10: El desconocido.

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Una vez más repetí la rutina de levantarme a las 6:00 AM. Aunque mis clases comenzaban a las 9:00, me levanto temprano, porqué quizá a lo largo de todo el día, no me da tiempo de hacer ejercicio, entonces, prefiero hacerlo por la mañana. Así que me levanté, apagué mi alarma, y sentí que había descansado totalmente bien. Fuí al baño a lavarme la cara, al mojarme sentí un tipo de ¿Flashazo? ¿Podía llamarle así? Pero fue un recuerdo que me hizo retroceder hasta tocar la pared.
Ese recuerdo tan repentino vino a mi como una ráfaga de luz, solo pude ver una vez más a un chico, de cabello oscuro, usando una sudadera gris. Pero su cabello era lacio, despeinado.
Y entonces con la misma rapidez que apareció, desapareció. Me senté por un momento porqué me sentí aturdida.
¿Qué demonios acaba de suceder? No tengo ni idea, pero, necesito continuar con mi rutina. Entonces me levanté y terminé de lavarme el rostro, apliqué bloqueador y regresé a ponerme ropa de ejercicio y tenis, tomé mis audífonos, los conecté a mi celular y salí de casa. Primero hice un calentamiento, porqué si no podía darme un calambre o algo lol.
Y seguido de eso, comencé a trotar para luego correr, mientras eso sucedía sonaba la canción: "Helicopter" de CLC
Cuando menos me di cuenta, ya había corrido más de cuadra y media, mientras que mi mente seguía en el acontecimiento de cuando desperté, esas situaciones comenzaban a incomodarme, porqué no sabía que podría pasar, y si no era una persona del todo buena? O si si lo era? Todo era un 50/50 y creo que todas las personas que aparecen en tu vida, es por una razón, siempre te dejan una lección. Dejando mis pensamientos de lado seguí corriendo. Debo aceptar que mi día comenzó muy agitado, sin embargo para despejarme decidí pararme en los juegos que había, a pesar de mis más de 20 años disfrutaba muchísimo pasearme en los columpios, entonces me senté en uno, apenas estaba amaneciendo, el sol salía despacio, entonces me tomé el tiempo de admirar un espectáculo tan maravilloso. Mi música continuaba, pero se detuvo cuando recibí una llamada.
Contesté sin revisar el nombre de el remitente de ella.

– Bueno?– respondí.
– Primero que nada, buenos días, es muy temprano– Respondío la otra persona.
– Jajajaja, ¿Yoongi?– dije
– Sí, harú, ¿No te parece que es muy temprano para que estés corriendo? – respondió con diversión.
– ¿cómo sabes que estoy corriendo?– pregunté.
– me desperté porqué, ummhh, tuve un mal sueño– hizo una pausa y continuó– y entonces me levanté a la ventana y vi alguien corriendo, entonces, la abrí y vi que eras tú, entonces cuando te perdiste de mi campo de vista decidí llamarte, ¿dónde estás ahora?– finalizó.
– estoy en los columpios de la otra cuadra, ¿Quieres venir?– pregunté.
– Bueno, entonces ya bajo, ¿No tienes frío? Siento que el clima está algo fresco el día de hoy– respondió
– ¿Sabes por qué está fresca la mañana? – pregunté aguantando las ganas de reír por el estúpido chiste que iba a hacer.
– No – respondió con un poco de duda.
– Porqué es de hoy!!!– y estallé en risas.
Mientras yo reía, escuché un silencio al otro lado del teléfono.
– Bueno, tu chiste, fue pésimo, pero veo que amaneciste de buen humor, ya bajo.– dicho eso, colgó.
Y así mi música continuaba sonando, pero yo me sentía más concentrada en jugar en el columpio y así pasaron unos minutos hasta que Yoongi apareció delante de mi, y detuve el columpio.
– Buen día, esto es muy temprano, deberíamos dormir más tiempo– dijo al llegar– y extendió hacia mí una sudadera de color negro, acto seguido que la tomé y me la puse.
– gracias, ya me había dado frío aunque corrí, mira– le mostré mi reloj, y marcaba que había corrido 2.6 kilómetros– hace varios minutos que me detuve y me dió frío, te la devuelvo ya que la lave– y así paré de hablar.
– no te preocupes, devuelvela cuando quieras– dijo desinteresadamente.
– Gracias– dije
– ¿Quieres un poco de café?– me ofreció del termo que llevaba.
– Se me antoja, pero, la verdad, creo que necesito agua– le respondí
– Bueno, creo que, pasar tanto tiempo con Jin, y Nam te pegan sus chistes tan malos, creo que deberían hacer una competencia para ver quién hace el peor chiste– dijo riendo al final.
– ja, ja, ja, ¿Tú crees? Es solo un chiste tonto que leí en un tuit. ¿Quieres escuchar música mientras vemos cómo amanece?– pregunté cambiando el tema.
– está bien, dame el otro audífono.– respondió aceptando mi petición
Y así, disfrutábamos de un silencio cómodo, mientras apreciábamos el arte que era la apreciación del amanecer mientas que, en nuestra playlist sonaba la canción: Home de Ovan, y Shaun.
...

