Lovely [Sun Wukong X Oc]

🍑Inmortalidad🍑

¿Cómo es que aquello había ocurrido? Solo podía recordarla recostada en su cama, cansada, diciendo que dormir un poco la haría sentir mejor, pero al momento que cerro sus ojos ya no volvió a abrirlos.

Hace unas semanas, Ashia había enfermado de gripe, pero con el pasar de los días fue empeorando al punto que no podía levantarse de su cama. Su pareja la cuido lo mas que pudo, llamo a doctores de los pueblos de alrededor para que la revisaran y le dieran la cura, pero la mayoría respondía con "Solo esta cansada, necesita descansar unas semanas y estará como nueva"  Wukong no estaba satisfecho con aquellas palabras pero decidió hacerle caso a los profesionales.

Ahora mismo estaba ahí, junto a Liuer y Bagie, viendo como estaban velando el cuerpo de aquella chica de color. No importaba cuanto tiempo pasara, Wukong aun seguía en shock, mirando el cuerpo de su amada recostada como si tan solo estuviera durmiendo.

Unos cuantos sollozos se escuchan en aquella pequeña casa, casi no había nadie, ya que los únicos amigos de Ashia eran aquellos 3 antes mencionados, el maestro de Liuer y unos cuantos comerciantes con los que siempre hablaba cuando hacia sus compras.

Liuer estaba llorando, siendo consolado por su maestro, mientras que Bagie no dejaba de limpiarse la nariz de tanto lloriqueo y para sorpresa de todos, el rey mono no había sacado ninguna lágrima hasta el momento, pero tampoco había dicho ninguna palabra desde que recibió la noticia de su novia fallecida.

--D-Dansheng... ¿P-Porque Ashia tiene e-el pelo s-suelto?-- pregunto Liuer llorando sacando un poco del shock al rey mono-- Ella odia c-cocinar con el p-pelo suelto

El corazón del sabio se estrujo al oír eso, ya que poco a poco le estaba llegando el sentimiento de todo lo que estaba pasando a su alrededor, aun sin poder creerlo. Era momento de despedirse, todos los presentes pasaron a dar su último adiós a la joven de pecas, siendo ahora turno de Liuer y su maestro, ambos lloraron la perdida, pero mas el pequeño monje, quien abrazo la cama donde se encontraba la chica diciendo que no quería alejarse de ella.

Bajie fue el siguiente, el de igual forma lloró pero se despidió de la forma más cordial que pudo tratando de contener sus sollozos de cerdo. Ahora era momento de Wukong, quien se acercó al cuerpo con lentitud, tomo su mano notando como hacia falta aquella calidez que portaba, dirigió la mirada al rostro de la chica, pareciendo que estaba dormida junto a unas cuantas flores que habían puesto a su alrededor.

La respiración del novio se comenzó a agitar, mientras venían millones de recuerdos de la chica enfrente suya, sonriendo y estando viva. Wukong soltó la mano de su novia y escapo de aquella casa junto a los gritos de Bagie de fondo.

El rey llegó al bosque, donde cayo de rodillas al suelo y puso sus brazos en el suelo al igual que recargaba su cabeza ahí y a los pocos segundos, comenzó a llorar, era de los llantos mas desgarradores que alguien podría escuchar alguien su vida. Tanto era el dolor, que incluso puso una de sus manos sobre su corazón tratando de quitarse aquel dolor insoportable de su corazón pero parecía imposible.

--¡D-Dansheng!-- Liuer hizo acto de presencia junto con Bagie.

--¡M-Mono!-- dijo el cerdo preocupado-- ¿Por qué escapaste?

El rey mono, aun en la posición que se encontraba permaneció en silencio, haciendo que sus amigos se preocupan por aquello y se acercarán a el.

--¿Dasheng?-- pregunto el pequeño monje preocupado.

--Ashia... murió...--- murmuró el sabio sollozando-- murió... murió...

Sus amigos se miraron mutuamente notando la tristeza de su amigo y ambos decidieron agacharse para darle un abrazo de consuelo. Wukong solo lloro en los brazos de sus amigos, odiando el hecho de que su novia fuera una mortal y el inmortal... inmortal. 

Fue ahí cuando una idea loca apareció en la cabeza del rey mono, volver a su novia inmortal tal y como él. Sus lagrimas poco a poco comenzaron a desaparecer y aquella idea se hacia cada vez mas grande en su cabeza, creando incluso el plan para llevarla a cabo.

--Es complicado pero tienes que dejarla ir...-- hablo Bajie, a punto de comenzar un discurso para levantar el animo a su amigo.

--No-- dijo el mono separándose del abrazo-- aun le queda mucho por que vivir-- se limpio los restos de lagrimas que quedaban en su rostro-- Voy a volver a Ashia inmortal.

No importaba que volviera a tener tantos enemigos y que todo el cielo quisiera cazarlo, incluso que buda disidiera encerrarlo otros 500 años y le quitara sus poderes, no iba a dejar su amada morir.