ti padre, lo que soy, te lo debo a ti.

- Buena chica, por eso es que te vas a casar con James, ¿verdad? Me lo debes, por todo hija mía, no arruinarás esta gran oportunidad, tu sabes que lo-

- Lo sé padre, ¿pero, por qué esto es una oportunidad? Ni siquiera nos llevamos bien. Si me quieres encontrar asesinada en el castillo en uno o dos años, es culpa de él.

- No exageres Tn, no te odia tanto así. El quiere intentar algo contigo, quiere una vida contigo, se está integrando a la familia - Ay, ajá.

- ¿Estás con él?

- No es que escoja un lado pequeña, siempre te he apoyado, y lo sabes, solo que esta vez es diferente.

- ¿Eso es lo que me querías decir?

- No, lo que te quería decir, es que, la Familia Gallagher, se mudará a nuestro castillo, hasta que ustedes se casen.

- ¡¿Qué?!

- Lo que escuchaste Tn.

- No es justo padre, ellos no pueden venir aquí, es mi casa, arruinarán mi vida, ¿eso es lo quieres? Se supone que me querías.

- Hija...

- Pero papá, esto no puede ser, en las reglas del Reino, está que los esposos, no pueden verse hasta el día de la Boda.

- Hija...

- Papá, el es un patán, no respeta nada, solo quiere ordenar papá, el muy idiota ese, vivé molestándome todo el tiempo, creo que esa es su energía.

- Hija...

- Estoy tan cansada de él, no me quiero casar, papá tengo quince años, no treinta, por favor papá no.

- Tn...

- Esto no está en las reglas estipuladas por mi tatarabuelo, estás acabando con ellas papá, hasta que el pueblo se enteré de esto.

- Tn...

- ¿QUÉ?

- Atrás de ti - Giré hacia atrás, y el peor momento para vivir, que me caiga el piano real en la cabeza ahora mismo por favor.

- Ou, Familia Gallagher, bienvenidos al Castillo, je, je. - Maldita sea.

- Gracias Señorita Tn - Dijo la Señora Gallagher, ahg. ¿Por qué nací con esta bocota de decir cosas, cuando más me tengo que callar?

- Buenos Días - Dijeron al unísono todos los hijos de los Reyes del Reino de Asgard.

- Buenos Días igualmente niños - Dijo mi padre, pero de niños, pues no tienen nada.

- Si me disculpan, me tengo que retirar hacia mi alcoba - Pero, como siempre James, me llevo la contraria.

- No te disculpo - Maldito Grinch, pero no de Navidad, sino de la vida en sí.

Todos lo miramos expectantes para que dijera algo, pero el muy idiota, no tenia ni idea de que la más inteligente entre los dos, soy yo.

...

Hasta Que La Vida Nos Separe... (Ryan Gallagher)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora