Lost (Zororo Roronoa x Reader)

28. Sentir

— ¡Zoro, basta! - gritaba Nami asustada.

— ¡¿Por qué mierda tuviste que hacer eso?!

— ¡Porque no creía que tú quisieras ponerla en peligro!

— ¡¿Y cómo te fue con eso, ah?! —lo tomó de la camiso y golpeó su espalda del cocinero contra el árbol— ¡Casi mueren, cocinero idiota! — Zoro asestó un golpe con sus puños en la cara de Sanji — ¡¿Sabías eso?! —otro golpe— ¡Casi se mueren las dos! —un golpe más— ¡¿Qué mierda estabas pensando?! 

— ¡Zoro! —intentó sujetar Chopper al espadachín en su forma humana; pero fue en vano, Zoro estaba incontrolable y la niebla roja en sus ojos no lo dejaba pensar.

— Así como dices que ella estaba en peligro por haber estado conmigo, ¿No pudiste pensar en que igual estaría en peligro sola? - apretó el agarre de su camisa.

— Si la han capturado, ha sido por Torao - el aire asesino de Zoro se podía ver en sus poros y asestó un golpe que dejó a Sanji tirado en el suelo con Zoro encima de él.

— No me refiero a eso, ¡Maldito idiota! —asestó otro golpe— (Tn)______ tuvo que huir cuando se enteraron de que estaba embarazada de MI hija, ¡¿Sabes que tuvo que dar a luz sola?! —volvió a los puños— ¡¿Sabes que casi mueren mi hija y ella de hambre?! ¡¿Dónde está tu caballerosidad, imbécil?! 

— Zoro, basta —lloraba Nami de impotencia al ver a sus nakamas de esa manera— Sanji-kun no tenía como saber que todo eso iba a pasar.

— Tú viste que ella iba a querer irse conmigo, ¿Verdad? —ignoró las palabras de Nami— Por eso estabas ahí esa vez, no solo para asegurarte de que ella me iba a botar, sino también asegurarte de que yo no podría llevármela a la fuerza —pausó— ¡HABLA! —lo levantó del suelo solo para volver a chocar su espalda contra este.

— ¡Zoro! —chillaba Nami.

— ¡Cien Fleur! —apareció Robin en el lugar donde estaban, y con varias manos, sujetó las extremidades de Zoro; la arqueóloga ejercía toda su fuerza debido a que el peliverde, quien parecía no querer dar tregua al rubio. Chopper rápidamente quitó a Sanji de donde estaba y lo sujetó, ya que solo había estado recibiendo los golpes de un furioso espadachín sin devolver uno.

— Zoro —trataba de calmarlo Chopper— esta no es la manera, por favor. Sanji hizo mal en no ver todo el panorama, pero esta no es la forma de arreglarlo —los presentes veían como la respiración del espadachín se regulaba en el agarre que aún estaba haciendo la arqueóloga— Robin, ya suéltalo —la morena deshizo su agarre, liberando al peliverde que aún luchaba por calmar las ganas que tenía de matar a Sanji. Contó hasta diez, tratando de buscar control en su respiración y se levantó del suelo para dirigir su mirada al rubio.

— Una semana —dijo entrecortado por la furia y el dolor— se enteró de que estaba embarazada una semana después de que nos fuimos ¿Acaso era mucho tiempo para ti? ¿O eres el único en el barco que puede enamorarse?

No obtuvo respuesta, o más bien no quería obtenerlas; dejando al resto de sus nakamas con el corazón en la boca se dirigió al barco, de donde había salido corriendo ni bien Inti —mediante Chopper— respondió a cada una de sus preguntas.

"-— Mierda —empezó a frustrarse el peliverde— Mierda, mierda, mierda ¡Mierda! ¡¿En serio lo hiciste?! —sujetó a la mujer de los hombros, suplicando internamente por una negativa— ¡Responde!

— Yo...

— ¡Capitán, escucho algo por aquel lado! —ambos tensaron su cuerpo y se miraron a los ojos sin saber qué decir o que hacer.