Rato después ya que había pasado el espectáculo del amanecer, revisamos la hora. 7:47
– Yoongi– dije.
– ¿Mmmh?– gruñó.
– ya es tarde, debemos prepararnos para ir a clases– dije.
– Ahh, sobre eso...– hizo una pausa.
– ¿Qué? – pregunté.
– es que no iré a la primera clase– dijo con pena.
– ¿Por qué?– pregunté.
– iré a ver lo de un trabajo– respondió tratando de quitarle importancia.
– ¿En dónde? – volví a hacer otra pregunta.
– Si, bueno, ummhh, recuerdas que cuando éramos más jóvenes, me gustaba escribir canciones y que quería producirlas en algún momento?– preguntó.
– Sí, jamás lo olvidaré, era algo que te hacía feliz.– respondí.
– bueno, pues aún lo hago, entonces, encontré en internet una oferta de que buscaban un productor para una casa disquera– hizo una pausa, esperando a que yo dijera algo, pero yo seguía viéndolo con atención– y pues, me contactaron ayer en la noche.– finalizó.
– ¿Y por qué no me habías dicho antes?– respondí con emoción – soy feliz de saber que seguiste haciendo lo que te hace feliz, aunque lo hayas ocultado, soy feliz de saberlo ahora!!– dije eso y lo abracé, y me sentí mejor al saber que mi abrazo fue correspondido.
– gracias por animarme siempre a seguir lo que me hace feliz– dijo.
– ¿Y tienes algunas canciones ya hechas?– pregunté por simple curiosidad.
– Sí, y están en una plataforma, bajo un pseudónimo, pero en realidad me interesa más llevar acabo la producción, igual, quieren hablar conmigo– finalizó.
– es increíble!! Entonces, nos vemos más tarde para que me platiques que te dijeron– respondí con aún más entusiasmo.
– nunca me dijiste que querías hacer eso de tu vida, ¿O es solo un pasatiempo?– hice una pregunta más.
– en realidad si me hubiera gustado dedicarme al 100% a esto, pero ya sabes cómo son mis padres, me dijeron que tuviera algo que pudiera darme de comer y tener una buena vida y después hacía lo que quisiera, entonces tuve que dejarlo como pasatiempo— respondió con decepción.
— pero lo importante es que se te está presentando la oportunidad— dije animándolo.
— sí, eso es lo bueno— contestó.
— entonces vámonos ya, ve y consigue esa grandiosa oportunidad, recuerda hay que convertir cualquier momento en oportunidad. Espero que tengas éxito en tu entrevista, llámame al finalizar— dije.
— Gracias harú, no quería decirte por si fallaba en ello, y te decepcionaba por eso— respondió apenado.
— hagas lo que hagas, así triunfes o falles, no importa, eso no define tu valor ante mi, lo importante es que lo intentaste, y eso te hace ser tú, mi cariño siempre será el mismo, pero está bien si no me lo dices de inmediato, solo tómate el tiempo. — terminé de hablar y lo abracé una vez más, y una vez más me correspondió.
— Gracias— se limito a decir mientras me abrazaba.
Y así, terminó nuestra reunión repentina mañanera.
Llegué a casa, me quité la sudadera de Yoongi y la metí a la lavadora aprovechando que mamá estaba lavando y corrí a bañarme para llegar a tiempo a clases.
Después de eso, baje a desayunar y me encontré con mi mamá.
— no te había visto esa sudadera antes, ¿De dónde salió?— preguntó.
— Es de Yoongi, lo encontré en la mañana que salí a correr, y me la dió porqué el clima estaba fresco. ¿Sabes por qué estaba fresco el clima?— y ahí iba otra vez mi estúpido chiste, lol.
— ah, bueno, igual te la dejo sobre tu cama cuando se seque; no sé porqué estaba fresco— respondió mamá.
— porqué la mañana era de hoy!— y volví a atacarme de risa.
— Bueno, creo que haré como si no hubiera escuchado tu pésimo chiste— respondió yéndose a la cocina.
Después de eso, lavé mis dientes, apliqué labial, tomé mis cosas y salí a tomar el camión.
...
Al llegar a la universidad, ví que no tenía que correr, había llegado 15 minutos antes, entonces, caminé hasta el aula, y justo al subir las escaleras, una mano tocó mi hombro.

— disculpa!— dijo la voz que me detuvo.
Decidí voltear —Dime— respondí.
— Ya sé que esto te va a sonar de lo más raro, pero ayer tu y yo tuvimos un accidente— dijo con seriedad.
— ¿Tuvimos?— pregunté. Todo estaba siendo tan raro.
— Sí, ayer tu y yo chocamos pero llevabas tanta prisa que dejaste esto en mis cosas— dijo sacando de su portafolio una pulsera dorada, que era mi pulsera dorada.
— y cuando volteé ya habías desaparecido, entonces la guardé con la esperanza de devolvertela, porqué sentí que ya te había visto en otra parte— terminó y extendió su mano para dármela.
Acto seguido yo extendí mi mano para recibirla, pero al tocar sus dedos, sentí una corriente eléctrica que recorría todo mi cuerpo, sentí que mi corazón latía con tanta fuerza, y traté de disimular pero solo la tomé.
— disculpa, ¿Te encuentras bien?— preguntó el desconocido.



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